CAPITULO XI: LA FOTOGRAFÍA

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Habían pasado dos semanas desde la última vez que había visto a Daniels, la única comunicación que teníamos era por medio del móvil ya que a pesar de todos mis intentos por salir había fracasado ya que la casa estaba totalmente cerrada, las puertas y las ventanas las había mandado a asegurar Charles para así evitar que yo escapara. A Dani se le hacía muy extraño que yo no hubiese ido a verlo durante todos esos días, le inventé que por algunos asuntos de mi tío estábamos fuera de la ciudad pero que en cuanto regresáramos lo primero que haría sería ir a buscarlo. Lo único que alegraba mis días era que Charles no se encontraba en  casa, al parecer se la pasaba con una nueva conquista lo que para mi era excelente ya que así me dejaba respirar y a la vez me daba la oportunidad de poder buscar alguna pista o evidencia de su delito solo confío en Dios que le dure mucho tiempo el enamoramiento.

Durante todos esos días busqué  por toda la casa, el único lugar al que aun no entraba era la habitación que ocupaba Charles, decidí que este era el momento, el había salido hacía como una hora y por la rutina que estaba llevando en los últimos días deduje que regresaría en aproximadamente siete u ocho horas ya que por lo regular regresaba en la madrugada. Salí de mi habitación y me dirigí a lo largo del pasillo que daba a su habitación, con mucho cuidado giré la manija de la cerradura y para mi suerte la puerta estaba abierta, me colé dentro de ella y me sorprendió mucho ver lo limpio y acomodado que estaba todo, tenía que ser muy cuidadosa si no quería que el sospechara nada. Comencé por los cajones, después el closet  pero no había nada que pareciera de importancia. Entré al baño pero todo parecía de lo más normal, debajo de la cama no había nada ni siquiera un zapato o una pantufla. 

Al parecer mi búsqueda había sido un fracaso más, miré la habitación por última vez y no pude evitar mirar mas de lo necesario una fotografía colgada en la pared, era de Charles con mis abuelos y mi padre, me acerqué y la tomé en mis manos para verla mejor, la expresión de Charles denota tristeza, al contrario  de la de mi padre que se ve sumamente feliz con una gran sonrisa y un brillo especial en los ojos. Decidí que ya había visto mucho y me disponía a devolverla a su sitio cuando vi una pequeña puerta en la pared, al parecer era una caja fuerte o algo así. Traté de ver si estaba abierta pero todo fue en vano, todo parecía indicar que necesitaría una llave para poder abrirla y seguramente solo la tendría ese bastardo. 

Salí de la habitación refunfuñando y me dirigí a la mía, estaba demasiado aburrida sin poder salir. Vivir así era peor que vivir en una cárcel. Mandé un mensaje instantáneo a Dani para decirle cuanto lo amaba, el me respondió al momento algo que me hizo sonreír y darme cuenta de lo mucho que yo le importaba. Encendí el televisor y cambié los canales hasta llegar a una de mis series favoritas, después de una hora finalizó y decidí que lo mejor era dormir una pequeña siesta pero el sonido de mi móvil me indicó que una llamada estaba entrando, contesté lo más rápido que pude al ver en la pantalla el nombre de mi novio.

- ¡Hola amor! - le dije con voz melosa.

- ¿Por que me mentiste Isabella? - en su voz se notaba el enojo que sentía algo que me dolió.

- ¿A que te refieres? - no entendí bien a que se refería.

- Dijiste que Charles era tu tío y que estaban fuera de la ciudad por negocios de el.

- Sí, es verdad. ¿No entiendo a que viene la pregunta?

- No me mientas más - esta vez su voz sonó un tono más alta de lo normal, sentí como mi corazón se aceleró presintiendo que algo malo estaba por ocurrir. - Tu tío acaba de venir a verme y me dijo que ustedes se acaban de casar, ¿Es por eso que no viniste a verme durante estos días? 

- Eso no es verd.... - mi cerebro no acababa de asimilar esas palabras.

- Olvídalo Isabella - me interrumpió, podía darme cuenta que estaba muy dolido y no me escucharía  - Solo espero que no me vuelvas a llamar. Adiós - me colgó, miré la pantalla de mi móvil para verificar que la llamada hubiera finalizado y al percatarme de que así era lo dejé caer en mi cama para después dejar salir todas esas lágrimas que se acumulaban en mis ojos. No se cuantas horas pasaron por que ya era de noche cuando  me iba a levantar pero escuche que la puerta de mi habitación se abría entonces recordé que había olvidado echar el seguro, la persona que acababa de entrar encendió la luz y allí lo vi, era el hombre más detestable de este mundo, el que acababa de arruinar lo único hermoso que había en mi vida. 

- ¿Qué haces aquí? - me levanté para evitar que se lanzara sobre mi ya que estando acostada me costaría mucho más defenderme.

- Vine a darte una buena noticia. - su tono de voz me hizo darme cuenta que estaba bastante ebrio algo que me pareció extraño, vi como una sonrisa de lo más cínica curvó sus labios  haciéndome rogar a Dios por que no permitiera que Charles me hiciera daño - Ya terminé con esa relación asquerosa que tenías con ese muerto de hambre, te acabo de ahorrar el trabajo así que espero una recompensa por eso.

- ¿Y que quieres? ¿Qué te de las gracias por tu generosidad? - le solté con sarcasmo tratando de aguantar las lágrimas al recordar la llamada de Dani.

- No quiero tu gratitud - de un par de zancadas tambaleantes llegó hasta mí - Te quiero a ti - trató de rodearme  con sus brazos pero yo lo evité haciéndolo caer de rodillas, le costó algo de esfuerzo levantarse, se giró y me dijo. - Hoy te perdono Isabella por que estoy ebrio pero mañana te aseguro que pase lo que pase vas  a ser mía.... te juro que mañana vas a ser mi mujer y lo disfrutarás tanto como yo. - fue lo último que dijo antes de salir de la habitación haciendo que me llenara una sensación de nauseas por lo que había dicho.

El hecho de que mi tío me desee como mujer, era realmente lo más asqueroso que había visto en toda mi vida. Tengo que darme prisa por que de no ser así no estoy segura de lo que pueda pasar,  ¿Y si Charles me viola? ¿Me pregunto si sería capaz de volver a ver a Dani a los ojos? Claro que no podría, sería lo más horrible que me podría pasar prefiero morirme antes de vivir algo así. En ese momento tomé la decisión más arriesgada, salí de mi habitación sin hacer el menor ruido y caminé por el pasillo hasta llegar a su habitación, todo estaba en silencio y la puerta estaba entreabierta solo iluminada por la luz de las dos lámparas de noche que se encontraban a cada lado de la enorme cama, así que sigilosamente me acerqué para averiguar si ya estaba dormido y ahí estaba acostado bocabajo y semidesnudo, me acerqué y  me percaté de quesu respiración era tranquila lo que me dio puerta libre para buscar esa llave que quizá me abriría el paso a  las verdades que tanto necesitaba saber.  

Tomé su ropa y me alejé un poco de la cama para poder revisarla, en sus pantalones había un manojo de llaves  así que las tomé y una por una las fui probando para ver cual era la que abría la pequeña cerradura que se encontraba detrás de la fotografía pero al parecer iba a fracasar una vez más en mi intento. Solo me quedaba por probar dos llaves y una era demasiado larga, inserté la más pequeña y no abrió lo que me hizo arder de furia, una voz en mi interior me dijo que intentara con la llave grande, la introduje en la cerradura y para mi sorpresa entró, al girarla mi cuerpo se llenó de júbilo al ver que abría. En el interior había muchos papeles y una gran cantidad de dinero, tomé todos los papeles que había, a continuación dejé las llaves en el bolsillo de su pantalón y los dejé en el mismo lugar de donde los había recogido.

Cuando ya estaba en mi habitación me aseguré de cerrar bien la puerta y de echarle el pestillo, guardé bajo el colchón los papeles y me dispuse a dormir ya que era demasiado tarde, ya con mas calma a la mañana siguiente intentaría escaparme para ir a ver al señor Miller y que el me explicara de manera clara  la información que había impresa en las hojas que ahora estaban en mi poder. Con el paso de los días y conforme la información encontrada vería si aún podía solucionar las cosas con Dani y tal vez... solo tal vez le contaría toda la verdad sobre la muerte de mis padres y los acontecimientos ocurridos con Charles siempre y cuando se mantenga al margen de la situación para así evitar dañarlo a el o a su familia. 

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EL SIGUIENTE CAPITULO QUIZÁ LO SUBA HASTA LA PRÓXIMA SEMANA AUNQUE TODO DEPENDE DE COMO ESTÉ DE TRABAJO E INSPIRACIÓN. GRACIAS.

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