Había transcurrido tres meses desde que Taehyung empezó a cuidar a Cloud, y también desde que Jungkoook y él se convirtieron en amigos inseparables.
Al principio no se trataban mucho y si lo hacían era por la mascota del menor, pero pasando el tiempo se hicieron muy buenos amigos y pasaban mucho tiempo juntos.
Taehyung ya consideraba a Cloud como si fuera su mascota, le daba mucho cariño y le gustaba pasar tiempo con él. En ciertas ocasiones sentía que podía comprenderlo, como hoy.
- Cloud, ¿crees que le guste a Jungkookie? - el de pelaje blanco ladró. - ¿Eso es un sí? - otro ladrido. - No sé porque te hablo de esto si no llegas a entender lo que te digo.
Digamos que también en este tiempo Tae desarrolló otros sentimientos por Jungkoook y ahora estaba profundamente enamorado de él. Y esperaba que el menor sintiera lo mismo.
- Mejor te doy de comer antes de irme. No quiero verte desnutrido, bebé.
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El bus se había demorado más de lo usual esa noche, por lo que Jungkoook llegó una hora tarde.
Ingresó a su hogar, dejó sus cosas en el sillón y camino hacia la cocina buscando a Tae y su mascota.
- ¡Cloud! ¡No debes morder la pantufla de Jungkookie! Se molestará.
Jungkoook entró vacilante.
- ¿Quién está abusando de mi queridísima pantufla, Taehyung? - el castaño saltó por el susto.
- No te escuché entrar.
El pelinegro rió. - Debiste ver tu cara. - las mejillas del mayor se pusieron rojas. - ¿Cómo está mi bebé?
El perrito corrió hacia su amo y éste lo cargó entre sus brazos.
- Fue un mal chico. Mordió las pantuflas de papá Jungkoook, a pesar de que se lo advertí. - respondió mirando a pequeño cachorro.
- ¿En serio Cloud? ¿No te dije que debes obedecer a TaeTae, que es como tu segundo padre?
La bolita blanca de pelos ladró y ambos jóvenes rieron.
- Debería irme, se me hará tarde.
- Cierto, te acompaño a la puerta y así te doy tu paga. - soltó al perrito y juntos caminaron a la sala. - Déjame sacar el dinero de la mochila.
Jungkoook se dirigía al sillón para tomar su mochila pero Cloud, en un rápido movimiento, la tiró al suelo para tomarla con sus dientes y correr por toda la sala.
- ¡Cloud malo!
El muchacho perseguía al animal con cuidado de no chocar con nada bajo la divertida mirada de su amigo.
La mascota comenzó a correr alrededor del castaño y por ende, Jungkoook también lo hizo, pero tropezó y cayó sobre su amigo.
- Yo...lo siento, Tae.
Taehyung miraba atento al chico sobre él, apreciando su bello y varonil rostro. Sujetó su camiseta y sin dudarlo lo besó.
Cloud labrada sin parar y movía la cola efusivamente. Sus acciones lograron algo que tal vez hubiera demorado años.
Ambos jóvenes se separaron sin despejar la mirada al otro, sonrojados y respirando con dificultad luego del beso.
- Jungkoook...yo...lo sien... - otro beso calló al mayor.
- No hay de que sentirlo si los dos queríamos esto hace mucho.
- Entonces, ¿te gusto?
- Desde el primer día que cuidaste de mi perro. - Kim sonrió. - ¿Qué dices de salir mañana a una cita?
- ¿Una cita? ¡Claro! - lo abrazó. - Pero, ¿qué pasará con Cloud?
- Lo dejaré con mi hermano.
Al final la cita tuvo un invitado sorpresa que no dejaba de ladrar ni correr a todas partes.
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Terminé éste en unas horas, wow.
Y sigo sin luz :v
