Confidente

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—Qrow, amigo, me he enamorado de Summer Rose, la chica nueva.
—Oh, que sorpresa. Siempre te enamoras de alguien cada inicio de clases...
—¡Hey! Eso no es cierto, no soy tan enamoradizo.
—Y yo no soy tan borracho...
—Ja Ja Ja, bueno aunque no me creas, sólo te quiero pedir una cosa...
—¿Qué podrá ser?
—Qrow Branwen, sé que ella no es de tu agrado y no espero que lo llegue a ser, pero... Necesito que me ayudes a acercarme a Summer. Te preguntarás cómo ¿no? Pues muy sencillo... La señorita Goodwitch te asignó el ser su guía escolar, así que, mi querido amigo, quiero acercarme a ella por medio de ti. Trata de ser más amable o al menos intenta conocerla más, así obtienes información en cuanto a sus gustos y yo hago el resto. ¿Sabes a lo que me refiero, no?
—No quieres acercarte tan descarademente y tan repentinamente para no parecer un buitre, es eso ¿no?
—¡Exactamente, ahora sí estamos sincronizándonos, amigo! No quiero parecer un buitre pero tú sí lo puedes ser y dará igual porque te cae mal jajajaja, o en este caso en vez de buitre parecerás un cuervo jajajajajaja ¿eh? ¿Entiendes?, ¡cuervo! Jajajaja vamos Qrow, ríete, ríete.
—Con esos chistes, Tai, entiendo ahora el porque me pediste ayuda...
—Oh vamos, no seas tan cruel, amigo...
—Pero está bien, está bien. Solamente te ayudaré por dos motivos...
—¿Cuáles podrán ser esos motivos? —preguntaba el rubio extrañado e intrigado.
—Uno, porque si consigues novia puede que esos malos chistes los deje de oír tan seguido...
—¡Hey! Que mala onda eres eh...
—Y dos, porque gracias a ti pasé el examen del profesor Port... Esas aburridas clases... No me las hubiera podido saltar y obtener un merecido diez sin tu ayuda, lo reconozco...
—Cieeeeeertoo, Raven se enfadó tanto por eso que no me habló en meses...
—Jajajajajaja por eso mismo es la razón número dos...
—Para mí no fue tan divertido...
—Pero bueno, cuenta conmigo, Tai... —afirmaba Qrow quien posteriormente susurró así mismo <<además le debo una disculpa a esa niña...>>
—Entonces, es un trato —confirmaba Taiyang mientras ambos amigos se estrechaban las manos en señal de pacto, y este agregó: —Qrow, disculpa si te hago hacer algo que no quieres, pero de verdad me gusta esta chica y no quiero arruinar las cosas como a veces las suelo arruinar con las mujeres...
—No te preocupes, Tai, somos amigos —reconfortaba Qrow al rubio mientras colocaba una mano sobre su hombro para luego añadir: —además, con Raven iba a ser muy difícil que consiguieras algo, ya conoces como es... Apuntaste mal esa vez.
—Gracias por el ánimo, Qrow. Creo que con Summer puede ser diferente —con alegría sobre su rostro decía el rubio.
—No lo sé, lo que sí sé es que se hará la lucha...

Amores dañinos sobre una rosa blancaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora