Capítulo 32: Marca

1.1K 78 20
                                    

Narra Solange.

-¿Entonces se supone que es aquí? - Observé el lugar con mucha atención. Mi mirada no tenía un punto en específico, porque todo era muy despampanante para mi vista, y realmente me gustaba prestar atención hasta el mínimo detalle. 

La zona en la que se encontraba la casa discográfica de Geffen Records, era quizás uno de los lugares más costosos de Los Ángeles y para saber eso, no era necesario haberse recorrido toda la ciudad, pues todo lo que estaba ahí, gritaba ser costoso y lujoso. Desde los carros que transitaban y se lucían siendo los mejores modelos de los años 80's, hasta las personas que caminaban por ahí, vistiendo con lo último de la moda. Estaba segura, que este lugar podría haber sido una de las avenidas más extravagantes, que haya pisado durante toda mi corta vida.

- Así parece. Es aquí. - Izzy me observó divertido mientras fue soltando de a pocos mi mano. - Espero que todo salga bien Sol. 

- Sabes que así será Izz. - Hablé de forma baja y con una corta sonrisa entre mis labios, fue lo suficiente como para darle los ánimos que el quería escuchar o sentir en este caso.- Todo saldrá muy bien, ya lo verás.  

Un intercambio de sonrisas fue lo único que se presentó y seguido de ello, observé como Izzy se iba hacia donde se encontraba el pórtico de la gran entrada que tenía como letrero el nombre de la casa productora. Ahí estaban los cinco, con sus instrumentos y con todo lo necesario para poder convencer al Sr. Geffen, que ellos eran lo suficientemente talentosos y que serían capaces de comerse todo el mundo con tan sólo hacer conocida su música. Esta era la oportunidad perfecta, en el momento perfecto para la banda perfecta. 

- ¿Crees que que le den hoy mismo el contrato, Sol?- Preguntó Michelle de forma curiosa. Se había puesto a mi lado, después de haber dejado a Slash que también se uniera con sus demás amigos.

- La verdad es que no lo sé. Pero espero que así  sea y cuanto antes. Izzy está muy emocionado. - Hice un gesto muy propio de mi y sin decir más, volteé para ver como los cinco hablaban entre ellos. - Sé que pueden ser algo desordenados, y quizás prepotentes en ciertos momentos, pero aún así como músicos son realmente muy buenos.

- Eso espero... Y espero que no lo arruinen. Estoy segura que Slash y los demás están algo pasados de copas. - Su voz sonaba muy angustiada.

- ¿Qué? ¡Michelle! ¿Y ahora? - Dije algo preocupada.

- No sé.- Respondió rápidamente, dando un leve suspiro que fue interrumpido por el sonido de la puerta abriéndose del local. Era por fin el momento de la verdad.

La noche pasó muy rápido para mi gusto y para el gusto de todos. Ahí estaban ellos cinco, frente a siete personas aproximadamente, tocando como nunca lo habían hecho. Era un par de productores de música, el propio Sr. Geffen y quizás unos ayudantes más, que estaban siendo cómplices de lo que sería quizás una de las mejores pruebas que se habían dando en todo este maldito tiempo.

Axl tan impecable como siempre en sus rangos vocales a pesar de lo ebrio que podía llegar a estar y todos los demás contribuyendo a que el sonido de la música sea enérgica y fuerte. Eran jodidamente buenos como siempre, dejando callados como era de costumbre.  Ellos, con el pasar del tiempo, se iban volviendo mucho mejores, mucho más hipnotizantes y mucho más adictivos. La batería, las guitarras y el bajo sonaban tan bien, que hizo que por un momento me estremeciera. Mucho más, cuando apareció el intro de una canción titulada "My Michelle"  y que al parecer se habían basado en la vida de mi amiga que tenía al lado. Era literal un pedazo de canción. No había mejor forma de como describir a ese conjunto de composición. 

- ¡No les dije! Ellos suenan malditamente bien. - Dijo el Sr. Geffen a sus demás trabajadores con mucha efusividad, hablando a mitad de canción. Algo que me sorprendió, porque pensé que iba a esperar a que terminara.- Es suficiente chicos, con ese par de canciones creo que puedo obtener lo que quiero. Paren. - Ordenó.

Decisiones Nocturnas |Izzy Stradlin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora