Juuzou se detuvo de golpe causando que chocara con su espalda, me queje y mire al chico a punto de reñirlo, pero este me miro con un brillo en sus ojos y apuntó hacia algun lugar.
–¡mira yuri-chan!, ahí esta el zoologico al que Shinohara-san me lleva– dijo emocionado todavía señalando.
Gire mi rostro y segui la mirada hacia donde el chico apuntaba con tanta alegría y emoción, y como lo dijo era un zoológico, si estoy en lo correcto es el más grande que hay en el distrito.
–¡hay que ir yuri-chan!– sin esperar mi respuesta me jalo del brazo corriento hacia la entrada.
Suzuya pretendía entrar como si fuera el dueño y un guardia nos detuvo, este miraba al chico con disgusto y a mi con confusion.
–deben pagar antes de entrar–dijo con semblante serio.
Yo asentí y arrastre a juuzou hacia la taquilla donde se compraban por asi decirlo la entrada, saque de mi billetera dinero para pagar las entradas y luego fui arrastrada nuevamente hacia la entrada del zoológico, estabamos por entrar y me detienen agarrando fuerte mi brazo izquierdo, volteo y me consigo con aquel oficial otra vez.
–tss acabo de decirles que tienen que pagar antes de entrar– dijo apretando su agarre en mi brazo.
Mi sangre empezo ponerse tibia y a recorrer mis venas con velocidad, aprete mis dientes y quite mi brazo de su agarre, golpee su pecho con mi mano abierta y este me miro impresionado.
–para su información señor, ya pagamos y si no es molestia vamos a entrar le guste o no– gruñí y aleje mi mano de su pecho dejando caer los dos tickes de entrada.
Agarre la mano de juuzou y ahora era yo quien lo arrastraba, no paso muchos minutos cuando ya suzuya estaba riendo detras de mi, me detuve acordandome que estaba con el y lo mire alzando una ceja, el me miraba divertido.
–¡vaya yuri-chan dejo al policia sorprendido!– dijo para si mismo divertido y estiro sus brazos dando una vuelta sobre su propio eje riendo.
–ah, si, eso–dije pausadamente cada palabra.
–ven, yuri-chan tiene que conocer a mi animal favorito– sujeto mi mano y empezo a correr.
Con este chico no necesito ir al gimnasio, solo pasar una tarde con el y ya parece que has corrido un maraton sin pausa alguna.
–mira yuri-chan, el es mi amigo– dijo saltando mientras señalaba hacia una zona del zoológico.
Mire en esa direccion y me conseguí con la zona de las jirafas, una con el cuello muy largo y un color muy llamativo.
–¿una... Jirafa?– pregunte y mire confundida a juzo.
–siii, es muy bonita, siempre me quedo un rato bajo aquel árbol dibujando– dijo señalando un arbol que quedaba frente al hábitat de las jirafas.
–oh– susurre y luego observe un carrito de helados siendo conducido por un señor regordete con bigote negro.
–suzuya, ¿sigues queriendo el helado?– le pregunte y el giro su cabeza hacia mi asintiendo.
–si yuri-chan– dijo y miro las costuras en su mano.
–pues esperame bajo el árbol donde te sientas a observar a tu amigo– dije y el se fue dando pequeños salticos.
Saque dinero de mi billetera y me acerque al señor de los helados, este me miro amable sonriendo cerrando sus ojos.
–me da un helado de...–quede pensando y no le pregunte a juzo de que sabor quería su helado.
–¿si señorita?– pregunto al ver que me quede callada.
–un helado de fresa por favor– le pedí sonriendo un poco apenada, le pase el dinero y cogí la barquilla.
Camine hacia el árbol y al no ver a juzo me desconcerte, ¿me hacia complarle un helado para luego desaparecer?, ¿que clase de estrategia es esa?, quede parada mirando a todos lados como una estupida con la barquilla en mi mano derecha.
–¡¿suzuya?!–lo llame en voz alta pero no tanto, al no tener respuestas suspire dispuesta a lanzar el helado e irme a mi casa.
–¡yuri-chan gracias!– el helado desapareció de mi mano y mire a esta desconcertada.
–¿que carajos...?– mire hacia arriba y allí en una de las ramas del árbol estaba juuzou sentado.
–¿que haces alla arriba?– pregunte regañandolo, cualquiera que me vea pensara que soy su hermana.
–la vista es muy linda yuri-chan–
Dijo balanceando sus piernas mientras miraba el panorama.–si no quieres que me vaya, ¡baja ya!– gruñi y el bajo del árbol acabando su helado.
–lo siento yuri-chan– dijo y yo lo mire molesta.
–¡Vamos a casa!– gruñí.
***
¡dioses tengan piedad de mi!, porque le dije que venga joder, ¿que tengo en la cabeza?, este chico cuando se lo propone es muy insoportable y niñado, lo mire mientras se quejaba de que queria donas o algo dulce que comer, gruñí y me levante dispuesta a irme a buscar la tarjeta que me habia dado el investigador shinohara, este chico me tiene harta.
No pude seguir caminando ya que suzuya se metio en mi camino, me miro confundido e hizo un sonido con su boca..
–¿estas molesta yuri-chan?– pregunto ladeando solo un poco la cabeza y entrecereando los ojos levemente.
–¡si!–gruñí y mire a otro lado.
Algo impacto contra mi cuerpo y mi respiración se corto, juuzou apoyo su cabeza en mi hombro y apreto su agarre en mi cintura, me estaba abrazando y yo no sabia que hacer.
–¿q-que haces?– pregunte nerviosa, unas ganas enorme de darle una mordida me aparecieron apenas se acercó.
–shinohara-san me dijo que si alguien esta molesto un abrazo lo soluciona, o eso fue lo que entendi, ¿ya no estas molesta yuri-san?– mi piel se erizo y trague saliva.
¿yuri-san?... ¿Acabo de oir bien?
–n-no suzuya– respondi aguantando la respiración, el olor que desprende el chico es dulce muy dulce.
–¿segura yuri-san?– pregunto suavemente.
Joder si este chico no se aleja de mi inmediatamente, creo que se convertira en mi aperitivo de media noche.
–si juzo, ahora alejate de mi– dije con dificultad.
–¡me llamaste juzo!, yuri-san me llamo juzo y no suzuya– dijo alegre y apreto mas su agarre.
Mire su hombro y mi saliva se vuelve agua, joder esto es mucho, pude sentir como mis kakugan salían dejando al descubierto mi verdadero ser, a lo que en verdad soy.
¿me lo como?
¿lo dejo vivir?
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La Ghoul Payasita ✘ Tokyo Ghoul ✘
FanfictionMientras los investigadores del CCG o como también les llaman "Palomas", investigaban al "ojo parchado" y la rara desaparición de "la glotona", pasaban desapercibido a un ghoul, esta al ser muy buena en la distracción pero muy exótica en la vestime...