¿This charming class?

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Pasaron las primeras clases y la campana sonó anunciando que la hora del almuerzo empezaba, tomé rápidamente mi mochila y salí del salón directo a cualquier lugar en el cual perderme, había olvidado que almorzaría con Stump, corrí por los pasillos hasta llegar a uno de los jardines, tomé aire para regular mi respiración  y sentándome en una banca cercana me coloqué los audífonos  y puse la música a todo dar, después de unos minutos noté que a lo lejos iba el chico con el que había tropezado en la mañana.

No le preste importancia, al menos  no tanta, lo vi y casualmente él volteó, de inmediato retire la mirada notando que Stump caminaba hacia mí con un rostro más de decepción que de enojo. Vi que mencionó algo pero no le escuche por los audífonos, hizo un gesto y cabizbajo se retiraba. Al volver la vista ya no se encontraba el otro chico. Retiré los audífonos y busque a Stump, aún no estaba tan lejos, así que corrí tras él tomándolo del brazo.

-¿Eh?.. ¿Qué?-

Mencionó el rubio volteando aun con la mirada algo caída.

-Perdón, por un momento había olvidado que almorzaríamos juntos-

-Suele pasar...-

Me respondió en un tono más frio, me sentí algo incomoda o mal, había hecho algo un poco malo así que le sonreí y le solté el brazo.

-Espera-

Fui por mi mochila y regresé a su lado.

-Vamos por algo para almorzar, ¿Te parece?-

Se sorprendió un poco y cambio el gesto de decepción por una sonrisa, asintió y caminamos al comedor, en el camino se nos unió su amigo de cabello gracioso, del cual por el  momento no recordaba su nombre, después de unos minutos  llegamos al comedor, tomamos algo para almorzar y fuimos a buscar un lugar donde sentarnos. Todo lleno, ni una sola mesa para tres personas que daba, o eso creíamos hasta que Stump nos llamó, había encontrado una mesa con lugares, justo nos dirigíamos a sentarnos cuando llegaron las chicas que en la mañana me pidieron unirme a su legión de plásticas, jalaron las sillas en  menos de un segundo y se sentaron como todas las tontas engreídas que eran.

-Vamos Anette aun puedes cambiar de opinión y sentarte con nosotras, deja a esos dos inútiles, ya se irán a hacer cualquiera de sus rarezas-

Mencionó la que parecía ser la líder del grupito

-No, gracias, yo no necesito estar con una bola de plásticas-

Respondí sarcásticamente para después darles la espalda y jalar a uno de los chicos que me acompañaban lejos de ahí, siendo seguidos por el otro, buscamos un lugar fuera de la cafetería y nos sentamos a descansar y poder degustar lo que habíamos conseguido.

-P...Perdón por eso-

Mencioné algo apenada.

-No te preocupes, es impresionante ver como una chica no se dejó manipular o se quedó callada ante ellas-

Me respondió el chico castaño tranquilamente y volteo a ver al rubio.

-Él tiene razón, son las dominantes del salón y les hiciste frente, te admiro-

Hice un leve gesto de sorpresa por las palabras del chico, este al verla se apenó un poco y bajó la mirada.

-Bueno al menos ya no los molestaran tanto o eso creo-

-No creo eso, ellas trataran de hundirte-

Advirtió el amigo de Stump.

-Pues que lo intenten, no saben con quien se meterán-

Les sonreí y miré a ambos con calma.

-Bien me sé sus apellidos chicos pero no sus nombres, ¿Puedo saberlos?-

Dije en un ataque de curiosidad.

-Yo soy Patrick-

-Y yo soy Joe-

-Vaya tienen lindos nombres-

Reímos un poco, dedicamos un momento de silencio para disfrutar nuestros almuerzos hasta que este fue interrumpido por el sonido de la campana, avisando que era hora de volver a clases.

I thought of angelsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora