El precio de un deseo

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18 de diciembre:

Sungmin:

La voz de Ryeowook hablando con alguien desconocido fue atrayéndome lentamente de vuelta a la realidad. No lograba descifrar los significados de sus palabras...eran solo...sonidos escuetos. Forzosamente logre abrir los ojos...una luz pálida, demasiado brillante sobre mí, una superficie suave pero desconocida y un olor a medicina que no tardó mucho en revolverme el estómago.

-Kyu...

Una palabra atrapada en mi garganta desde hacía rato pero que debido a aquellas sofocantes manos nunca logro salir.

-Min...oh despertaste por fin –su pequeña y delicada mano cubrió la mía...el tacto era frío o ¿Soy yo el de temperatura baja?

-Ryeok...- Las lágrimas regresaron a su sitio en el exterior, mi voz temblorosa salía en un hilo. – Dios Ryeok... ¿Qué voy a hacer...?

Su rostro se contrajo en preocupación e incertidumbre...mi fiel amigo, siempre poseedor de las respuestas más alentadoras incluso en los momentos de crisis se encontraba en silencio dándome a entender que...la situación era mucho peor de lo que pensaba. Desvíe la mirada...allí me di cuenta de donde estaba. Me senté, torpemente pero logré que mi columna se mantuviera firme.

-No era necesario que me trajeras aquí.

Si Kyuhyun seguro se enteraría y vendría corriendo...no...en estos momentos no sería capaz de guardar la compostura si se me aparecía.

-Te desmayaste Min...

-Eso no tiene nada que ver Ryeowook, me desmaye por el shock...solo tenías que llevarme a mi cuarto.

-Entiendo que fue bastante fuerte pero uno no se desmaya de la forma en que lo hiciste Min...era como si el alma se te fuera por los ojos...estabas mas pálido que un espectro, no es normal Min...hace días que tu cuerpo no está en su estado normal.

-¿Solo fuerte? ¿Me vas a salir con eso justo ahora? ¿¡No entiendes la gravedad de la situación!? Mi salud es lo que menos importa en este momento y mucho menos tiene que ver con mi desmayo –ceño fruncido...su mano contra mi mejilla.

-Perdone que me meta joven Lee pero debo decirle que en este caso su salud tiene un fuerte peso en la reacción de su cuerpo.

Apenas pude oír las palabras de quien finalmente identifique como Kim Jay, mis oídos todavía no se encontraban en su punto y ahora menos...

-¿De qué habla?

-Bueno joven, seré directo, esta embarazado –mis oídos seguían aturdidos...seguramente.

-¿Qué...?

- Que estas embarazado idiota, por eso todos los dolores de cabeza, náuseas, mareos, vómitos y tus...cambios de humor, todo tiene sentido ahora.

Podía ver sus labios moverse...escuchaba el sonido de sus palabras...pero no les hallaba sentido...de por si era imposible...algo como eso es...

-Estoy... ¿Qué...?

-Que hay un bebé en tu interior...un hijo tuyo y de Kyuhyun...aquí...

Algo parecido a un corrientazo me sacudió internamente, baje la mirada hasta el núcleo de la descarga... La mano de Ryeowook estaba sobre mi vientre...un roce muy sutil mas sin embargo...fue capaz de producirme semejante sensación...

-Un...bebé...

Una de mis manos fue al encuentro de mi vientre, mi amigo aparto la suya dejándome sentir la realidad...era casi imperceptible pero...el ligero cambio en mi abdomen usualmente plano...estaba.

El Resplandor de un SueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora