Te conozco.

Capitulo 3

Que fastidioso es tener que buscar un libro que hace milenios que se creó. Exactamente eso es lo que pensaba Ileana mientras buscaba un libro de historia imposible de encontrar.

- ¡Estoy harta!, quiero largarme a mi casa, ¡estúpidos libros!- se sentía completamente libre de rezongar lo que quisiera, la biblioteca estaba vacía, ¿a quién se le ocurría adelantar su tarea de historia en pleno almuerzo? A ella. Eso o escuchar las cosas sucias que Bree hizo con el capitán de natación.

- ¿Pero quién quiere ser doña perfecta?, din din, sí YO.-  se dijo a si misma mientras azotaba un libro inservible en el suelo haciendo eco en la vacía biblioteca.

- Tranquila doña perfecta, ese libro es caro.-

Ileana volteó alarmada al escuchar una voz extraña a su espalda. Esos años de “trabajar” le sirvieron para no confiar en nadie que hable a sus espaldas, y menos si no lo conoce. Se relajó un poco al reconocer esos ojos esmeraldas, Styles.

Sonrió lo más dulce y amable que pudo.

- Se me cayó accidentalmente.- le contestó mientras alzaba el libro y le sacudía el polvo delicadamente. El libro se estaba haciendo pedazos, claro que era caro…

- Por supuesto, he estado aquí lo suficiente como para escuchar tus insultos y maldiciones a la escuela en general.-

La chica estuvo a punto de mandarlo al diablo y tirar todos los libros de esa estantería para que él mismo los recoja pero su voz sexy y ronca terminó por ganar. Lástima, con las ganas que tenía de tirarlos a su cara.

- Que listo eres, ¿acostumbras a espiar?- le preguntó mientras fingía seguir buscando, la verdad es que con él a sus espaldas no puede concentrarse, ni ver la mesa con la que está a punto de tropezar. Harry actuó más rápido y la sujetó del brazo antes de que ella se estrellara contra el pequeño escritorio. Automáticamente Ileana retiró su brazo bruscamente y Harry ensanchó su sonrisa.

- ¿Qué pasa?, ¿no te gusta que te toquen?- preguntó divertido.

- Mira Harreh.- pronunció mal su nombre a propósito. – He tenido un mal día, así que si no vienes a hacer algo realmente productivo aparte de espiarme, vete.- pidió lo más amable que pudo.

En todos los años de escuela Ileana nunca había sido antipática o grosera con alguien… simplemente se está cansando, fingir es realmente muy cansado. Su cordura y paciencia se podían ir a la mierda cuando quisieran.

- Está bien, yo sólo quiero ser agradable. Creí que tú también lo serías, así como todos dicen, debo de admitir que hubiera estado decepcionado si fueras completamente perfecta. Nadie lo es, ¿no es así?- esos ojos la penetraban como taladros.

- ¿Qué quieres?, ¿Qué buscas?- le preguntó Ileana quitándose los pelos de la boca.

- Ser tu amigo.- le respondió simplemente.

- Bueno, todos quieren ser mis amigos.- dijo ella recuperándose de su arrebato de irritación.

- Vamos, sé que tú también quieres ser mi amiga, te he visto observándome.-

Pero que chico más arrogante. Pensó Ileana. No se inmutó ni un poco.

- ¿Enserio?, creí que…-

En ese mismo instante comenzó a sonar “I’m sexy and I know it” por toda la biblioteca como la campana de una iglesia anunciando la misa.

Ileana jamás se había arrepentido de poner ese tono de llamada para Dam, pero en ese momento tenía ganas de demandar al que creó la estúpida canción y luego enterrarlo 5 metros bajo tierra. No podía con la vergüenza, ¿Cuántas veces le dijo a Damián que no llamara en horas de clases? Demasiadas veces, pero él es idiota y jamás entiende.

Inmediatamente contestó dándose media vuelta, roja de furia y vergüenza, el estúpido de Harry no paraba de reír.

- ¡¿Cuántas veces te he dicho que no me llames cuando estoy en la escuela imbécil?!-

No le importaba si Styles la escuchaba hablar de esa manera, se puede ir al demonio si quiere.

- Cariño tranquila, lo sé, es sólo que no podía esperar más. Adivina.-

- No tengo idea de con qué estupidez me vallas a salir está vez. Sólo dime.-

- Que sensible estás. En fin… ¡Derek dará una fiesta está noche!-

Automáticamente la chica sonrió… una fiesta de Derek, lo que le hace falta y una idea se le vino a la mente, dirigiéndose a Harry le dijo:

- ¿De verdad quieres ser mi amigo?- le preguntó al chico de ojos esmeralda.

- Ya somos amigos- contestó Dam.

- No te hablo a ti Damián-

Harry estaba confundido pero a la vez tenía un brillo en los ojos como diciendo Te tengo.

- Por supuesto.- contestó Styles.

Dirigiéndose de nuevo a Dam dijo:

- Mándame un mensaje con la dirección y nos vemos allá.- colgó.

- Vamos a una fiesta está noche, sólo recógeme en mi casa a las 9, y estoy completamente segura de que sabes donde vivo.-

Por supuesto que lo sabía.