Mi cumpleaños pasó de manera casi desapercibida. No amaba esa fecha, y jamás me habían gustado mis fiestas, pues en ninguna había alguien que fuera por mí aparte de Sarah, Allyson o Karen. A Zayn prácticamente se le había olvidado, pero no me molestó en lo más mínimo, porque de todos modos, él había viajado varios días antes de eso, y había llamado para felicitarme. Sabía que él volvería mañana, así que debía hacer uno que otro cambio. Inicié por ir a cortar mi ya larga cabellera. Pasaba mi cintura, y últimamente se atoraba con los cierres de los vestidos. Era un tanto tedioso tenerlo enredado. Volví a casa con uno que otro cambio, y el regalo perfecto para ambos: un viaje por las Bahamas en un crucero por tres semanas. No sabía por qué, pero este me sonaba como un viaje perfecto, y se lo diría en cuanto tuviese tiempo.
— Señorita ________, el joven Zayn acaba de llamarla y dijo que volvería a la hora de la cena.
— Gracias Layla, puedes retirarte. — dije y ella asintió, y se marchó por donde acababa de entrar. Decidí que darle una sorpresa sería algo dulce, por lo que quise usar un vestido celeste, unas sandalias plateadas, dejé mi cabello suelto, y busqué mis lentes de contactos, últimamente mi vista fallaba y usar lentes normales no sería agradable con un vestido.
— John, ¿podría llevarme a la oficina de Zayn? — pregunté al chofer que Zayn habría puesto a mi disposición, no sabía si era porque no veía bien o solamente para ser amable.
— Claro, señorita, súbase y yo la llevaré. —dijo mientras abría la puerta del auto blanco de vidrios polarizados, y dejaba que yo pasara. Una vez dentro, cerró mi puerta y se apresuró a subir al lado del chofer para encender el auto y partir hacia el edificio de los Malik. No sólo estaba nerviosa por verlo, y decirle sobre el viaje, si no que había visitado al doctor, gracias a que tuve vómito durante dos días, y pensé que habría sido la comida que había ido a cenar con Sarah por mi cumpleaños, y resultó que estaba embarazada. La emoción se había adueñado de mi, pero también el miedo ante la posible reacción de Zayn, claramente, aún estaban los papeles de divorcio listos para unos prontos meses más. John abrió la puerta y luego de agradecerle, caminé hasta el ascensor y al llegar al lado de la secretaria de Zayn, esta me miró sorprendida.
— Señorita ________.
— Claudia, ¿Zayn se encuentra adentro? — ella asintió torpemente — Me gustaría que no le avisaras que estoy aquí, quiero darle una sorpresa. — ella iba a decir algo cuando caminé hacía la puerta con los boletos en una mano y giré la manilla con la otra. El escritorio estaba vacío, pero el sofá no. En este se encontraban Zayn y Avril, ella con la falda exageramente alzada y él sin camisa. Tiré los boletos y cerré la puerta despacio, corrí hacía el ascensor, en el cual me desplomé en cuanto se cerraron las puertas, dejándome sola, vacía, derramando lágrimas sin poder contenerlas. Al salir, limpié mi cara y le pedí a John que me llevará a la notaría. Él me observó confundido e inventé que debía revisar unos papeles que trataban sobre una propiedad familiar. Sin mucho tiempo de espera, nos encontrábamos frente a las oficinas. Bajé sola y entré apresuradamente, me acerqué a uno de los módulos y ante la mirada fría de la señora del mostrador, hablé. — Necesito saber sobre unos papeles de divorcio.
— ¿Tiene cita o ya hay firma?
— Los papeles están firmados por él y decidí que ya llegó la hora del divorcio — fingí una sonrisa.
— Bien necesito ambos nombres, y su firma aquí — me entregó un papel con varios campos en blanco y un bolígrafo. Comencé llenando mis datos; ________ ____________, 21, Femenino, tonterías sin asunto y después los de Zayn. Al finalizar le entregué el papel y el bolígrafo a la señora, ella dispuso a ingresar algunos datos en la computadora. Tomó el teléfono y habló cosas que no pude entender. Me indicó una puerta, y al entrar, un abogado me esperaba en la entrada.
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Enseñame A Vivir - Zayn {adaptada}
Hayran Kurgujamás había estado segura de qué era exactamente "el amor", mucho menos si existía a primera vista, pero ahora no podría detenerme a buscarlo y acababa de darme cuenta que jamás resolvería esa duda, justo ahora, es imposible. Hija de un gran empresa...