Ni lo Intentes ©

CAP. 8

SENTIMIENTOS OCULTOS

Lo bueno es saber que pronto te veré
~

Pensamientos así siempre llegan a mi cabeza ya que él siempre esta en mi mente, y conscientemente me gusta pensar en él.

Había pensado que debería de contarle a mis padres sobre mis sentimientos hacia Ryan, así que fui a ver a donde estaba mi madre, y voy a la cocina para luego encontrarla a ella cerca del lavaplatos a espaldas a mi.

—Mami, _la llamo algo nerviosa.

—Ajá, dime, _dijo ella la cual al cabo de unos minutos ya estaba frente a mi, como si ya supiera lo que le iba a decir.

—Eh, me gusta un chico, y me daba pena decirte, porque algo complicado de entender, _digo y ella abre los ojos como platos en cara de asombro para luego morirse de risa. —Y de que te ríes? _le digo algo divertida pero con semblante serio.

—Ni modo que sea una chica que te gusté cariño, _dijo mi madre riéndose y se voltea de vuelta.

—Jeje, mami es enserio esto, _digo y ella vuelve a voltearse, pero esta vez con el rostro serio.

—Losé, pero que bueno que al fin lo testificaste, _dice cruzándose de brazos.

—Bueno sii, eso cuenta, aunque me daba pena decirlo, pero en fin, me gusta un chico y se lla...

—Como se llama? _dice mi padre entrando a la cocina, interrumpiendo lo que obviamente iba a decir.

—Lo iba a decir, y me interrumpis...

—Ya solo dilo Mari, esperamos, _dijeron papi y mami casi juntos, logrando otra vez interrumpirme.

—Ufff, pero que desesperación la de ustedes, JAJA, bueno, él se llama Ryan, es hijo de Pastor, talvez conocen a sus padres, _dije poniendo una mano en mi boca y ellos se quedaron mirándome con semblante serio.

—Ah, interesante, ¿y cuando lo traerás a casa? _dice mi padre también cruzándose de brazos.

—Ehhh, jejeje, pero a penas se lo estoy contando y ya quieren que lo traiga a casa? Jaja, tranquilos, _dije riendo y ellos tambien intentaban no hacerlo.

—Bueno, lo primero es que el debe de venir y lo sabes, _dijo mami volteandose de vuelta al fregadero y papi salió de la cocina preguntándome otras preguntas más como: El igual lo esta de ti?, Es buen Cristiano?, De que se ocupa? Y pues yo se las iba respondiendo de acordé al órden.

Salí de la cocina y me fui de vuelta a mi a habitación con miles de pensamientos en la cabeza pero lo que más me brotaba era él, sin duda alguna.

Tomo mi celular y me acuesto, me fijo que ya son las 3:27 PM osea que ya era más de medio día, y era obvio que Ryan estaría aún en el trabajo, y "pup" ahí mismo me llega un mensaje de él.

—Quieres video llamada? _escribió.

Siempre hacemos video llamadas ya que como no podemos vernos personal cuando queremos, pues las video llamadas ayudan bastante.

—Siu, _escribí.

Al cabo de ya unos minutos me llamó y le respondí la llamada la cual ya podía verlo desde el otro lado de la pantalla, y él esperaba a que respondiera, él se ve tan hermoso, bueno, siempre lo está, pero esta vez estaba que relucía, tiene un suéter de cuello color negro la cual le queda muy bien, lo observo mientras el ve algo en la laptop, luego me mira y sonríe, amo cuando sonríe de esa manera, me hace sentir cursi por dentro jaja, siempre lo logra.

Hablamos por horas, yo le hablaba y él me escribía, ya que como esta en el trabajo no puede hablar pero de vez en cuando me decía algunas palabras.

—Mah, _escribió.

—Si Pah? _escribí.

—Ya quiero verte, _escribió y yo sonreí.

—Y yo Pah, no sabes cuantas ganas ya tengo de verte, _le escribí emocionada.

Desde la cámara se veía en sus ojos que en verdad estaba emocionado porque, es que me tomo muy en cuenta todo, sus detalles, sus características, sus gestos y muecas, y él es tan único que me deja paralizada todo el tiempo. Ya después de unos largos minutos cerramos la llamada ya que el tenía que terminar unos asuntos antes de irse y yo pues sin darme cuenta caí en un profundo sueño.

***

Ryan estaba a mi lado y sonreía como nunca antes, su rostro brillaba de una forma que nunca en mi vida hubiera imaginado, me agarraba de la mano y me decía que me quería, el lugar donde estábamos era totalmente diferente, colorido, brillante, habían personas caminando alrededor de nosotros y nos saludaban al vernos pasar tan felices, Ryan me llevó a una banca que estaba cerca y nos sentamos, yo recosté mi cabeza en su hombro y cerré mis ojos sintiéndome lo más segura del mundo a su lado, el acariciaba mi rostro con amor y yo gemía a su tacto, luego gotitas de agua empezaron a caer en mi rostro y Ryan me jalo de prisa para que corriéramos bajo la hermosa lluvia, mi ropa quedó empapada y la de él también, corríamos sin parar y luego él se detuvo donde había un jardín lleno de flores, recogió una rosa roja de una rama que brotaba cerca y me la acerco diciéndome que la tomara, la tomé sonriendo y luego el sonrió acercándome hacía él, haciendo que un montón de animales salvajes se muevan dentro de mi, puso su mano en mi rostro y luego, rozó sus labios con los míos, sintiéndome lo más enamorada posible ante ese tacto que jamás había tenido con él, gotas aún caían de la lluvia y nuestros labios aún unidos, pero entonces "PUM" desperté.

No podía creer que todo eso que para mi fue tan, wao, maravilloso nunca fue real, sino que siempre fue un sueño, esos momentos que pensaba que en verdad pasaba con Ryan nunca llegaron a pasar y yo ahí paralizada con la vista en el techo solo pensé en, Ryan, besaba a Ryan y estaba en un paraíso.

En un paraíso de amor.