Cuando Marley despertó ella se encontraba sin camisa abrigada con una manta y la espalda completamente vendada. También había un persistente dolor en todo su cuerpo. Marley miró alrededor desorientada durante un momento hasta que recordó que Kitty la llevó allí y curó sus heridas lo mejor que podía dándole analgésicos de vez en cuando. Con mucha dificultad Marley se quitó la manta de encima y se sentó en el sillón, fue entonce cuando notó la nota en el suelo situada justo donde Kitty había estado sentada todo la noche sujetándole la mano, lentitud Marley levantó la nota del suelo y la leyó:
Buenos Dias Bella Dormiente,
Salí a comprar comida y medicamentos, volveré tan pronto como pueda. No te sobre esfuerces o las heridas a las que tuve que darle puntos se abrirán.
Nos vemos luego en la habitación,
Kitty.
Marley sonrió a la nota y la dejó a un lado para levantarse y cambiarse de ropa, sus pantalones se habían manchado de sangre y se sentía sucia pero no sabia si seria capaz de soportar una ducha con sus cuerpo sintiéndose como si una manada de elefantes le hubiera dado un masaje y luego hubiera pasado sobre ella.
Cuando Marley por fin había concedido quitarse los pantalones que tenía puestos y ponerse otros ya habían pasado veinte minutos y sabiendo que le tomaría mucho tiempo ponerse cualquier camisa que no fuera de estilo ejecutivo tomó su camisa favorita con algo de pena ante la idea de que se pudiera manchar de sangre y se la puso, era una camisa manga larga azul claro de vestir y era la única de ese estilo que había cogido. Marley sacó un libro y se sentó en la cama con las piernas cruzadas y se puso a leer. Era un libro que había sacado de la biblioteca pública hacía un par de semanas, tenía poco tan solo una semana para entregarlo y como no tenía intención de regresar a la casa de su padre decidió que lo mejor era llevarlo con ella y devolverlo luego.
Marley llevaba unos veinte minutos leyendo cuando la puerta de la habitación se abrió. Kitty carba una bolsa en cada mano, un de la farmacia y otra de algún lugar donde venden comida para llevar. En una de sus manos traía además dos cafés los cuales ella rápidamente deposito sobre la mesa que había frente a la cocinilla que tenía el pequeño cuarto-apartamento.
-Hey Marls, ¿llevas mucho tiempo esperándome? ¿Tienes hambre? Traje café y sandwiches, no sabía que podría gustarte así que traje dos de pollo y dos cafés negros, la azúcar se está en la bolsa si quieres echarle.- Decía Kitty mientras sacaba las cosas de la bolsa.
-Llevo un tiempo despierta ya, he estado leyendo así que no he tenido muy en cuenta el tiempo y si tengo algo de hambre ahora que lo mencionas.- Dijo Marley mientras caminaba hasta la mesa y se sentaba en una de las sillas mirando a kitty quien al verla sentarse en la mesa le paso un sandwich y un par de bolsitas de azúcar junto al café.
-Gracia- Dijo Marley cuando Kitty ya había dejado la bolsa de medicamentos a un lado y se había sentado a comer con ella. Kitty la miro confundida esperando que continuara pero Marley no lo hizo, ella solo miraba su comida de forma ausente.
-¿Por qué?- Preguntó Kitty al cabo de un rato mostrando su confusión con sus expresiones faciales.
-Por traerme aquí y curarme, por no contarle a nadie y llevarme al hospital. Gracias por cuidar de mi Kitty.- Marley solo miró a Kitty en la última parte de su frase y fue con tanta intensidad y agradecimiento que Kitty sintió como se le encogía el corazón. Ella había tratado de olvidar las heridas que había estado curando la noche anterior y esto solo se las recordaba aunque ella no quería ni pensar como Marley había acabado así por más que se lo pudiera imaginar.
-Para eso están las amigas.- Dijo Kitty antes de seguir comiendo sin decir una palabra. Marley tampoco habló.
Ambas pasaron la mayor parte del día sentadas en la cama leyendo, estudiando o pérdidas en sus pensamientos. Eran las dos de la tarde cuando Marley por fin habló.
-¿Estaría en lo correcto asumir que tus padres te echaron de casa igual que a mi porque te echaron de las cherrios y porque yo saque una nota muy baja en un examen?- Marley procuró formular la pregunta en un tono suave y tranquilo para evitar que Kitty se enfadara mucho con la pregunta.
-Sí- Contestó Kitty con mucha más calma de la Marley esperaba.
-¿Te lastimaron?
-Sí.
-¿Quieres volver?
-No lo se.
-Yo no voy a hacerlo. He estado pensando en ello y he decidido que lo mejor para mi es no volver. No es como si él hubiera dicho que algún día podría pero aunque lo hubiera hecho no volvería. Yo tengo algo de dinero conmigo, lo he ahorrado de pequeños trabajos que he hecho. No me pagaban mucho pues con él era difícil ponerme a trabajar pero ahora que él ya no esta podre trabajar más y pedir mejoras saldos. Tal vez consiga algo más fijo y puedo seguir pagando el instituto por mi cuenta. Conozco su firma así que la puedo falsificar. Podría vivir aquí durante un tiempo, no es mucho pero tiene cocina, nevera, una cama y un techo. Es más que suficiente para vivir tranquila.
Marley y Kitty se miraron por un momento antes de que Marley volviera a hablar tomando una de las manos de Kitty entre las suyas.
-Podríamos vivir aquí juntas si quieres, podríamos conseguir un trabajo y ayudarnos mutuamente a pagar nuestros estudios. Se que podrías fácilmente conseguir un trabajo en algún sitio. Tal vez podría enseñarte y podríamos hacer trabajos juntas. Solo tendríamos que conseguirte una portátil y enseñarte lo necesario para el trabajo. Además, no tendrías que complicarte tratando de ser la capitana de las cherrios, podrías dedicarte a solo cuidar de ti misma en vez de preocuparte de llegar a casa y ser lastimada por tus padres. Solo tenemos que sacar buenas notas para conseguir una beca universitaria y salir de esta pueblo. Tus notas son buenas y las mías también podemos hacerlo.
-¿De verdad crees que lo conseguiremos?- Preguntó Kitty mirándola a los ojos con tanto miedo e inseguridad que Marley maldijo el no saber si podría contener sus ganas de acabar con el mundo.
-Sí, se que podemos. La cuestión es ¿quieres?
-No lo se, Marls...-Kitty agacho la cabeza no siendo capaz de mantener la mirada a Marley.-¿Tu estas segura de querer hacer esto?
-Prefiero morir a la intemperie por hipotermia antes que regresar a la casa de mi donante de esperma.- Respondió Marley con odio en su voz sorprendiendo a Kitty por su elección de palabras.
-Está bien, hagamos esto.-Dijo Kitty tras pensarlo unos segundos mirando a Marley directamente a los ojos.
ESTÁS LEYENDO
Holding On
RomanceMarley es una chica que tiene una vida difícil aunque nadie lo vea, su padre es a quien más teme y su casa le parece más dura que el bullying en el colegio. Por otro lado, Kitty es una chica que parece tener la vida perfecta, pero no todo es lo que...