Amor Inmortal [COMPLETA]*

Capitulo I. Me siento extraño.

Narra Dohko

No tengo idea de cómo fue que sucedió, pero lo defendi de su maestro, solo porque llego tarde a su entrenamiento, bueno, entiendo que es para formar carácter. Pero lo que no se es que de cuando fue que sucedió aquello.

Shion: ¡Dohko!- dijo, sacandome de mis pensamientos.
Dohko: Shion, ¿Sucede algo?- pregunte preocupado.
Shion: Solo que...- dijo, bajando la mirada.- Gracias... Por lo de ayer.
Dohko: Ahh, pues... De nada.- dije nervioso.
Shion: ¿Sucede algo? Te ves nervioso.
Dohko: A-ahh, no es... Ah, nada, solo es... Estoy cansado.
Shion: Bueno... Voy con Albafica, me dijo que quería que lo acompañará a comprar a Rodorio.
Dohko: ¿Con Manigoldo, verdad?- dije, un poco molesto.
Shion: Asi... Es, es solo... Manigoldo.

Conozco muy bien a Shion, desde que tenía cinco años y ahora que tenemos quince, me molesta que este tanto tiempo con Albafica, me siento... ¿Celoso? Creo que sí... Esperen ¿Que?... ¿Que me pasa? ¿Como rayos es que...?

Shion: Dohko, Dohko- meneando su mano enfrente de mi, me despertó otra vez de mi trance- Dohko, ¿A dónde te fuiste?
Dohko: Ehh, pero si estoy aquí.
Shion: Pues parece que estabas en la Luna, ¿En que piensas?
Dohko: En nada- dije, parpadeando un par de veces.
Shion: Bien, me voy entonces, me están esperando.- dijo, viendo a Albafica y a Manigoldo, este último le hacia señas para que fuera con ellos.
Dohko: Si, está bien.- me moleste.
Shion: Tranquilo, luego te vengo a visitar para tomar té, ¿te parece?
Dohko: Si, bien.

Él se fue con ellos. No sé por qué le doy importancia el hecho de que salga más con Albafica que conmigo. Bueno, al menos irá con Manigoldo, pero no cambia el hecho que vaya con él. Es que, simplemente no lo tolero, él es mío, no de ése. Ahora que estoy bajo nuestro árbol, recuerdo el día que se lo mostré.

Flashback.

Teníamos doce años, yo había descubierto una hermosa vista del santuario y el Rodorio, así que se lo quise mostrar a Shion.

Dohko: Le tape los ojos y lo guiaba- solo un poco más.
Shion: Esta bien , ¿Ya?- pregunta de nuevo.
Dohko: Si, ya- le destapó los ojos-- ¿Te gusta?
Shion: Sus ojos estaban como platos- Es bello, ¿Cuando lo descubriste?- me volteo a ver.
Dohko: Apenas hoy, por eso te lo quise mostrar.

Shion se acerca al barranco y ve el paisaje, era la vista del pueblo Rodorio junto con las doce casas hasta llegar a la estatua de Atena. De repente, sopla una brisa suave que hace que el cabello de Shion flote con la misma. Luego se escucha un golpe seco y voltea, es Dohko sentado en el suelo, con unas cuántas manzanas alrededor.

Shion: Ay, Dohko- sonreí, y le extiende la mano- ¿Cuándo vas a madurar?
Dohko: Quizás nunca- se ríe.

Al agarrar su mano, la brisa sopla de nuevo, el sol está a la espalda de Shion, sus ojos violetas brillan con más intensidad y su largo fleco flota con la brisa, resaltando su mirada violeta. Dohko se queda anonado, viendo lo que hay ante sus ojos.

Shion: Dohko, ¿Te sientes bien?
Dohko: Ah, en, si...- despertando de su trance- eso creo.
Shion: ¿Tienes algo?- mostrando preocupación.
Dohko: Me siento extraño.- dije, tocándose la cabeza.
Shion: ¿En serio?- pone su mano en mi frente- No tienes nada... ¿Estas sonrojado?
Dohko: Eh... Yo... No me sonrojo nunca.- dije, cruzandome de brazos y fingiendo estar molesto.
Shion: Jajaja, pues yo te veo rojito, es más se te ve lindo- ríe.
Dohko: Ah, pues...- rayos, mis mejillas me arden. Pensé.
Shion: Pareces un tomate,- se rie a carcajadas.- ya en serio, ¿Te sientes bien?- dijo, dejándose de reír.
Dohko: Si, estoy bien... P-pero, quiero venganza- sonreí malicioso.
Shion: N-no, D-Dohko, no te atreverias, ¿Cierto?- se hecha a correr.
Dohko: No te libraras de mi- y salí corriendo detrás de él.

Fin flashback.

Desde ese momento, ya no fui el mismo de antes. Si se me acercaba, me sonrojaba, el mínimo detalle de el, me hacía sentir importante para el. Si lo venía con otra persona, en especial con Albafica, me ponía molesto. Pero cuando íbamos a nuestro lugar, ya sea a platicar, a jugar o a repasar nuestras lecciones, me sentía bien y nos reiamos de mis chistes. Él era todo para mí y, ahora, esta con ese floripondio, a él le molesta que le diga así, porque ese es algo especial para él. Aún lo recuerdo.

Flashback.

Teniamos trece cuando llegó a nuestras vidas.

Sage: Hoy les presentó a un nuevo compañero, su nombre es Albafica, tratenlo como uno más en la familia.

Nos mostró a un niño de diez años, cabello celeste, ojos del mismos color y piel tersa y blanca. A simple vista, hermoso, Shion no le podía quitar la mirada de encima. Me empezaba a molestar. Luego, fui a dónde ese niño.

Dohko: Hola, tú eres Albafica, ¿No?- dije, mostrando una sonrisa.
Albafica: Si, soy yo.- dijo, inocentemente.
Dohko: Ah, ya veo... Y dime, ¿Te pusieron así por qué pensaron que eras niña o niño?
Albafica: No lo se, niño- dijo molesto.
Dohko: Yo sí se...- sonreí, victorioso- Quizás fue por tu cara de niña, ¿No?
Shion: Dohko, ¿Qué crees que haces?- me dijo a mis espaldas, yo di un respingo.
Dohko: Ah, p-pues y-yo...
Albafica: Me molestaba, yo no siquiera le hice algo.- rayos, bueno... Ni que Shion le crea más que a mí.
Shion: ¿Es cierto, Dohko?- me miro molesto.
Dohko: Ya, ni que le fueras a creer a este más que a mí, si me conoces bien.
Shion: Y porque te conozco, es que le creo a este niño.- no puede ser, Shion, no puedes estar hablando enserio, soy tu... Amigo, ¿Por qué?- Dohko, ¿Que tienes? ¿Por qué lloras?- rayos, no puede ser.
Dohko: No es nada, vete con tu amigo.- me fui corriendo al templo de Libra, en la cual voy a ser su guardian.

Fin del flashback.