Días después de que Gabriel se llevara a Boris por la fuerza, Julián logró reunir a todos los que creía necesarios para ir en la búsqueda de su novio. Se encontraban en el departamento de Koka y Tati planificando cómo sería el rescate. Ambas ya estaban listas para enfrentarse al pastor y su perverso hijo.
Durante el breve tiempo que los muchachos llevaban trabajando para ellas, en la discoteca, le habían tomado mucho afecto a Boris por ser una persona alegre y transparente, por ello ya se encontraban comprometidas con Julián para todo lo que necesitara. Camila y Felipe continuaban acompañando a su amigo y pensando cada detalle del plan: Estaban a la espera de que llegaran los antiguos amigos de Gabriel, aquellos que se hacían llamar "La Fraternidad", a los cuales hacía un tiempo, Julián había amenazado con llevar a la justicia por ser cómplices del abuso que Gabriel cometió con él. Desde ese día prometieron ayudarlo en lo que necesitara y, por lo mismo, aparecieron en la boda, para incomodar a Gabriel.
Ahora serían de gran ayuda, pues uno de ellos era periodista y estaban dispuestos a utilizar a la prensa para desenmascarar al pastor y sus turbios negocios de tráfico.
No pasó mucho tiempo antes de que entrara Bruno al departamento, precedido de los tres examigos de Gabriel para comenzar con la reunión. Francisco, Nicky y Alex tomaron asiento, junto al resto que los esperaba.
―Qué bueno que estemos todos reunidos como se los pedí ―declaró Julián, desgastado tras las terribles horas que había pasado sin su novio―. Ya saben lo que ha ocurrido y, conociendo a Gabriel, estamos en contra del tiempo. No podemos dejar que Boris pase más horas cerca de él. ―Su mirada estaba perdida, buscando una respuesta.
―No podemos dejar que le haga daño a Boris ni que continúe utilizando a los niños del hogar ―intervino Camila, afligida. Tenía una mano tomada de Felipe.
―Hemos venido como te lo prometimos, Julián ―anunció Alex, mirando a sus otros dos amigos―. Estaré en una deuda toda mi vida, por no haberte protegido de esa mierda de Gabriel cuando eras mi novio. Haré todo lo que esté a mi alcance para ayudarte. ―Se miraron con tristeza.
―Yo me siento avergonzado por ser cómplice de Gabriel esa noche. Estaba drogado y fui un hijo de puta al permitirlo. ―La voz de Nicky sonaba quebrada―. Por favor, déjame enmendar mi error ―pidió, extendiendo su mano hacia Julián, quién tardó unos segundos en responder.
―Cuenten con nosotros para todo lo que sea necesario. No puedo creer todo lo que ha hecho Gabriel en su miserable vida ―reprobó Francisco, el rugbista del grupo―. Y pensar que lo consideré mi amigo, ¡es una mierda! ―exclamó con ira, empuñando sus manos en sus rodillas.
―Gracias, de verdad que los necesitaré. ―Julián intentaba hacerse el fuerte, pero su cara reflejaba el sufrimiento.
―Hemos estado pensando cómo haremos para enfrentar a esta gente ―aclaró Koka, sentada junto a su novia―. ¡Tenemos que encontrar a Boris y desenmascararlos! ―Sonaba decidida.
―El problema está en que no estamos seguros de dónde tienen escondido a Boris ―dijo Felipe mientras les mostraba una foto del hogar de niños sobre la mesa―. Puede que aquí lo tengan en la bodega, pero sería muy obvio. ―Pensaba en dónde más podría estar.
―¡En la casona de los Ferrada, menos! ―Camila tenía unas imágenes en su celular―. No creo que su tía ni la directora del colegio sepan lo que sucede. ―Se acomodaba en el borde del sillón.
―¿Y su colegio? ―preguntó Alex―. Ellos también son dueños de ese lugar, tal vez allí tengan dónde ocultarlo. ―Miraba a los muchachos, que no habían considerado el colegio en sus planes.
―Puede ser, pero sería peligroso para ellos tenerlo donde hay tanto movimiento. ―Felipe le daba vueltas a esa idea―. Aunque ahora, en vacaciones, tal vez lo utilicen. ―No contaban con aquel lugar en su estrategia.
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El Hijo del Pastor ©️ [ Disponible en físico ]
Mystery / ThrillerDisponible en Kindle, Buscalibre y en Chile en Torre de Marfil Ediciones ~ "Siempre hay un lobo con piel de oveja en los rebaños del señor..." Aquella mañana en que Boris lo vio por primera vez, no sólo encontró al hombre mayor que desataría un sin...