Cap 3 "Guerra y Notas"

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TATIANA

La fiesta aun no terminaba, pero para mí ya lo había hecho, tenía dos maletas sobre mi cama, una estaba media llena y la otra totalmente vacía.

Alguien toco la puerta, me voltee y era Demian, apoyado sobre el marco de la puerta mirando mi habitación.

_ ¿Qué se supone que deba llevar? -dije sin mirarlo y pude nuevamente escuchar su voz, esta vez más calmada que las últimas, era fuerte y clara, grave y con un ligero asentó ruso.-

_En esta época del año hace frio así que deberías de llevar algunos abrigos, pero, una vez allí compraremos ropa, así que no te preocupes demasiado.

_ ¿Qué haremos con mis libros? -tenía una biblioteca en mi habitación llena de ellos eran como 500 maso menos, y no pensaba deshacerme de ellos. -

_Los llevaremos en otro momento, estarán guardados en la biblioteca principal de la mansión. -al decir eso me emocione un poco, ¿él tenía toda una biblioteca en su casa?, yo apenas tenían unas estanterías en mi habitación donde casi no cabían los libros y algunos acomodados en cajones, en el piso y en la mesa de luz-

_ ¿Tienes una biblioteca en tu casa? -me quede mirándolo algo asombrada, mientras guardaba unas remeras de mangas largas en la valija. Él también se quedó mirándome y luego camino hacia mi estantería y leyó algunos de los títulos de los libros que ahí habían. -

_Crepúsculo, ¿es enserio? -me miro gracioso-

_En mi defensa a mi prima le empezó a gustar un vampiro de su clase de teatro y de tanto hablarme de ellos me dio curiosidad. -el solo sonrió de lado y ahora si podía decir que se veía sexy, no me iba a abstener de pensarlo solo porque el es un idiota, que me reclama como suya tirándome contra una estúpida pared. Desde entonces cada movimiento brusco que hacia provocaba un pequeño tirón en la zona. - ¿Cómo hiciste para conseguir un boleto de avión tan rápido?

_No tuve que conseguir nada vine en mi jet privado, y en el nos vamos a ir. -¿qué clase de hombre lobo es este? Que tiene un jet privado, mi familia era adinerada pero tampoco tanto como para tener un jet privado. -

_ ¿Es enserio? -no me fiaba mucho de su palabra, tal vez se trataba de una broma. -

_ Si.

_Como haré para hablar con otras personas, no se ruso.

_ No es necesario que hables con nadie, además yo se español así que no tienes por qué preocuparte. -termine de hacer las maletas, puse algunos libros que no había terminado de leer entre la ropa, y deje una muda sobre mi cama para cambiarme cuando la fiesta termine y me tenga que ir a Rusia con un loco, que no quiere que hable con nadie.

Entonces toda la fuerza y autocontrol que tenía para no llorar se desplomo, y lo que en un inicio fue una lágrima, una simple gota de agua cayendo de mi ojo derecho hasta mi barbilla se convirtió en un mar de ellas, que no podía secar con mis manos. -

_Vete -dije con la voz algo quebradiza, Demian no se movió ni un poco solo se quedó mirándome algo confundido. Me limpie otra vez las lágrimas dándome la vuelta para que no me vea llorar, aunque era obvio que ya lo había notado, tome una campera negra que tenía en un perchero y salí al balcón de mi habitación, el frio viento me golpeo la cara tirando mi pelo hacia atrás despejándome el rostro, mis lágrimas se empezaron a volver frías, y escuche a alguien abrir la puerta de vidrio para entrar al balcón, sabía que era Demian, limpie mis lágrimas y me di la vuelta.

_ ¿Estas llorando?

_No, solo necesitaba aire. - mentí, no me gustaba que me vieran llorando, me sentía débil.

Entonces una flecha, paso cerca de mi brazo izquierdo y se clavó en el asiento de madera que tenía sobre el balcón, inmediatamente Demian me cubrió con su cuerpo por si otra flecha venia en mi dirección pero no fue el caso, su cuerpo era musculoso y muy cálido, tenía un delicioso aroma a perfume de hombre, y sus manos abrazaban mi cintura con fuerza, no me dio tiempo a reaccionar asique mis manos estaban sobre su pecho, unos segundos después me metió a mi habitación a empujones y me dijo que me quedase ahí, el salió y volvió a entrar con un pedazo de papel en sus manos.

_Estaba en la flecha.

_ ¿Qué dice?

_"Si el Alpha no nos da lo que nos pertenece entonces habrá guerra. Les damos tres días." - leyó el- ¿De qué está hablando?

_No lo se, se lo mostrare a mi padre. -dije y le quité el papel de las manos, pero el agarro mi muñeca y dijo. -

_Las flechas solo las usan los centauros. Si tu manada está en guerra con una tropilla de centauros entonces con más razón te vendrás conmigo hoy.

_Yo iré, pero tu manada debe ayudar a la mía.

_ ¿Qué es lo que quieren?

_No sé, escuche a mis padres hablar de una posible guerra, pero no es el porqué. -sin decir más me soltó, y fui a buscar a mi padre le dije lo que había pasado y él se apartó de mí y hablo con el señor idiota.

Este mantenía su expresión seria en todo momento y alternaba su mirada entre mi padre y yo. Luego de una corta charla, mi padre se dirigió hacia a mí y dijo. -

_La fiesta está por terminar despediremos a los invitados, te cambiaras y te iras con Demian.

_ ¿Por qué habrá guerra?, ¿Se trata de centauros?, ¿Qué quieren?

_No lo sé.

_Si los sabes escuche a mama hablar con vos esta mañana y sonaban preocupados.

_No es nada, incluso también puede tratase de una broma. -y sin más se fue dejándome con las palabras en la boca, ¿de qué se trataba todo esto?...

....

La fiesta había terminado, todos los invitados a excepción de la familia de Demian se habían ido, y yo me había puesto un jean azul claro con un suéter de lana algo grande color manteca, con unas botas de color negro con algo de taco.

Las dos valijas que tenían se encontraban a cada lado de mi cuerpo, todos estaban sentados en unos sillones de la sala, sin decir nada.

_Ya estoy lista -dije rompiendo el silencio, mi hermano se levantó y se acercó a mí con una cajita en sus manos. -

_ ¿Recuerdas que te dije que iría a la ciudad a buscar tu regalo? -asentí- bueno este es -y posteriormente abrió la cajita, que tenía un collar con una piedra en forma de lobo-

_Es hermoso, gracias -le dije dándome la vuelta para que lo ponga en mi cuello, el aparto mi pelo, coloco el collar, lo prendió y me dio un beso en la mejilla, a lo que Demian reacciono con un gruñido bajo.

Finalmente me despedí de mi familia y no pude evitar dejar unas lágrimas sobre los hombros de mi madre quien lloraba mientras me decía que mi vida cambiaría y que no dude en llamar.

Una auto negro que parecía blindado no llevo a Demian y su familia hasta el a aeropuerto para luego subir al jet, no le dirigí una sola palabra en todo el viaje solo me resigne a mirar por la ventana y acariciar el lobo de piedra de mi collar.

Hasta que el sueño me gano y me quede dormida mientras estábamos volando.

Entre los labios del AlphaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora