Mala decision

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Me encontraba sentada debajo de una Palma en la playa. Buscaba con la mirada a los surfers que venían aquí todos los días. Sabía que en ese grupo encontraría a Ash. Me tuve que escapar de Mike, se dará cuenta tarde o temprano pero si le decía que venía a la playa se daría cuenta de todo.

Se que esto no es una buena decisión pero necesitaba saber la verdad y como nadie me diría nada el único que lo haría era el. Debería de estar asustada, por mi sueños y recuerdos se que el no fue bueno conmigo, pero tenía más miedo a saber la verdad que verlo frente a frente. Estaba tan concentrada pensando que le diría que no me fije que alguien se sentaba a mi lado.

- H..Hola - dije mirando hacia mi lado. Se sentaba un chico con pelo marrón y con una sonrisa grande, como si le acababan de regalar algo.
- Lo siento, no te quería interrumpir - rio - te veías muy concentrada mirando hacia la playa - continuó - Soy J-Hope - sonrió nuevamente.
- No te preocupes- rei - Soy ____, un placer - sonreí y tendí mi mano en forma de saludo. Miré hacia el frente de nuevo y vi su tabla de surf incrustada al suelo.
- Eres uno de los surfers - hable intrigada. El asintió y me miró sus ojos brillaban con el sol.
- Si, ando con mis amigos - señaló hacia la playa donde se encontraban los otros chicos y ahí vi a quien estaba buscando.
Su cuerpo y su tabla se movían a la perfección con las olas, su cabello gris mojado le tapaba un poco la cara pero se veía su sonrisa al surfear.

- Y que haces tan sola? - preguntó el chico sacándome de mis pensamientos. Intente sonreír pero solo pensar en lo que haría cuando Ash saliera de el agua me daba escalofríos.
- Vine a hablar con un amigo - mentí. Ash no era mi amigo, Ash no era ni un conocido. No me acordaba de el por completo. El asintió y miro hacia donde se encontraban los demás chicos, venían saliendo ya del agua.
- Bueno ya me voy - dijo tendiendo su mano para tomar la mía.
- Un placer - sonrío y guiño su ojo. Que chico tan dulce.
Sin más se volteo dándome la espalda, formada y quemada por el sol y corrió despacio hacia donde estaban los demás. Me paré y suspiré hondo, era ahora o nunca. Puse mis lentes de sol y mire hacia donde ellos estaban, ahí estaba el secándose el pelo con la toalla y sonriendo mientras hablaba. Como haría esto? Que le iba a decir? Mejor me devuelvo a casa, esto es una mala idea.
Me di la espalda para dar la vuelta pero ya estaba aquí tendría que hacerlo. Me volteé y me dirigí adonde ellos estaban.

Camine un poco y cuando me vio su sonrisa cambio. Le susurró algo al chico que estaba a su lado y ambos me miraron, pero el chico se fue corriendo hacia otra dirección, la verdad no le di tanta importancia solo quería salir de esto. Me acerqué tanto como para que me escuchara pero no me uní al círculo que ellos formaban hablando.

- Ashton - hable, y todos miraron hacia donde mi. Hubo un silencio extraño parece como si nadie lo llamase Ashton.
- Podemos hablar - terminé, el me miro sorprendido como si no se esperaba nada. Asintió y camino hacia donde yo estaba mientras se ponía su polo y despeinaba su cabello mojado. Camine un poco y mire hacia los otros chicos que secreteaban como niñas. Que diablos?

- Que pasa? - preguntó bajo un poco la cabeza cuando empezamos a caminar. El iba al lado de la orilla del mar.
- Y..yo - tragué duro, no sabía como empezar.

Como empiezo? Porque me maltrataste? Mi accidente de verdad fue un accidente? Porque te escondes?

Subí la cabeza para ver su cara confundida. Me fijé en sus ojos y esta ves no tenía lentes de contacto. Se veían perfectos sus ojos grises, de la misma forma en la que estaban en mi diario, el mismo brillo, el mismo todo. Un escalofrío recorrió mi espalda. El se paró y se sentó en la arena y yo hice lo mismo.

-Yo? - repitió para que continuara.
- Yo... tengo una pregunta - dije rápido y el me miro, miraba hacia al frente porque sabía que si lo miraba a los ojos no podría continuar. El asintió lentamente sin apartar su mirada. Trague y sin mas lo dije.
- Tu me amabas? - pregunte y lo mire. Sus ojos se abrieron como platos, no esperaba esta pregunta. Parpadeo varias veces y miro hacia delante.
- De que hablas? - rio - Te acabo de conocer - que bueno eres mintiendo Ash. No podía creer sus palabras.
- Ashton, ya no me mientas. Lo sé todo. - hable seca y su sonrisa burlona se borró. Suspiro y hablo.

- Si te amaba ___ - dijo observándome cuidadosamente. - Aun lo hago - intentó tocar mi cara pero me aleje.
- Entonces porque lo hiciste?! - podía sentir la furia en mis venas. - Porque me golpeabas, porque me insultabas? - tenia tantas preguntas. Bajo la cabeza, no podía mostrar su cara.

- Tu... tú te fuiste con el! - podía ver su rostro cambiar, estaba enojado. - Me engañaste con el! - parecía que iba a llorar pero no de tristeza de furia. Podía sentir miedo, me sentía insegura, pero necesitaba saberlo todo.
- Yo te amaba Ash. Como pudiste?!- pregunté sería. Podía escuchar el latido de mi corazón.
- Tu... no me amabas! Nunca lo hiciste! Por eso hice lo que hice! - gritó y se paró de donde se sentaba. Yo me quede sentada y miraba hacia donde el se encontraba.
- Tu no sabes lo que yo sentía! - alce mi voz y el se rió.
- Tu te fuiste con el maldita - dijo, me agarró el brazo y de un tiron me paró. Podía sentir sus uñas clavarse en mi piel. Esto era un dejavú.
- Tu tuviste un accidente, no te acuerdas de mi, como sabes que me amabas?! - su agarre se volvía cada vez más fuerte.

Vi a alguien cruzar por los lados pero no le di importancia.
- No me toques - me zafé de su agarre.
- Poco hombre - escupí y el volvió a reírse pero esta vez su risa era peor como si sabía algo que yo no.
- Fuiste una estupida al venir aquí - sonrío
- Sola no se viene a los lugares donde solo se encuentran hombres -

Vi que miro detras de mis hombros y cuando iba a voltear a ver, tenían un paño sobre mi boca y mi nariz. El se acercó a mi y tomó mis brazos. Intente no respirar pero si seguía iba a terminar muerta. El olor a a cloroformo corría por mi cuerpo. Intente pelear pero era imposible con dos hombres sosteniéndome fuerte.

- Te arrepentirás de no haber sido mia para siempre! - gritó, una lágrima caía mientras intentaba salirme de su agarra. Podía sentir su garra volverse más fuerte cada vez que hablaba.
- Te arrepentirás de haber venido a buscarme - mis ojos y mi cuerpo se volvían pesados, el se cerco a mi oído y susurro sus últimas palabras, con desprecio, odio y rencor.

- Te arrepentirás de haberme conocido - ...

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