Tour del sentimiento escondido

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—Psss Psss, oye Qrow, si es cierto lo que me dijiste, mañana podríamos salir los dos junto a Summer ¿no?—susurraba el rubio a escondidas del profesor en turno.
—Seep, hoy la invito a salir con nosotros mañana y averiguo de igual manera lo que le gusta.
—Ok, amigo.
—¡Silencio! ¡Guarden silencio, por favor!
—Jeje lo sentimos profesor —ofrecían disculpas en unisono, mientras Summer, a un costado, los observaba y reía silenciosamente.
Al termino de la clase, Summer esperó a Qrow y este la buscó.
—Bueno, ahora sí, chica nueva, te mostraré cada rincón de la academia, antes que la profe Goodwitch se percaté que aún no lo he hecho.
—Jejeje de acuerdo, compañero, y en primer lugar, no me digas chica nueva. Llámame Summer ¿sí? Jeje.
—De acuerdo, S-u-m-m-e-r.
—Jejejeje eres un tonto, Qrow —ambos se fueron alejando del salón. Raven, por otro lado, se encontraba observándolos de lejos, inmóvil, con una mirada y sonrisa satisfactoria, pero sospechosamente siniestra. En ese momento, la gemela Branwen cruzó camino con Taiyang y aprovechó la ocasión para decirle:
—¿No son lindos?
—¡Oh! ¡Hola, Raven! ¿Lindos? ¿Quiénes?
—Jajaja no seas tan ciego, Taiyang.
—¿Ah? —dudaba el rubio incrédulamente.
—Jajajaja —entre risas se alejaba la joven, ante la mirada desconcertada del chico. Por otro lado, Qrow y Summer daban un recorrido completo a todos los rincones importantes de la academia. Summer parecía niña asombrada ante todo aquello que iba conociendo. Qrow se limitaba a reír tranquilamente. Unas cuantas horas demoraron sus visitas y finalmente tomaron un descanso en las bancas del patio trasero de la academia Beacon.
—Veo que te gusta nuestra academia jaja.
—¡Sííííí!, ¡es fascinante, Qrow! ¡La biblioteca es tan wow! ¡Y ni que decir del centro de entrenamiento! Esta es una verdadera academia de cazadores. ¡Es increible! —expresaba maravillada Summer.
—jajaja sí, bueno, yo no la vi tan sorprendente la primera vez. Deberías salir más seguido jajajajajaja.
—Ouuumm ¡Qué malvado! —Se disgustaba la chica mientras inflaba sus mejillas.
—Oye, ¿te gustan las películas de acción? Se acaba de estrenar una y tenía pensado ir a verla. Si gustas acompañarme eres bienvenida.
—Owww, pues hoy dejaron mucha tarea pero supongo que si me desvelo un poco no pasará nada malo jeje así que sí, te acompaño, Qrow.
—Jaja, ok, pues andando.
—¡Claro! ¡Y no seas tan irresponsable! Deberías aplicarte aunque sea un poco... Mmmmm ¡ya sé! Ya que tú me harás desvelarme hoy, me tocará a mí llevarte por el camino de la rectitud para la otra.
—¿Qué?...
—Sip, podemos estudiar juntos ¡y aprovechar esa hermosa biblioteca que me mostraste!
—Cielos... ¿Es en serio? ¡Argh! Pues que remedio... Supongo es lo justo, pero que no se te haga costumbre ¿eh? Yo hago las cosas a mi manera... —Se lamentaba Qrow colocando la palma de su mano sobre su frente.
—¡De acuerdo! —respondía la joven alegremente ante la confirmación de su compañero.
Ambos llegaron al cine, ordenaron un combo y seleccionaron la película en taquilla. Palomitas, 2 refrescos, nachos y hot-dogs, cargaba el gemelo Branwen. Durante la espera, Qrow aprovechó para charlar más con Summer y poco a poco irla conociendo mejor. Esta, sin la más mínima sospecha, fue abierta con él y le contó muchas cosas acerca de ella. Sus gustos musicales, sus pasatiempos favoritos, sus platillos y golosinas favoritas, etc. Conforme se iba dando la conversación, Qrow se expresaba con ella recíprocamente. Podían pasar horas charlando pero finalmente la película daba comienzo a la introducción. Ambos acomodaron su postura y disfrutaron del filme. Al término de esta, los compañeros prosiguieron a abandonar la sala al momento que dialogaban sobre la película.
-¡Wow, fue increíble, Qrow! ¡Pero odié que mataran a Jackson! Fue la única parte que no me gustó.
—Jaja bien, pues yo creo que se lo merecía, además, quien lo manda a arriesgar su vida si ya se había salvado.
—¡QUE! ¡¿Cómo puedes decir eso?! Él quería rescatar a su amigo...
—Pero no rescató a nadie y sólo consiguió morir también...
—Pero, él lo intentó al menos... Cielos, Qrow ¿cómo puedes no sentir su muerte?
—Porque se me hizo tonto regresar por alguien a quien sabía no podía salvar...
-P-pues sí pero tú y yo somos cazadores, Qrow, o bueno, lo seremos cuando nos graduemos... Quiero decir... Yo hubiera hecho lo mismo... Por quien sea, no abandonaría a nadie... Yo no te abandonaría... ¿T-tú me abandonarías, Qrow? —volteaba la joven a ver a su compañero esperando una respuesta que jamás llegó, esto debido a que el flash de una cámara los sacó de sintonía. Qrow volteó y se dio cuenta que unos sujetos capturaron a Summer. Entre risas y lamentos por no haber sido discretos, los jóvenes se retiraban, no sin antes burlarse de la pobre chica, a quien encontraban chistosa debido a su llamativa capucha blanca. Qrow se dirigía hacia ellos pero el brazo de Summer lo retuvo.
—Déjalos. No me molesta.
—¿Qué? Oye, esta bien que seas pasiva pero que se burlen de ti así por tu forma de vestir...
—Está bien, Qrow, déjalo, no es la primera vez que escucho comentarios así —interrumpía con una sonrisa falsamente dibujada, la muchacha. Ella continuó y añadió: —Además, joven Branwen, usted fue el que me dijo que aprendiera a no tomarme a pecho los comentarios de los demás ¿no es así? —Qrow suspiró al escuchar eso, y se atrevió a preguntar: —Oye, ¿Y por qué usas una capa? ¿Quieres sentirte una superhéroe o algo así?
—No, tonto, jejeje es curioso... Cuando era niña me fascinaban las historias de héroes salvando al mundo. Supongo que fue de todo un poco... Mi infancia no fue precisamente color de rosas...
—Es irónico porque te apellidas Rose...
—Jejeje sí. Pero ¿sabes? Aunque no pude divertirme como otros niños, el ver cuanto sufría la gente que me rodeaba o la pobreza que día con día cargaban... Me hizo darme cuenta lo que quería para mí. Ser una verdadera cazadora. Así que me esforcé mucho en signal para poder llegar a este sitio. Deseo ayudar a las personas, Qrow, ese es mi sueño. Supongo que por eso entiendo al protagonista de la película jejeje, me identifiqué mucho. Siempre ayudando al prójimo sin dudar.
—Je, bueno llegamos con distintos objetivos a esta academia, me alegro que compartieras tus ideas conmigo... Aunque eso no responde mi pregunta...
—¡Oh! ¡la capucha! ¡cierto! eso es porque... fue un regalo de mi madre... Ella sabía lo mucho que deseaba ayudar y sabía lo mucho que amaba las historias de héroes-cazadores —recordaba melancólicamente al momento que sujetaba su capucha blanca.
—Oh... lo lamento... ¿Ella sigue... —con temor se animaba Qrow a preguntar a la chica, y esta acompletó antes de poder acabar su cuestión.
—Ella murió, Qrow. Por eso la traigo siempre conmigo —sonreía Summer. Qrow quedó en silencio por unos segundos y dentro de él la ira se apoderaba de su cuerpo. Él no podía concebir las burlas que recientemente había recibido y al mismo tiempo recordaba los constantes comentarios que escuchaba en los pasillos de Beacon acerca de la misma situación, la forma en que vestía ella junto a esa enorme capucha blanca...
Qrow se agachó un poco, la tomó de los hombros y dijo: —Oye... ¿me vería bien con una capa? Tú que sabes de esto ¿te gustaría costurarme una? —Summer quedó boquiabierta y enmudeció. Las palabras no salían de sus labios. Era la primera vez que alguien actuaba así con ella... Estaba realmente enamorada, y fue en ese momento en que lo supo completamente. Qrow Branwen había capturado sus sentimientos... La chica nueva no pudo contener las lagrimas de emoción y tampoco el fuerte, pero tierno, abrazo sobre él. Qrow se quedó con las manos libres en shock pues no entendía el porque de la situación. Sin embargo, correspondió el afecto y ambos se fundieron en un enternecedor gesto de cariño. Ella cambió su postura, y con el rostro ruborizado sostuvo: —Te quedaría bien el rojo, Qrow, por tus llamativos ojos... —el joven, sorprendido, asintió con la cabeza y mostró una sonrisa satisfecha. Ambos continuaron caminando y Summer exclamó: —La próxima vez sé más abierto conmigo, Qrow, quiero que me compartas lo que eres.
—Je, de acuerdo, aunque puede no gustarte...
—Te mentí... No me gustaban las películas de acción y hoy cambiaron mis preferencias... Así que dudo que algo que no me guste cambie el hecho de lo que pienso de ti...
—De acuerdo, Summer... Oh, es cierto, lo olvidaba, mañana Taiyang y yo iremos al estadio de Vale, ¿Te gustaría acompañarnos?
—Siempre y cuando no sea temprano, acepto Jejeje. Recuerda que alguien ya hará que me desvele hoy... Y después de la clase planeaba dormir un poco jejejeje.
—De acuerdo jaja, ¿5:00 pm te parece, floja?
—¡Qrow! Jummm... Pero sí jejeje a esa hora está perfecto.
—Jaja, Bien.
Ambos continuaron paseando un rato por el parque y finalmente, después de unas horas más, decidieron volver a sus respectivos cuartos. Se despidieron con un compromiso pactado para el día siguiente.
Mientras tanto, en la copa de un árbol, un cuervo observaba fijamente a los muchachos, y su alegre recorrido a través del mencionado parque...

Amores dañinos sobre una rosa blancaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora