オペ - I

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Eran los mejores amigos, aún con todo y sus peleas e insultos, por lo que nadie, ni siquiera sus demás conocidos se les comparaban. Amistad como la de ellos no existía, simplemente Kakuzu e Hidan eran un dúo imparable.

Se les conocía como "la pareja zombie", pues acostumbraban desvelarse hasta tarde, con tal de estudiar lo suficiente y ser los mejores en sus respectivas clases. Por lo que siempre andaban con cara de pocos amigos, mal humorados, adormilados, cansados, y con una jeta que daba miedo.

Hidan era bueno en ciencias, nadie podría ganarle en ello, ni siquiera su amigo Sasori que había estudiado Bioquímica. Así que por esa razón, el había elegido estudiar medicina... Aparte que era un poco sádico.

Su mejor amigo Kakuzu, era muy bueno en matemáticas, por lo cual este escogió estudiar física, aunque más que nada era porque un físico, siempre gana mucho dinero en el ámbito laboral... Siempre fue ambicioso.

Y aunque los dos estaban estudiando diferentes carreras, lo hacían en la misma facultad, así que eso no evitaba que los dos en cada descanso, se quedarán de ver para comer juntos, a veces solos, a veces con sus demás amigos.

El caso era, que un día... Algo cambio.

Kakuzu se enfadó cuando Hidan le presento a su primera novia, una chica mucho menor que él. Su nombre era Sakura, una niña de piel blanca, cabello teñido de rosa y que acababa de entrar a la carrera de medicina.

La chica era insoportable; gritaba, chillaba y siempre exageraba todo. Traía a Hidan como un perro de ahí para allá, siempre sujeto a sus caprichos de chiquilla inmadura. Por lo que Kakuzu, la odiaba... Pero más odiaba a Hidan, por dejarse manipular por esa zorra.

Fue ahí, en lo que había durado esa relación, que Kakuzu se había dado cuenta de que su enfado, no era más que celos.

Pero es normal... Si alguien te quita a tu mejor amigo, obviamente sientes rencor por esa persona, pues te está robando su atención.

Lo negó muchas veces, se regaño a sí mismo y hasta platicó con Hidan sobre cómo se sentía, cosa que fue muy vergonzosa y un error, pues este se burlo en su cara y le dijo que no "dramatizará".

Aún así, siguió sintiendo esos extraños celos, en especial cuando Sakura besaba a su amigo, o le abrazaba... No lo soportaba, le hacían rabiar.

Y aunque sabía que no debía preocuparse, que Hidan siempre sería su mejor amigo y que no había razón alguna de sentir y ponerse así... Algo en su interior le gritaba que había algo más.

Y entonces, cuando Hidan le confesó que se había acostado con esa bruja rosa... El lo entendió.

Podía ser que su mejor amigo, le atraía físicamente. Después de todo, siempre lo consideró muy atractivo.

...Su cabello plata era extraño, pero combinaba bien con el tono pálido de su piel y esas exóticas pupilas violetas. Y aún a pesar de siempre estar encerrado en bibliotecas leyendo libros sobre cosas médicas, tenía un cuerpo muy bien cuidado, era alto, no tenía tanto bello, siempre iba correctamente vestido con su uniforme blanco y su cabello perfectamente peinado hacia atrás. Parecía un ángel si se lo pensaba... El único defecto era su ridículo fanatismo religioso... Pero con los años que tenía de conocerlo, Kakuzu se había acostumbrado a ello.

Isha no shiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora