Tres no debería ser multitud

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Una vez finalizada la clase de laboratorio del profesor Oobleck, Summer fue a su cuarto a dormir un poco. Qrow y Taiyang buscaron un lugar para desayunar por su parte.
—No puedo creer que haya aceptado Summer, amigo.
—¿No puedes creerlo? Ella no es como otras chicas, Tai. Es buena onda. Tú mismo has hablado con ella.
—Pues sí, tienes razón. De hecho por eso me gusta. Y por su sonrisa. Y también por...
—¿Ya vas a empezar de cursi, Tai? Jajaja —interrumpía su amigo.
—Jajaja bien, bien. Por cierto, te seré sincero... Estoy algo nervioso. Apesar de que he hablado con ella un par de veces, es la primera vez que saldré con Summer. Lo bueno es que tú estarás ahí y será más sencillo.
—Jaja tranquilo, sólo sé tu mismo.
—Muy bien, hermano, estoy seguro que será un buen día y los nervios se irán al momento.
—Verás que sí.
Ambos hicieron tiempo hasta que dieron las 5:00 pm. Esperaron a Summer en el lugar acordado y esta, para su sorpresa, deslumbró a ambos con su gran belleza cuando la observaron llegar. Summer lucía irreconocible, era la primera vez que la veían de civil.  Aunque era una salida casual, llegó perfectamente arreglada. Su falda corta haciendo juego con su blusa que dejaba en descubierto parte de sus hombros. La forma en que se maquilló junto a su cabello suelto provocó el asombro de los muchachos. Aunque a Summer se le dificultaba caminar en zapatillas, mantenía el equilibrio lo mejor posible para que se notara lo menos que todo esto era nuevo para ella. Taiyang se enamoró muchísimo más de Summer, y por otra parte, Qrow quedó un poco confundido.
—Jeje hola, chicos —decía algo apenada la bella joven.
—¡Hola Summer! ¡Wow, que guapa!
—Jejeje gracias Taiyang, me apenas. Pensé que no me veía tan bien, no suelo vestirme así.
—¡Pues deberías hacerlo más seguido porque luces estupenda!
—¡Basta! Jejeje.
—Jajajaja, bien, pues vámonos entonces, que la tarde es joven.
—¡Siiii! —Se entusiasmaba Summer. Qrow sin embargo, se mantenía callado. Él sabía que debía entrar en la conversación pronto, pues de no ser así, podrían notar su extraño comportamiento.
—Leí un poco y tengo entendido que en el estadio de Vale se enfrentan cazadores de manera deportiva ¿Estoy en lo correcto, chicos?
—Sí jeje supongo que es algo extraño que te hayamos invitado a ver una pelea practicamente... —dudaba Taiyang si había sido conveniente invitar a su amada a ver a dos extraños luchar.
—¡¿Qué?! ¡¿Bromeas?! ¡Estoy emocionada! ¡imagínense, ver a dos cazadores de verdad! en Signal no había este tipo de espectáculos jejeje.
—Wow, eres una caja de sorpresas, Summer, no imaginé que te llamara la atención tanto como a nosotros.
—¡Siiii! Jejeje de hecho creo que se lo comenté a Qrow la otra vez —comentaba la muchacha riendo levemente y a su vez volteó a verlo para escuchar su respuesta. Sin embargo, Qrow lucía desconcertado aún y Summer extrañada le habló: —¿Qrow? — este reaccionó y por fin se involucró en la charla de sus acompañantes.
—Este... ¡sí! Jeje me habías comentado.
—Jejeje sí.
Caminaron y platicaron durante su trayecto. Qrow no decía gran cosa y se limitaba a sonreír y asentar con la cabeza en ocasiones. No pasó mucho tiempo para que a lo lejos lograran observar lo cerca que se encontraban.
—Bueno, pues ya casi llegamos chicos.
—¡Oooooww! ¡no me digas que es eso que se ve a lo lejos! ¡es enorme!
—En efecto, Summer, ese mero es.
—¡Asombroso! ¡está increible! —Afirmaba eufóricamente la chica.
—Jajaja —reía el rubio ante lo emocionada que estaba Summer. Él ya había perdido los nervios, pues Summer era tan natural en su forma de ser que lo relajaba de algún modo. Definitivamente era una chica diferente. Qrow, por otro lado, mentalmente se criticaba.
—¿Qué estás haciendo, Qrow? ¿por qué actúas así? —pensaba y de igual manera añadió a su estrés: —Sólo sé tú mismo... Como siempre... —.
Los tres finalmente llegaron al estadio, entregaron sus boletos y buscaron sus asientos dentro de la enorme estructura.
—¡Cielos! olvidamos las botanas, esperen aquí chicos, ahora regreso.
—Jeje te acompaño, Taiyang, quiero pedir algo de chocolate jejeje.
—Oh, de acuerdo, Summer, vamos.
Una vez lejos, Qrow llevó sus manos al rostro y lamentaba su propia actitud.
—¿Por qué me siento así? No... No... No puede ser eso... No puede... —Se cuestionaba.
Mientras tanto, en la dulcería, Taiyang y Summer compraban lo suyo. El rubio observaba las miradas lividinosas de los hombres ante la belleza que exponía la joven. Este se molestaba pero no buscaba problemas, no obstante, la gota que derramó el vaso fue la invasión del espacio personal de la chica.
—¡Ahhh! —gritaba asustada, ante el tacto de una mano ajena en su trasero. El rubio se percató de esto y antes que el individuo escapara entre la multitud, fue retenido por él. Apretó la muñeca del desconocido y la dobló limitándose a causarle dolor, pues no buscaba fracturársela.
—¡Argh, argh! ¡duele, duele!
—¡Oye! ¿qué te pasa? ¡no creas que no te vi! ¡ahora discúlpate con ella! ¡qué clase de caballero manosea a una dama! ¡discúlpate! —ordenaba un enfadado Taiyang.
—¡SÍ, SÍ! ¡LO LAMENTO! ¡LO LAMENTO! ¡SUELTAME POR FAVOR! ¡DUELE! —gritaba el hombre ante la mirada indignada del resto de la multitud.
Summer aceptó sus disculpas y el rubio liberó al sujeto de su castigo. Tomaron sus compras y retornaron a sus asientos. Durante el camino, Summer agradeció a su amigo por lo ocurrido.
—Gracias, Taiyang, en serio, no lo entiendo... ¿Por qué tienen que hacer ese tipo de cosas?... ¿Sabes? yo no deseaba venir así por lo mismo... La primera vez que salí arreglada terminó igual... Me molesta eso y me da miedo...
—¿Igual? ¿a qué te refieres, Summer? —preguntaba asustado. Esta suspiró y le contó su anecdota al rubio.
—Hubo una vez... No me gusta recordarlo... Sucede que... cuando era más chica, salí con unas amigas de signal y unos sujetos nos molestaron... Fue muy feo... Íbamos a una fiesta y cuando nos los topamos empezaron a piropearnos hasta que las cosas subieron de tono... Comenzaron a tocarnos y apesar de que gritábamos, no paraban. Me asusté mucho... Lo bueno fue que se encontraba un tubo tirado. Lo sostuve con todas mis fuerzas y golpeé a uno. Mi miedo era tal que no me importó lastimarlos. Como ya contaba con cierto entrenamiento con armas, me resultó relativamente fácil liberar a mis amigas y rescatarme a mí misma... No soy buena en combate cuerpo a cuerpo, de no ser por ese tubo... Yo... No sé lo que hubiera pasado... Tenía tanto miedo... Yo... —Contaba aterrada la joven, quien no pudo controlar sus emociones al recordar su trauma de la adolescencia y soltó un par de lágrimas. Taiyang intentó calmarla, se acercó y la abrazó. Ella en respuesta dijo: —Gracias, de verdad, no me gusta recordarlo pero tengo confianza contigo jeje, desde el primer día de clases te acercaste a mí y me mostraste mucha confianza jeje. Soy una llorona no me hagas mucho caso jijijiji—añadía la chica un poco más calmada y tallando sus ojos.
—Tranquila —sonreía el chico, y continuó: —A mí también me molesta eso, no podía permitir que se fuera así como así. ¿Te imaginas? si no lo ponía en su lugar se iba a ir tranquilo como si nada... Al menos espero que la próxima vez lo piense dos veces antes de prospasarse con una dama... Y yo espero que no exista una próxima vez.
—Es cierto, lo pensará dos veces. Gracias de nuevo.
—No tienes que agradecerme, Summer.
Ambos cambiaron de tema y continuaron su camino rumbo a sus asientos. Entre risas, por los malos chistes de Taiyang que extrañamente al fin hacían reír a alguien, se iban acercando junto a Qrow. Este último, más calmado que en un principio, los observaba llegar. Algo dentro de él lo irritaba al verlos sonreir juntos. Finalmente tomaron asiento y se disculparon por la tardanza.
—Te dejamos sólo mucho tiempo jeje lo lamento, sucedieron algunos problemas, pero nada que no pudieramos resolver.
—Siii, disculpa Qrow ¡Un sujeto me molestó pero Taiyang lo puso en su sitio!
—Taiyang es un heroé... —susurraba molesto el gemelo Branwen, quien más allá de eso no comentó otra cosa. El rubió notó su aparente silencio y preguntó: —¿Estás molesto, Qrow? Lo sentimos... Fue mucho tiempo, lo sé... pero tuvimos ciertos problemas... —Summer volteó a ver al rubio preocupada porque temía haber molestado a su amigo. Qrow suspiró y espabiló.
—Jeje lo siento, es que odio esperar solo, tú conoces como me pongo, Tai...
—Jejeje pues supongo, hermano ¡eres muy cascarrabias!
—¡Hey! ¡Eso no es verdad!... Bueno quizás un poco jaja.
Summer, más aliviada, rió timidamente y se alegró de ver al Qrow con quien siempre espera convivir.
La función comenzó, los cazadores lucharon y ofrecieron un digno espectáculo. Summer, asombrada, daba pequeños gestos de emoción ante la diversión de los dos chicos, a quienes les parecía divertida su actitud. Se divirtieron mucho juntos hasta el término de dicho evento. Demoraron unas 2 horas, ya estaba anocheciendo y la gente comenzaba a retirarse del estadio. Los chicos comentaban sobre lo visto a la par que iban abandonando la instalación.
—Fue muy divertido, chicos, gracias por invitarme jeje ¡y muy emocionante también! jeje.
—Gracias por aceptar y venir, Summer —aclaraba Qrow con una sonrisa satisfactoria sobre su rostro.
—Cuando quieras, ya eres parte del grupo jajajajaja.
—Jejeje gracias, son muy amables muchachos. Y sí, espero otra salida similar jejeje me invitan si vuelven a venir ¡eh!
—Por supuesto —afirmaba el gemelo.
Los tres continuaron caminando. Summer recordó sobre los materiales de la siguiente clase de laboratorio del profesor Oobleck y tuvo que separarse de ellos, sin embargo, Qrow decidió acompañarla debido a que eran equipo. Taiyang procedía a adelantarse y se despedía de los dos.
—Que bueno que lo recordaste, Summer ¡debo ver a Raven! ¡De seguro está enfadada, ya son las 7:30 pm!
—Suerte con eso, Tai. No me gustaría estar en tus zapatos...
—Jejeje no te preocupes, ella ya los compró jejeje así que ve con calma.
—¿Eh? ¿te llevas con ella? ¿o cómo lo sabes, Summer? —preguntaba extrañado el rubio. Al mismo tiempo, Qrow la observó desconcertado.
—Jejeje no les he contado... Ni a ti que es tu hermana jejeje se me había olvidado. Sucede que, Raven y yo somos compañeras de cuarto — ambos se observaron sorprendidos ante la confirmación de su amiga.
—Vaya, eso sí que es una sorpresa. No quisiera ser tú, Summer... ¿Cómo te ha tratado?
—Jejeje tranquilo, Qrow, ella se porta bien conmigo, de hecho ella fue quien me ayudó a arreglarme para nuestra salida jejejeje. Tu hermana sabe mucho de estas cosas.
—Mi hermana... ¿Es en serio?
—Wow wow wow eso si fue inesperado, pero me alegra que sean amigas. Ves Qrow, quizás era lo que le faltaba a Raven, alguien alegre con quien platicar como Summer jajajaja.
—Lo dudo... ¿Qué estás tramando, Raven...? —pensaba Qrow.
—Jejejeje sip, eso creo. Bueno Qrow, debemos ir por los materiales antes de que cierren, o si no no te preocupes, puedo ir sola jeje. No es necesario ir ambos.
—Naah, está bien. Además, somos equipo, es lo justo. Andando, te veo alrato, Tai, no tardo.
—Claro, chicos, yo iré de todos modos a darme una vuelta con Raven. Al menos que vea que me interesa la clase jaja.
—Jajaja ok, suerte con eso. Vamos, Summer.
—Sip.
Los tres partieron a sus destinos. Qrow y Summer compraron los materiales; Taiyang visitó a Raven quien le llamó la atención por no haberse reportado en todo el día.
Qrow y Summer tomaron un descanso en unas bancas pues los materiales pesaban un poco. La chica se animó a preguntar algo que le había generado dudas durante su paseo al estadio.
—Oye, Qrow... No te pregunté antes pero... Hoy estuviste más callado de lo normal ¿te sucedió algo? Puedes contarmelo... Somos amigos, recuerda. Tú me ayudas y yo te ayudo jejeje.
—Je, no es nada Summer.
—Mmm... Está bien Qrow, no digas nada que no quieras decir. —sonreía la joven. Qrow la miró a los ojos, queriendo pronunciar algo pero de sus labios no salía nada. Un silencio se apoderó del momento y resultó un poco incomodo.
—Summer... —Se atrevía a romper el hielo.
—¿Sí?
—Luces muy bien, tanto ayer como hoy, no te lo he dicho pero pensé que era obvio para ti. Digo esto porque no quiero que mi hermana te haga sentir mal... La conozco muy bien y me preocupaba que ella pudiera haberte hecho algún comentario destructivo y que por eso hayas decidido no traer tu capucha tan característica... Eres una chica muy linda...
—G-gracias Qrow. No dijo nada malo jeje es tal como les conté, ella y yo nos hemos estado llevando bien. Iniciamos con el pie izquierdo pero las cosas fueron cambiando.
—Está bien, sí tu lo dices lo creo.
—Sip. Bueno, ya descansamos lo suficiente jeje hay que volver antes que sea más de noche.
—Claro...
Ambos siguieron su camino, extrañamente no platicaron tanto como de costumbre. Qrow sabía que continuaba sintiéndose raro con ella. Summer disimulaba bien la decepción de saber la poca confianza que Qrow le tenía, apesar de que ella había sido abierta con él.
Justo cuando llegaron a la academia y empezaban a separarse, Summer escuchó a sus espaldas a Qrow decir: —Oye, Summer... Lo que pasó fue que me dejaste en shock, el gran Qrow Branwen nervioso ante una chica ¿Puedes creerlo? no era nada del otro mundo... Sólo era eso, a cualquiera le pasa pero me daba vergüenza admitirlo... Bueno, ya me hiciste decirlo ¿satisfecha?... nos vemos mañana, que descanses —confesaba el joven quien no volteó atrás y continuó su camino al edificio.
Summer quedó estática, sonrojada, y cuando intentó reaccionar Qrow ya no estaba. Pusó una mano sobre su pecho y sintió los latidos de su corazón. Qrow por otra parte, subía las escaleras, y dentro de sus pensamientos finalmente aceptaba lo que le ocurría...
—Summer Rose... Je... Summer Rose, me gustas...

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Final de temporada.

Nota: Espero les esté gustando tanto como a mí :) disfruto mucho escribiendo esta historia del team STRQ. Este fic y el de Ruby son mis favoritos.

Amores dañinos sobre una rosa blancaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora