Capítulo 17

16 9 0
                                    

Cuando sonó el maldito despertador me sentía como si cien elefantes hubieran pasado por encima de mí. No quería separarme de mi calentita cama. De inmediato las imágenes de anoche volvieron a mí y no pude evitar que se me escapara una sonrisa. Seguramente si me estuviera viendo la cara de boba que tengo me entrarían ganas de darme tortas. No sé cómo lo había hecho, pero Eric había calado dentro de mí y eso me daba miedo. Nunca había dejado que ningún chico llegara muy lejos, pero con Eric tengo ganas de más.

Al mediodía me fui a trabajar, tenía muchas ganas, nótese la ironía. Encima para acabar de rematar el día me tocó hacer inventario y desempaquetar cajas. A las cuatro horas lo único que quería era irme a casa a tirarme en el sofá y ver una de mis tantas series, Riverdale. Era de las mejores que había visto en mucho tiempo, me encantaba.

Me pasé todo el domingo esperando a que pasara algo, no sabía el qué, pero algo. No pasó nada y eso me dejó inquieta toda la noche.

Al día siguiente esperé a Dan para irnos juntos a la universidad, pero este no llegaba. No sabía que le había hecho o dicho para que estuviera así conmigo. No me respondía a los mensajes y me rechazada las llamadas. No quería estar así con el único amigo que tenía aquí.

Al entrar en el campus pude ver a Eric con sus amigos en la entrada del camino que va al bosque. No sabía cómo actuar con él quería ir y saludarle, y sí, besarlo otra vez, pero no me atrevía. Empecé a caminar en su dirección para hablar con él sobre lo que pasó la otra noche. Creo que teníamos que aclarar lo que pasó entre ambos. Cuando estaba ceca de él me podía esperar cualquier cosa, cualquier cosa menos que Ángela se echara en sus brazos y le besara. Me paré automáticamente sin saber qué hacer. Me sentía estúpida y humillada. Eric en ese momento me miró y yo me giré y corrí dentro de la universidad. No quería que viera que lo que había visto me había afectado.

Cuando estuve a punto de entrar en el baño de chicas alguien me agarro del brazo y me llevo a un lado del pasillo por donde pasaban pocos alumnos.

- Yo... lo siento. Ángela se me echó encima y no pude apartarla... yo lo siento... no quería. - me dijo Eric. En su mirada pude ver nerviosismo.

- Está bien, de todos modos, no tienes que explicarme nada. Nosotros no somos nada y lo de la otra noche solo...

- Lo de la otra noche nada. Esta vez no me vengas con el cuento de que fue cosa de una noche y esas tonterías. Nos besamos porque quisimos, por esto. - me agarró de la mano y sentí como la electricidad subía por mi brazo. Le miré y una pequeña sonrisa se dibujó en su cara. - me encanta la sensación que tengo cuando estás alrededor.

Se fue acercando poco a poco a mí. Sus labios estaban a punto de besarme, pero el timbre que anunciaba el inicio de las clases sonó.

- Creo que será mejor de que nos vayamos. - asentí. Eric me dio un beso en la mejilla y se fue.

Me dejó ahí plantada en el pasillo como una tonta enamorada. Definitivamente me estaba pillando por este chico.

- Chicos ya he subido al campus la lista con las parejas del trabajo. Recordar que este trabajo es una nota muy importante. También os he mandado un correo con todo lo que necesitáis saber del trabajo.

Cuando la profesora dijo eso todo el mundo fue como loco a mirar que pareja le había tocado, yo incluida claro. Este trabajo me ponía muy nerviosa. Cuando abrí la lista busqué mi nombre. Mi pareja era un chico llamado Manuel. No sabía quién era solo esperaba que no fuera el típico que pasa de los trabajos.

AfterglowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora