Changbin ha tenido dudas acerca de su sexualidad pero no va a aceptarlo por nada del mundo, o por lo menos eso piensa hasta que Felix aparece en su vida.
•Portada por @squishyongbok
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Además de la música, Bang Chan tiene un gran talento en la cocina. Es decir, podría realizar un banquete gourmet, pero sus amigos concuerdan en que prepara la mejor pasta de Seúl. Ahora esta menos cansado y su dolor de cabeza se ha reducido. Al no poder dormir durante la noche, su cuerpo se ha acostumbrado a ser más productivo a esas horas. En cosa de diez minutos ha puesto la mesa, preparado la comida y limpiado con algodón las heridas de Hyunjin.
—¡Vengan a comer su pasta! —exclama para que los chicos que se encuentran en la sala se acerquen al comedor.
Minho y Jeongin ayudan a Jisung a caminar y lo sientan frente a su plato. Han aún está medio consciente y mira la pasta frente a él con los ojos entrecerrados.
—No me gusta la pasta.
—Sí te gusta, Sung —Minho intenta persuadirlo para que coma. Ha estado repitiendo todo el tiempo que tiene hambre y ahora no quiere ni ver el plato. —Vamos, come.
—¡No me gusta la pasta!
En la mente de Jisung todo es confuso y divertido. No ve con claridad, incluso todo en su campo de visión menos el plato de pasta está completamente borroso. No puede oler nada, y sólo oye de forma distorsionada las conversaciones que sus amigos tienen sin entenderlas en realidad. Es gracioso pensar que sólo tres cervezas lograron hacerle eso, pero también es lógico. Jisung jamás ha bebido más de la mitad de una cerveza en su vida, porque el sabor del alcohol no es lo suyo, y además su estómago estaba vacío al momento de beber.
—Ponle esto —Hyunjin, quien esta vez sostiene un filete congelado contra su cara, pasa a Minho un envase de queso rallado. —Le gusta el queso.
—¿Quieres ponerle queso, Jisung? —pregunta Lee y el chico ebrio le arrebata el paquete de eso poniendo casi todo el contenido en su plato.— Muy bien, creo que es suficiente.
Ahora, con su plato de pasta lleno de queso, Jisung come animadamente como no lo hace desde hace tiempo. Sus mejillas se ven más rellenitas y en ciertas ocasiones cierra sus ojos mientras mastica como si en serio lo estuviese disfrutando. 431 calorías por cada cien gramos de queso, si comió exactamente 1245 calorías en el día puede permitírselo. Al día siguiente hará ejercicio, hoy merece la pasta con queso.
—Me gusta el queso —sonríe Han luego de tragar.
Los demás chicos se sientan a comer también, pues aún siendo las tres de la mañana jamás rechazarían un plato de pasta cocinado por Chan. Ahora que están tranquilos y a salvo pueden hablar entre risas acerca de lo mal que la pasaron en la fiesta y burlarse de Hyunjin y su trozo de carne en la cara.
—Jisung dormirá en mi habitación porque me da lástima —habla Seungmin con la boca llena. —Pero alguien debe dormir con él para cuidarlo, por si ocurre cualquier cosa.
—Jimi Hendrix —se burla Hyunjin y para regañarlo, Chan presiona suavemente su dedo sobre el pómulo lastimado del hijo —¡Hijo de puta!