15.

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Belén tocaba la puerta de la gran casa en frente de ella. 

Primer golpe nada, segundo golpe se escuchó un "va", tercer golpe apareció la ex novia de Ecko.

-¿Qué querés?- Preguntó de muy mala gana.

Quién no lo estaría, la chica que había arruinado su relación estaba allí, en su casa.

-Sé que esto es raro, pero estoy preocupada y quería saber cómo está Ecko.- La pelirroja se sonaba los dedos, estaba nerviosa.

Nunca se imaginó estar haciendo esto.

-Y yo que voy a saber.

-Pero ¿no sos la novia?- Rocío rió con amargura.

-Así que no te dijo. Terminamos, más bien él terminó conmigo.- Negó. -Por tu culpa.

-Perdón. Pero estoy enamorada de Matías. Mi intención no era romper una relación.

-¿Te crees que yo no? Si no fuera tu intención no lo hubieras ilusionado.

-Rocío, si él no sintiera algo por mi, hubiera terminado y dejado en claro que no me quería como algo más. Pero así no pasó, él nunca me dejo las cosas claras.- Colocó las manos en su cara como modo de frustración. -No sos la única que está mal por esto.

-Ustedes vivieron algo fuerte ¿no?

Rocío se sentó en el pequeño escalón, Belén hizo lo mismo.

- Para lo chicos que éramos, sí. Yo pensé que después de estar  3 años lejos no volvería a sentir eso que él produce en mí.

-Él te ama, me di cuenta por como sonreía cuando hablaba contigo, y sus ojos brillan demasiado cuando te ve, me di cuenta en aquella fiesta. Nunca me miró así.- Rocío susurró lo último, pero la otra chica lo había oído.

Se había producido un silencio, Sloye lloraba en silencio.

Belén la abrazó, ambas necesitaban contención.

-No puedo creer estar abrazando a la chica por la cual me dejaron.- Ambas rieron.

-Créeme que yo tampoco.

Pelirroja »EckoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora