Los opuestos NO se atraen »Min YoonGi•BTS« TERMINADO

C A P I T U L O 14

- Pensé que te quedarías con ellos. -dije mientras esperaba a que él me alcanzara.

- Pues como ves... Estoy aquí. -dijo una vez estando a mi lado. Comenzamos a caminar juntos.

- Y...

- No -dijo antes que terminará de hacer mi pregunta. A veces me sorprendía como él llega a comprenderme. Suspiramos. Eso era algo común en nosotros.

- ¿Porque no me dijiste lo de la fiesta o no sé qué?

- Sabia que si te lo decía no aceptarías. Sería una pérdida de tiempo y de saliva.

Reí por lo último. Ya habíamos llegado a la puerta de mi casa y me despedí de Min con un tierno y cariñoso golpe en su brazo. Él puso cara de asco pero en el fondo, muy en el fondo yo sabía que esa era su manera de decirme un "adiós Sunny, nos vemos mañana" ya que después de hacer eso él se iba sin decir nada.

Entre a mi casa y me fui directamente a mi cuarto. Me eche en la cama y como era de costumbre me dormí.

Desperté gracias a la alarma de mi celular. Me senté sin ganas y con ira arrojé mi celular al otro lado de la habitación. Volví a acostarme pero el maldito celular volvió a sonar.

- Mierda. -dije entre dientes.

Me pare y camine hacia donde había arrojado el pobre de mi celular. Mire la pantalla y apareció su nombre. Juro que si no es para algo importate lo mando a volar.

- ¿Que quieres? -dije enojada.

- Quiero que vayas conmigo a la fiesta.

- ¿Para eso me llamaste? ¡¿Para eso?! -dije alterada- Pensé que ya había quedado todo claro Chung. No. Escuchame bien. No. Voy. A. Ir. Contigo. A. La. Estúpida. Fiesta.

- Pero...

- ¡Que no! - le colge.

Me volví a echar y deje el celular a mi derecha. Comencé a cerrar mis ojos intentando volver al mundo de los sueños. A mi mundo. Cuando finalmente ya estaba por dormir el celular volvió a tocar. Conteste sin mirar el nombre.

- ¡YA TE DIJE QUE NO IRÉ! ¡¿HASTA CUANDO PLANEAS LLAMARME PARA ESO?! ¿SABES QUÉ? ¡DEJAME DORMIR! - y volví a colgar. Volví a la misma posición y deje de nuevo el celular a mi derecha cuando cerré los ojos el celular volvió a tocar.

- ¿QUE MIERDA QUIERES? -dije molesta.

- No me andes tratando como a tu novio. No tenias porqué gritarme antes Shin Sunhee.

Mire la pantalla para ver quien llamaba. Mierda.

- ¿Antes eras tu?

- Si.

- Lo siento...

Lo oí suspirar. - Él te llamo para que vayas con él ¿Verdad?

- Si. ¿Como lo sabias?

- Porque él es mi amigo y lo conozco a más tiempo que tu. Sé que él no se rendirá fácil. - rió - es posible que él esté llamándote en ese mismo instante. Y si fuera el caso le dirían "por el momento este numero no puede recibir llamadas" - reí - Seguro debe de estar pensando que estas muy, pero muy enojada. Tan enojada que lo bloqueaste. Él suele ser muy dramático.

Reí - Lo sé. Pero no me importa lo que piense, odio que insistan tanto. Además él sabe muy bien que ir a eses lugares donde toman y se emborrachan a tal punto de tener sexos en público, no es para nada de mi agrado. ¿Quien coño se atreve a eso? ¡¿Que no tienen vergüenza?!

Él rió - Como tu dijiste Sunny. Están tan borrachos que la vergüenza se vá.

- En fin, si vuelve a llamar terminaré con él. -dije decidida.

- Eres muy extremistas.

- No es eso. Es por como lo dijo.

- ¿Que te dijo?

- Que debería acompañarle solo por ser su novia. Si hubiera sabido que al aceptar tendría que ir a ese lugares de adolescentes sin límite - Suspire - me hubiera negado. Pensé que él quería ser mi novio porque me quería, y no para solo usarme para compañía.

- Entiendelo. Él te quiere pero quiere que vayas para... - Él dejo de hablar.

- ¿Para?... - dije como un incentivo para que Min continuara.

Después de unos segundos él continuo. - La verdad no sé para qué mierda él quiere que vayas.

Reí.

- Pero sé que él te quiere. Y haría cualquier cosa por ti. ¡Lo tienes loco Sunny! ¡¿Que le hiciste a mi amigo?!

Volví a reír pero esta vez más fuerte.

- Te lo decía en serio. Nunca lo vi con una sola chica, y de repente llegas tu y bomb. Él chico mujeriego se vuelve un santo y de una sola chica. Dime que clase de truco o magia utilizas.

Rodé los ojos aunque sabia que él no podía verme. - No hago nada. Ni sé lo que él vio en mi. A veces lo pienso y...

- ¿Y? - dijo él.

- Y somos tan diferentes. No tenemos nada en común Min. Nada. No entiendo porqué estamos juntos.

- Abre la puerta.

- ¿Qué?

- Que abras, salgamos a comer algo an- le colge. Salí corriendo y en camino a la puerta principal Grité "mamá voy a salir con un amigo. Para cualquier cosa me llamas" y abrí la puerta. Vi a Min apoyado en el poste de luz. Le sonreí pero en no me sonrió de vuelta.

- No es educado colgar la llamada cuando alguien sigue hablado Sunny.- dijo serio. Curve mis labios para arriba intentado sonreír pero más pareció una mueca. Suspire.

- Entonces la próxima vez, si es que hay una otra próxima vez. Te dejare esperando hasta que acabes de hablar y después de eso saldré de casa lentamente como alguien muy educado.

Él rodó los ojos - mejor sales rápido y después discutimos de nuevo por tu mala educación.

Lo imite. - Como sea. Ya estoy aquí así que... ¿Donde vamos?

- A comer una buena comida chatarra como es debido para alguien de nuestra edad.

- ¿En serio? - dije emocionada. Normalmente al joven Min Yoongi no le gusta ir a este tipo de lugar.

- No, solo jugaba. Vamos a una cafetería.

Me ilusione. Comenzamos a caminar juntos pero con casi un metro de distancia entre nosotros. A ambos nos gusta tener nuestro propio espacio y el contacto físico no es nuestro fuerte. Íbamos en silencio hasta que él hablo.

- Pasa lo mismo con Haneul y conmigo.

Al principio no entendí bien pero antes de que pudiera preguntar de que hablaba, él continuó. - Lo que sientes... Lo de no tener nada en común. - asentí levemente con la cabeza.- Pero yo si llegué a comentar esto con ella.

- ¿Y que te dijo? -pregunte curiosa.

- Los opuestos se atraen - dijo Min imitando la voz de su novia fallidamente. Reí por su actuación versión remix de Haneul.- ¿De que te ríes? Eso fue lo que me dijo.

- Por primera vez tengo que admitir que tal vez ella esté en lo correcto.

Él rió - Yo también dije lo mismo cuando lo escuché. Solo eso puede ser la respuesta a esa pregunta tan misteriosa. O tal vez es que ambas nos están hechizando.

Rodé los ojos.

- No hay que descartar ninguna opción Sunny . El misterio de nuestras relaciones es una pregunta sin ninguna aparente respuesta.