Capítulo 2

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A la mañana siguiente Marley cumplió con su rutina como siempre y fue al instituto pretendiendo que todo estaba bien, que su abdomen no dolía, que no sentía ganas de llorar cuando se sentaba en su asiento en clase. En glee pretendió que no le dolía estar sentada, que su cuerpo no sufría con cada paso de la coreografía que Mr Schuester había preparado con Britney. Nadie noto sus disimuladas expresiones de dolor. Ni siquiera los dos chicos que solían tratar de pretenderla para que saliera con ellos, uno porque parecía solo querer llevársela a la cama (Jake) y el otro porque al parecer creía estar enamorado de ella. Solo una personas notó los pequeños gestos de la joven cuando hacía algún movimiento que intensificara el dolor que sentía.

-¿Éstas bien?- Preguntó Kitty a su compañera cuando ya todos se habían ido dejándolas solas en el auditorio.

-Sí, claro ¿Por qué no lo estaría?- Preguntó un poco nerviosa sin mirar a Kitty directamente a los ojos, cosa que la rubia notó y supo que la castaña estaba mintiendo.

-Porque me he dado cuenta de que en ocasiones haces gestos de dolor ¿Te has echo daño o algo, estás enferma? Si estas enferma déjame que te lleve a casa, no puedes ir caminando en ese estado, debes descansar.

-Estoy bien Kitty, gracias por preocuparte.- Respondió Marley con una sonrisa cálida.- Deberíamos irnos, gracias por detener los Sluchies.- Kitty la miró sorprendida, no pensó que la chica se daría cuenta de que ella fue quien la quitó de la lista de Sluchies.

-No me lo agradezcas para eso están las amigas ¿no?

-No sabia que me considerabas tu amiga.- Dijo mientras empezaba a caminar para salir del auditorio.

-Lo hago, se que no te he tratado de la mejor manera pero quiero cambiar eso, quiero ser tu amiga sin segundas intenciones.

-Te creo.

-¿Me crees?- Kitty detuvo sus pasos al oír las palabras de su ahora amiga.

-SÍ, sé que no tengo razones para hacerlo después de todo lo que ha pasado, pero eras a la única que no he podido engañar. Nadie se dio cuenta de mi estado salvo tu. Creo que no solo tus palabras sino también tus intenciones son sinceras. Y si me equivoco, no tengo nada que perder.- Respondió Marley, tras darse la vuelta para enfrentar la mirada confusa de Kitty. Estaban a un metro de distancia que se sentía imposible de cortar por parte de Kitty. Marley miró a Kitty directamente a los ojos con tal intensidad que Kitty sintió un vacío en el estomago que le revolvía las tripas, era un sentimiento extraño. Kitty se sentía pequeña en esos ojos azules que parecían vacíos, sin miedo a nada, era como si con su mirad le dijera que ya lo había perdido todo y no importaba lo que hiciera pues nada podía herirla más de lo que ya estaba, parecía una muñeca rota que no teme no ser reparada.

Marley siguió caminando y Kitty la siguió al poco tiempo alcanzando la en un par de zancadas.

-Gracias, por creer en mí.- Marley la miró de reojo un momento encontrándose con los ojos de Kitty que caminaba mirándola por completo sin prestar atención al camino. Marley asintió y volvio su mirada justo a tiempo que Kitty estaba a punto de chocar con un cubo que estaba en el suelo con agua.

-¡Cuidado!-Advirtió Marley cogiéndola de la mano y acercándola hacia sí misma para evitar que Kitty chocara contra el cubo. Lo que pasó a continuación fue como sacado de un anime, Marley se enredó con sus propios pies arrastrando a Kitty con ella ocasionando que ambas cayeran al suelo en un golpe seco Marley con Kitty sobre ella.

-¡AH!- Gritó Marley cuando sintió su espalda golpear contra el suelo y el cuerpo de Kitty caer a peso muerto sobre ella haciendo presión sobre su abdomen de manera terriblemente dolorosa haciendo que se le escapara el aliento.- Kitty...

Holding OnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora