– ¡¿a dónde vas Stephanie?! –Gritó Niall corriendo tras de mí y yo me detengo antes de entrar al baño de hombres.
– A buscar un refugio Horan, tengo que salir de aquí. –Me volteo a encararlo.
– ¿para qué carajos quieres un refugio?
– Porque si me quedo aquí tendré que calarme a Liam y luego quizás un ataque de Zayn… y no quiero estar para ambas.
Doy vuelta y entonces desde adentro escucho un ruido y me hielo…
– está ocupado. –hablo y me alejo unos pasos.
Niall achica los ojos y pega más su cabeza a la puerta.
– Se escuchan unos golpes… mierda esa es la voz de Lia…
– Quítate…
Lo hago un lado y pego mi oreja de la puerta. No escucho muy bien… pero algo se distingue. “No lo repetirás de nuevo” “Ella no te pertenece” “Si algo le sucede lo pagarás con tu vida” uno que otros quejidos… uno que otros golpes… “Éste es el último año Malik, el último” es lo último que escucho y la puerta se abre inmediatamente y me congelo ahí mismo en la puerta mientras mi respiración se priva. Un chico alto y de pelo castaño enarca una ceja con confusión al verme y se hace un lado, al siguiente que miro es a Liam.
– No tengo idea de qué carajos haces aquí, pero vámonos.
Habla con firmeza y toma mi brazo llevándome a no sé dónde. Volteo a mirar a Niall y éste me hace su típica seña de “te hablo luego”. Liam hala mi brazo haciéndome mirar al frente.
– Camina mierda.
Se queja molesto, los chicos que estaban hace un momento atrás ya no están. Miro hacia dónde me lleva y es a la biblioteca. Abre la puerta y me hala a entrar primero, luego la cierra con seguro. Me encara y coloca ambas manos a su cadera. Miro sus nudillos y están llenos de sangre, trago saliva con dificultad… oh claro… de seguro le partía la madre a Zayn, ¿cómo no se me ocurrió antes?
– Recuérdame… –Su voz es firma y gruesa– ¿por qué mierda… pasó lo que pasó en la cafetería?
Bajo mi mirada y juego con mis dedos… nuestra mañana había sido tan especial. Recuerdo malhumoradamente.
– ¿Estás sorda Stephanie? –Lo miro sumisa y susurro un “no”– ¿entonces por qué no respondes? –siento como cada una de sus palabras están golpeándome en cualquier lugar indebido.
– Porque tú lo sabes… y no quiero recordarlo…
– Pero debes. –Me interrumpe y Katherine aterriza en mi mente de forma secuencial.
– ¿Entonces debo yo recordarte a Katherine? –Mi voz es cortante y él levanta sus cejas en sorpresa.
– Ésta conversación no se trata sobre mí.
– ¡¿Pero por qué te escusas en eso cada vez que te la nombro?! –Grito, que bueno que nadie nunca está aquí.
– No quiero responder eso. –dice y me da la espalda pero yo corro a ponérmele en frente y lo empujo.
– Respóndeme joder.
– ¡Que no quiero mierda! –el hace un gesto con la mano en señal de fastidio y vuelve a darme la espalda.
¿Qué pasó con mi “no más”?
– Esto debe acabar. –Digo y una parte de mí se quiebra como cristal que se cae de una repisa muy alta… y Liam voltea.
– ¿A qué te refieres con eso? –Su voz es sumisa ahora.
– Que se acabó, esto –Gesticulo con las manos a él y a mí– no más Liam… ya estoy harta de tus idioteces y machismo… simplemente eso no es lo que quiero más en mi vida… y no sé cómo puede ser tan idiota para no decírtelo antes.
Cállate, cállate, cállate… no la cagues y no abras más la boca… cállate.
– Si eso es lo que quieres… por mí está bien…
