The trash needs to be in the trash can.

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Vista de Pete.

Procuré llegar temprano al punto de reunión que siempre tenía con Andy, este se sorprendió bastante al verme clásico antes de que él llegara, pero le expliqué que no pude dormir bien y me levante inclusive antes de que la alarma sonara, caminamos hacia el colegio y discretamente comencé a buscar a la castaña que planeaba visitar el día de hoy, o al menos a alguno de sus amigos raros con los cuales se juntaba. Sin resultado alguno llegamos al edificio principal y nos dirigimos a los lockers para tomar los libros debidos de las primeras horas de clases.

Andy me hizo señas de que era hora de acercarnos al salón, había notado que no dejaba de buscar a Anette así que optó por tomarme del brazo y llevarme a la fuerza al salón, en el trayecto lo único que pude ver fue a Patrick y al chico raro de Joe pero ella no estaba a su lado y resignado entre a clases, decidido a dejar al menos por las horas que permanecería en un aula a olvidarme de la chica que no dejaba de darme vueltas en la cabeza. El día fue bastante curioso participe más en clases y no me metí en algún problema con algún profesor en todo el día, a decir verdad me pareció algo veloz el paso de las horas y cuando menos lo pensé ya estábamos entrando en la ultima hora de clases.

-Andy, ¿saldrás minutos antes verdad? Recuerda que a veces se va directamente a su casa y por otros momentos no, no sabemos cuál sea hoy.-

-Si Pete ya sé que tengo que hacer, agradecía a todos los cielos que no hubiera abierto la boca al fin en semanas sobre ese tema, pero eres tú, qué remedio te podré encontrar, mientras yo no salga embarrado en esto todo estará bien. Quizá y esa chica al f pin te ponga los pies en la tierra por un rato, es bastante agradable pero siempre cierta persona la termina arruinando.-

Únicamente me lleve la mano a la nuca algo apenado pues él fue quien me había dado la oportunidad de poder salir ese día con An y claro yo la regué con tal de hacer enojar a Patrick. Solo reí un poco y me senté en una de las bancas de hasta atrás. Exactamente esa última clase me pareció realmente eterna y horrible, casi no pude prestar atención y el profesor optó por ignorarme el resto de la hora hasta que salió Andy excusando que tenía un dolor en el estómago y que iría a la enfermería o a su casa, y como este era un buen alumno a pesar de todo el desmadre que podríamos hacer juntos o en fiestas el profesor no chisto e inclusive le dijo que le informara como es que seguía si llegaba a faltar.

Media hora después sonó finalmente la campaña de salida, el bullicio del colegio comenzaba a esparcirse por todos los pasillos, saliendo inmediatamente del salón comencé a correr a la salida para poder alcanzar a mi amigo por detrás de su casa y recoger lo que le había encargado, a pesar de no ser muy detallista le pedí que buscará una Dalia, era una flor algo extraña y que consideré iría mejor que nada con la personalidad de la castaña.

Corrí lo más rápido que pude para poder llegar al parque y de ahí dirigirme a la casa de Andrew donde ya se encontraba esperándome en el pórtico trasero de esta con flor en mano y un rostro un poco serio.

-Pete... Tengo una se sanción vaga de que esto no va a salir nada bien, quizá deberías de dejarlo así, es lo mejor si en verdad le caes aún que sea un poco bien ella se va a acercar a ti aún que sea poco a poco.-

-Andy.-

Coloqué mi mano en el hombro de mi amigo sonriendo y tomando la flor.

-Siempre tan dudoso de las acciones, lo indebido a veces es la mejor forma de hacer las cosas y este momento es lo correcto, tú tranquilo que todo saldrá realmente bien, a parte  soy Pete Wentz todo sale como quiero cuando quiero.-

Diciendo esto último salí corriendo a la casa de Anette para llegar antes que ella, o intentarlo, no alcance a escuchar lo último que Andrew dijo, y solo levanté la mano haciéndole una seña de despedida. No tarde mucho en llegar a la casa de la chica y por lo visto aún no había llegado nadie de su familia ni ella por lo que opte por esperar recargado a un lado de la ventana que daba a la calle.

Agradablemente solo tuve que esperar unos cuantos minutos para divisar a lo lejos que la castaña se acercaba a su casa, inmediatamente me puse en pie escondiendo la Dalia detrás de mi espalda e intente poner una sonrisa que fuese agradable para Anette, pero está al notar que me encontraba en su pórtico cambio inmediatamente su semblante por uno bastante serio e inclusive de desagrado. Di unos pasos hacia adelante para recibirla con alegría mientras le estiraba la mano para darle un abrazo amistoso, mismo que evitó empujando mi mano y diciendo en un tono seco.

-¿Qué carajos estás haciendo aquí, en primera como sabes dónde diablos vivo? Creí haberte dejado muy en claro que no quería que te atrevieras a dirigirme la planta.-

-Oh vamos An.-

Mencioné en un tono bastante despreocupado e inclusive diría que insolente, al tiempo que sacaba la flor y ella la veía con un rostro inexpresivo.

-Sabes que solo es un pequeño corajito está bien hice mal pero ve quiero compensártelo y que veas que con cualquiera hago eso.-

Por unos momentos mantuvo un silencio profundo e incómodo que pensaba romper hasta que tomó la flor y comenzó a hablar.

-Vaya al parecer sí que sabes usar mínimo el cerebro y entender lo que es hacer estupideces, aún que no creo que proceses bien las cosas, no soy ninguna de tus amiguitas ni de tus fangilrs como para que llegues como si nada hubiese pasado, y muchísimo menos con un carácter tan arrogante como el que tienes, ¿Qué? ¿Acaso creíste que una flor y unas palabras vagas y sin sentimiento serian la solución a tu pésima actitud?.-

Mi expresión inmediatamente cambio, estaba bastante sorprendido, habíamos tenido pequeñas discusiones y nos habíamos levantado la voz, pero nunca había visto así de molesta a Anette, ni sí quiera el día del beso, intenté hablar pero me era imposible, no hice acción alguna, solo la veía estupefacto mientras seguía hablando.

-Oh perfecto ahora sí el gato te comió la lengua ¿No? No eres más que un imbécil, creíste que caería a tus pies solo por qué eres el típico chico de película rudo por el cual todas mueren pero no te salió el numerito, y si esto lo haces para molestar a Pat lamentó decirte que el único que se está molestando inútilmente eres tú, deja de fingir un inglés un mí no soy tu jueguito y mucho menos para que alguien te note y le hagas imposible la vida.-

En el preciso momento en que sacó a tema el problema que había entre el rubio y yo la sangre comenzó a hervirme y no pude evitar quedarme callado.

-Lo que haya pasado entre Patrick y yo no te incumbe, al final no eres diferente de la noviecita tonta que le baje en el secundario, ni de  las chicas que no son relevantes en el colegio, con mucha razón terminas siendo amiga de esos perdedores, no sé por qué demonios pierdo el tiempo contigo y lo robas como si nada metiéndote en la cabeza de las personas para estar dando vueltas en esta.-

-¡Pues bien! Lárgate de mi casa y llévate tu estúpida flor, al menos sé que a mí me quieren por lo que soy y no por lo que finjo ser por darle demasiada importancia a personas babosas como tú.-

Ya había dado la media vuelta para retirarme cuando sentí en la espalda el leve golpe de la flor y solo apreté fuertemente los puños, lleno de frustración, coraje y en cierto modo algo que hace mucho no sentía, tristeza. Anette había podido destronarme en segundos y tenía razón en muchas cosas que había gritado, así que deje la flor ahí y seguí mi camino hasta llegar al Metro para ir a casa, envíe un mensaje a Andy para decirle lo que había resultado y uno más pidiendo perdón a la castaña por la situación de unos momentos antes, aún que claro no esperaba respuesta alguna de este último.

I thought of angelsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora