Triángulo amoroso [Terminada]

Capítulo 16

Sakura se encontraba tirada en el suelo mirando el techo por el cansancio del día anterior al arreglar todo en su lugar, además de tirar a la basura algunas pertenencias que Itachi y Sasuke habían quebrado. Si pensaba desde el corazón no recordaba mucho, además de que su mente le jugaba con un beso entre ella y Sasuke pero se negaba rotundamente, pues jamás haría eso delante de Itachi, ¿o sí? 

Desordenó sus hebras rosadas con sus manos, recordando el jalón de pelo que le provisionaron para lanzarla al suelo. Itachi se había atrevido a levantarle la mano, de eso no cabía duda porque podía jurar recordar eso detalladamente. Miró su celular en el cual tenía algunas llamadas perdidas de Sasuke. Suspiró y leyó un mensaje de su parte.

"Esta noche paso por ti a las 9:00pm"

Su entrecejo se frunció, pues no había aceptado salir con él pero tampoco podía negar que estaba preocupada así Naruto le dijera que él estaba bien, pero también debía verlo con sus propios ojos. Luego de comer le escribió a Hinata, pues ésta le comentó que Naruto la había invitado a salir esa misma noche y estaba muy nerviosa, ya que se escaparía de casa con ayuda de Tenten, provocándole una risa de apoyo. 

Se levantó y se dirigió al baño a darse una ducha, para después vestirse con una falda, zapatillas y una blusa bastante abrigada. Al escuchar el pitido de una moto se asomó y lo vio, sin poder evitar que sus mejillas se sonrojaran y su pulso se acelerara. 

Bajó y cuestionó.

—¿Cómo sigues?

Sasuke sonrió de lado y se recostó en el manubrio, susurrándole contra sus labios. 

—Sube —Sakura por poco se ahoga con su propia saliva al verlo tan coqueto, lo que significaba que estaba bien así que no debía preocuparse, o al menos eso pensaba, que inocente. 

Luego de conducir por más de media hora notó la gran multitud de jóvenes acompañados de estruendosa música con el género de rock y metal, tragando pesado pues ella tan delicada no creía cuadrar bien en ese ambiente. Cuando notó que se escuchaba hablar por un micrófono recordó a donde él la invitó la primera vez que salieron.

—¡No otra vez!

El Uchiha rio irónico, pues sí, la llevaba nuevamente. 

Al bajarse Sakura entregó el casco y miró hacia los demás motociclistas, chocando su verde esmeralda con el carmín de la sangre de Itachi, que al apenas verla llegar no apartó su mirada de ella. La Haruno tembló, sintiéndose pequeñita ante él. 

—Sasuke, mejor es que nos vayamos de aquí. 

El menor al ver al mayor tensó la mandíbula levemente, pues Itachi no había regresado a la casa desde hace dos días que fue el incidente y ya se imaginaba que estaría haciendo. Pasó su mano por la cintura de ella, notando el ceño levemente fruncido de su hermano mayor.