No pude olvidarte...

Capítulo 1

1: Dejarlo ir

Imelda cerró la puerta de golpe al ver que su "marido" Héctor se fue de la casa para cumplir su sueño de ser músico junto a Ernesto, ella se re costo sobre la puerta poniendo sus manos en sus ojos aguantando sus ganas de llorar.

--Él volverá, ¿verdad mami?-- le pregunto la pequeña Coco de apenas unos tres años de edad llorando.

Imelda dio un largo suspiro.

--No lo creo, y espero que jamás vuelva-- dijo con ira.

--¿Mami?-- pregunto ella al verla así.

Sin más que decir, agarro todos los instrumentos que habían y se deshizo de ellos.

--*No más música* se dijo a sí misma.

Luego de eso agarro la foto que tenía familiar y dudo por un momento, le partía hacerlo, pero debía, sabía que ese hombre no volvería más, y que si quiere que ella y su pequeña hija lo olvidarán, tenía que hacerlo.

Sin pensarlo más, arrancó la parte de la cara de Héctor y la tiro al suelo.

Coco al ver lo que hizo su madre, llevó sus manos hacia su boca, luego de ver que su madre se iba hacia otra dirección, ella llego, agarró esa parte y la guardo en la mesita de su cuarto, con la esperanza de que su padre volviera.

Imelda, pensaba en como mantener a su pequeña hija, son ellas dos nada más.
Sus hermanos podrían ayudarla, pero ella quería hacerlo por su cuenta.

Luego se acordó que los zapatos de su querida hija necesitaban arreglo.

--Coco-- llamo a la pequeña.

La niña se limpió las lágrimas de sus ojos para ir donde su madre.

--Si señora-- respondió a su llamado.

Ella la tomó en sus brazos, la sentó en el banco y empezó a revisar sus zapatos.

...

Cuando llego la noche, fue acomodar a su hija para que durmiera, y ella continuará aprendiendo.

--Mami, cantame una canción-- le pidió.

--No, ahora descansa-- respondió cobijando la.

--Pero papá...-- prosiguió.

--Él ya no está aquí y no hay más música, ¿entendido?-- menciono de una vez molesta.

Coco solo asintió triste.

Imelda beso su frente y se dirigió a la puerta.

--Descansa Coco-- dijo antes de cerrar la puerta de su cuarto.

Luego de cerrarla, cayó al suelo a llorar, su esposo se fue, la abandonó, su corazón se encontraba roto, la promesa ante el altar fue olvidada, la dejo con una niña sola, ¿me amaba?, ¿qué hice mal? se preguntaba mentalmente.

Luego de llorar un rato, se levanto para poner manos a la obra, esa noche, continuo trabajando, y con el tiempo, aprendió a hacer zapatos.

Y así empezó el negocio de los Rivera en la zapatería, le enseño a sus dos hermanos ya que quisieron ayudarla.

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Hola!!

Iba a subir esta historia en mi otra cuenta, pero pensé que mejor la subiría en esta, además son dos libros e iba subir el segundo en esta, entonces iba a ser raro estando cada libro en diferente cuenta (tampoco esque tiene importancia secuencial)

Además, iba a ser un one-shot pero veía que iba a quedar larguísimo entonces lo haré con varios capítulos.

Espero que lo disfruten

Los quiero♡