𝑻𝒂𝒈 ¦ 𝑆𝑡𝑎𝑛 𝑈𝑟𝑖𝑠

6

Viernes, último día en que me relacionaría con Jana.

-Okay, esta es tu única oportunidad de invitar a salir a Jana-dijo Eddie mientras almorzabamos.

-¿Por qué sería la única?-fruncí el ceño.

Ellos se miraron entre sí como si señalaran que soy un idiota. Se equivocaban si eso pensaban, yo era el único coherente del grupo desecho, hace un tiempo también estaba Mike, pero él no podía vernos mucho por culpa del trabajo.
A veces extrañaba el grupo unido que eramos, ahora sólo somos cuatro y medio por la presencia fantasmal de Michael.

-Porque luego de eso ella volverá a ser una Bower's Gang y tu un miembro del Loser's Club-explicó Richie mientras limpiaba sus anteojos.

-Tiene sentido-afirmé-, está bien, la invitaré a salir hoy.

Los chicos me miraron incrédulos. No sé si sería porque admití que tenían razón o por qué otra cosa.

-¿N-No estás ner-vi-vioso?-negué con la cabeza-In-Invitarás a salir a la her-ma-mana d-de Bo-Bowers.

Okay... ahora sí lo estoy, gracias chicos, los amo no saben cuánto.

-Mierda-me quejé.

[...]

-Entonces... hoy es el día-dijo Maggie sacando un par de libros de su casillero.

-Sí-suspiré con una sonrisa.

-¿Día de qué?

Maggie soltó un gran bufido al escuchar la voz de Gwen Ford detrás de ella.
Gwen era una de las amigas chismosas de Gretta, de esas que le llevan los chismes, así era como se enteraba de todo.
Los ojos azules de mi amiga mostraron pesadez al escuchar a aquella idiota hablar, Magg se dio vuelta para enfrentar a esa irritante tonta.

-Día en que no me debes molestar porque me estoy menstruando y en esos días me gusta cortarle la cabeza a personas chismosas, asi que...-hizo una leve pausa-¿por qué no vas al baño a que tu amiguita la gorda Gretta te sostenga tu pajoso cabello mientras vomitas? porque sinceramente eso no te ayuda de mucho, te ves igual de deserebrada y fea que siempre.

La chica salió corriendo con lágrimas en los ojos. Solté una gran carcajada, otra razón por la que amo a mi amiga.

-Creo que en Salem te quemarían por bruja-dije mientras caminabamos por el pasillo.

Amaba el momento en el que caminábamos por allí, me hacía sentir poderosa...los nerd salían del camino con notorio miedo, los chicos lindos nos miraban con frustración porque nosotras no les prestabamos atención y las chicas miraban con recelo y odio por no ser nosotras.

-Bueno... el cabello negro y el carácter ya lo tengo,-sonrió-además, muchas aquí dicen que soy una bruja por "hechizar" a sus novios.

-¿Lo hiciste?-reí.

-Para nada, no es mi culpa que sus novios sean idiotas, a parte, yo estoy bien con Víctor ¿por qué lo engañaría?-se encogió de hombros.

-Otra razón para creer que eres bruja-comenté-, Víctor dejó de ser un mujeriego por tu culpa, hasta parece mejor persona.

-¿Qué decirte? Mis encantos son muchos.

Al llegar al salón nos encontramos con el club de perdedores, mí mirada cruzó con la de Stan, pero la quité al instante, no podía saludarlo... tenía a Gretta y a Gwen observandonos a Maggie y a mi. Si Bowie me veía interesada en un perdedor le diría a Henry y él se enojaría.
Asi que no tuve más remedio que ignorarlo y caminar hacia los asientos de atrás donde nos sentabamos mi amiga y yo.
A mitad de la clase Gretta me pasó un nota.

"Me contaron que estás en detención junto al perdedor de Stan"

Con rapidez tomé un lápiz y escribí...

"Sí, ¿y?"

Me volteé y le indiqué a Maggie que se lo pasara, ella me miró con curiosidad pero se lo pasó.
Al rato el papel volvió.

"Wow, Jana, no sabía que te gustaba acostarte con perdedores"

Tomé mi lápiz nuevamente.

"Dime, Gretta... ¿estás interesada por chismosa o por necesitada? porque estoy comenzando a creer que te tocas pensando en los chismes sexuales que te cuentan"

Sonreí, vamos Gretta, ahora responde lo que quiero...

"Eres una zorra, Jana Bowers"

Genial, caíste gorda estúpida. Rompí el papel dejando sólo la nota en que me insultaba a mí.

-¡Profesora Finch!-la llamé.

-¿Si, Jana?

-Gretta está arrojando papeles con mensajes bastante...-la miré- vulgares. Mire-le enseñé el papel que me llamaba zorra.

-Gretta, a dirección.

-¡Pero!

-¡A dirección!

Sonreí victoriosa, esa ballena no me ganaría jamás.
Ahora debo pensar una disculpa para Stan.