Un Cambio Inesperado

Epilogo

Epilogo 

   Se encontraba de nuevo en el mostrador, antes de finalizar su turno. Ahora se veía aún más sonriente que la Amy que había solido ser.

_ ¿Qué pasa?_ le preguntó a Rosemary cuando la vio acercarse a ella.

_ ¿Qué crees?_ cruzó los brazos haciéndose la molesta_. De nuevo ha llegado un hermoso ramo de rosas rojas para ti… ¡Ya realmente no nos simpatizas!_ sonrió al decirlo_. Todas ahora queremos a un Mr. Darcy como Christopher Williams…

   Amy se rió al ver lo ocurrente que había sido su amiga.

_ No exageres…

_ Pues, sabes que no lo hago… Es un hombre guapísimo. Alto, fornido, de cabello negro y ojos azules cobaltos… Con una voz que dios… ¡Te llevaste la lotería!... Muchas te odian porque era el soltero más codiciado…

_ Ok… Ok…

_ ¿Y ya han pesado en la fecha en que se casaran?

_ Aún no… Primero viajaremos a Los Ángeles, mis padres quieren conocerlo, al igual que mis hermanos…

_ ¿Quién lo iba a decir?... Amy Parker, una plebeya americana, personal de tierra de American Airlines (Check in) en el aeropuerto de Heathrow, es la futura esposa de lord Williams. Del codiciado futuro duque de Stafford…

_ Si lo dices así, cualquiera pensaría que me casó con él por eso… Sin saber que él renunció a todo eso antes de que le dijera que sí. Pero su padre al ver el hombre en que se había convertido su hijo y al no querer que la dinastía cayera en otros que pudiesen hundir el abolengo de dicha familia, prefirió hacer de tripa corazón cuando supo que su hijo me había elegido a mí. Y que no le importaba en absoluto lo que su madre pensara de eso. La duquesa de Stafford se tuvo que tragar sus palabras y asumir la decisión de su esposo. Y heme aquí…

_ Vamos a ver tus rosas, _ dijo al tomarla por el brazo_ antes de que llegue tu prometido y no nos permita contemplarlas como nos encanta hacerlo cada vez que te envía rosas…

_ Está bien…_ sonrió.

   Entraron en la oficina donde les esperaba aquel ramo de rosas. Se sintió avergonzada cuando todas sus compañeras empezaron a bromear con ella.

   Tomó la nota que había en el ramo y la abrió.

   <<  Hoy tomare una frase de (Everything I do) I do it for you de Bryan Adams, mientras pienso en ti: There´s no love like your love, and no other could give more love, there´s nowhere unless you´re there, all the time, all the way… {No hay amor como tu amor y ninguna otra que podría darme más amor. No hay un donde al menos que tú estés ahí, todo el tiempo, en el camino...}

 

    ¿Ya te he dicho que te amo?... Te amo Amy, feliz aniversario… Aunque hoy oficialmente cumplimos cuatro meses…  

 

                                     Tuyo, completamente tuyo, Christopher Williams…  >>

   Amy sonrió y se permitió contemplar aquel hermoso ramo de rosas rojas.

_ ¿Cuatro meses? ¡No quiero imaginar cuando cumplan un año de matrimonio!_ dijo una de sus compañeras.

_ Deja los celos, Greta…_ le dijo un compañero de trabajo en son de broma_ Es mejor que vayas a mostradores antes de que te manden a llamar.

     Londres. Ciertamente Londres le había llenado de tantas sorpresas y aún más cuando al fin salía de vacaciones. Había culminado su jornada y ahora oficialmente se encontraba de vacaciones.

_ Permiso…_ dijo Christopher al entrar en aquella oficina_ Vengo a buscar a mi prometida.

_ Bien pueda… Ya le esperaba…

_ ¡Johanna!_ le dijo Rosemary_ Deja ahora los celos tú…_ y se rió_ Al menos sabemos que existen caballeros de armadura…

_ Solo bromeaba… ¡Que conste que no soy Greta!

_ ¿Lista?_ le preguntó Christopher a Amy mientras tomaba aquel ramo de rosa.

_ Lista… Ya llamé a mis padres. Les dije que mañana mismo viajaremos a Los Ángeles. Extraño el sol y la playa… Y sobre todo verlos.

   Se despidieron de sus compañeros que aún seguían en aquella oficina.

_ ¿Y tus amigas?_ le preguntó mientras caminaban hacia el estacionamiento.

_ Tranquilo… Ya te han perdonado. No habrá inquisición francesa cuando bajemos del avión o nos encontremos en la aduana…_ se rió al ver la cara que ponía Christopher.

_ ¿Habías pensado que tus vacaciones de regreso a Los Ángeles serían así?

_ Pues no…

_ Yo tampoco, ni mucho menos que Sabrina nos acompañaría.

_ Sólo quiere ver si corre con la misma suerte de encontrarse con su media naranja como te ocurrió a ti.

_ Me apiadare del pobre que ponga los ojos en ella… Su víctima no sabe a quién se ha ganado…

_ Malvado…_ le dijo al darle un pequeño empujón, sin importarle quienes les miraban.

   Sí, era la prometida del hombre más codiciado, ¿y qué?... Ella simplemente se había enamorado de aquel hombre que muy pocos conocían y ella había tenido el privilegio de conocer.

_ Recuerda que llevo tu ramo de rosas rojas…

_ Pues, recuerda que Sabrina me agrada mucho y también es como una hermana para mí.

_ ¡Dios se apiade de mí desde ahora también!_ fingió horror ante aquella idea.

_ Pues, ya lo sabes… Abstente a las consecuencias._ sonrió_. Gracias por la nota… Me encanta esa canción de Bryan Adams…

_ Lo sé… Por eso te la dedique en la nota, obvio… Robándome esa frase que te escribí. No existe ningún lugar en donde quiera estar, sino aquí… Junto a ti.

_ Ni yo… Te amo, Christopher…

_ No tanto como yo…

   Se miraron cómplices, sintiéndose uno ante aquella mirada de amor.

                                                                             Fin