No Te Engañes |Jimmy Darling|

XI

El sol quemaba levemente mi espalda, aún tenia una lucha interna es si era correcto retirme o tocar de una maldita vez el timbre de la gran casa a la que habia llegado a visitar ocasionalmente, podria casi asegurar que iba a terminar haciendo un agujero en el suelo si no dejaba de dar vueltas.
Sin pensarmelo mucho toqué de una vez por todas el bendito botón al cual le tomé un tremendo miedo por los 30 minutos en los cuales me le quedé viendo.

Fue entonces cuando pude ver que la puerta de la casa fue abierta y que por ella salía Spencer, para asi abrirme la reja. Cuando el mayordomo estuvo plantado frente a mi sólo se corrió para dejarme pasar, ya que él ya sabía que yo iba a visitar a Katherine.

Sin embargo no avance mucho, puesto que Kathe salia de la puerta de la casa, y al contrario de las otras veces en las que me veía, esta vez no sonrió; sólo caminó hasta a mi, esperó a que Spencer se fuera y se recargó en la reja mientras me veía directo a los ojos.

—¿Qué tal Jimmy?— dijo haciendo un movimiento en la cabeza en modo de saludo.

—Hola Kathe— carraspee tratando de que mi voz sonara grave.

—¿Qué te trae por aqui?— preguntó.

—No haz ido al show en 2 semanas y media y me preocupe por ti— murmuré rascandome el cuello en un intento de no parecer nervioso.

—He estado ocupada— definitivamente podía notar un cambio, no había sonrisas ni siquiera estaba la extraña pero agradable energia que ella irradiaba. Un incómodo silencio surgió entre ambos, ella recuperó su postura normal y comenzó a avanzar hacia dentro de la casa, haciendo un movimiento con la cabeza para que la siguiera.

Pasamos por el gran y muy bonito recibidor, subimos las grandes escaleras de mármol y caminamos por varios pasillos hasta que Katherine se detuvo delante una puerta en particular y la abrió, dandonos paso a ambos a su recamara, cabe decir que nunca habia entrado a ella, por lo que me detuve unos segundos a mirar alrededor.
Su habitacion estaba compuesta por colores blancos, negro y café; Kathe tomó asiento en su espaciosa cama y yo sintiendome intimidado me senté en una silla que estaba al frente de esta.

—Me enteré que hay alguien nueva en el show.

—¡Oh si! Su nombre es Magie y es muy bonita— contesté apenado.

—¿En serio? ¿y qué hace?— preguntó interesada.

—En realidad ella es normal— me escogí de hombros —es bastante agradable, creo que tú y ella se llevarian muy bien.

—¿te gusta no es asi?— preguntó nuevamente y me maldije por ser tan obvio.

—Es sólo una atraccion física— dije restandole importancia.

Katherine no dijo nada, solo asintió con la cabeza. Aunque sé que no me había creido nada.

—¿Qué pasa Kathe? ¿Sucede algo?— le pregunté inclinandome hacia ella y tomando entre mis manos su mentón de forma involuntaria para verla mejor a los ojos.

Katherine soltó un pesado suspiro.

—Es sólo que me atrae TAAANTO alguien y me he estado quemando la cabeza en si debo guardar todo lo que siento o explotar.

Entonces un nudo en mi pecho se instaló, ese alguien posiblemente se trataba de Michael. Solté delicadamente su rostro y mirando un punto muerto.

—Díselo— murmuré, me levante de la silla y me encamine hasta la puerta rápidamente, confundido por la extraña sensación que comenzaba a inundarme —Tengo que irme Kathe, nos venos luego— evite a toda costa mirarla y salí de ahí lo más rápido que pude.