Capítulo 3

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Capítulo 3

La decisión que estaba tomando _____ era demasiado drástica ¿Cómo era posible que le estuviera pidiendo que no dejara salir a ese hombre lobo impuro? Estaba loca si creía que aceptaría aquello, lo único que quería era que aquel maldito se largara, sentía mucha repulsión por los humanos y por los impuros.

-Estás loca si piensas que accederé a eso, no lo haré ______.

-Por favor, hazme feliz en esto, te lo suplico. -Era una medida extrema, pero se arrodilló ante su propio hermano, él no soportó aquello y la hizo ponerse de pie de inmediato ¿Qué demonios le sucedía a su hermana? ¿Acaso no tenía orgullo?

-¡No vuelvas hacer eso! -Le gritó molesto. -Maldita sea _______, no puedes comportarte así por un hombre.

-Tú sabes que por 3 años lo he estado esperando, JaeJoong, no me separes de él. -Sus lagrimas caían como cascadas, él las secó y suspiró ¿Debía acceder a ese maldito capricho? Porque era claro que solo era un capricho lo que ella tenía, aunque también sabía del poder que le había dado Dios, ver el futuro.

-No lo sé, me estás pidiendo mucho.

-Por favor, JaeJoong, eres mi hermano, no mi enemigo ¿Acaso no quieres verme feliz?

-Claro que quiero verte feliz, pero no con ese tipo, entiende que son mundos opuestos, tú eres pura, en cambio él...

-Solo le quedan 9 meses para volverse puro como nosotros, sabes muy bien que ese veneno tarda un año para convertirlos en puros.

-¡Por favor, no me hagas reír! -Dijo fastidiado. -¡Jamás se les borrará que vienen de los asquerosos humanos!

-No entiendo porque los odias tanto.

-¡¿Te parece poco que hace cientos de años exterminaron a gran cantidad de hombres lobo?! -Ahora si estaba molesto. -¡Además que no se te olvide que matan a los animales por placer, destruyen los bosques para poner sus malditas industrias!

-¿Y nosotros acaso no matamos animales?

-¡Para comer, _______, nosotros no somos como ellos! -Le dijo molesto. -¡¿Has visto a algunos de nosotros usando la piel de los animales?! -Ella negó. -¡Por eso los odio, los asquerosos humanos deberían desaparecer al igual que los malditos impuros que solo son una copia de nosotros!

-No todos son iguales, no todos son malos, dale una oportunidad a Donghae.

-¡No le daré nada, ese imbécil se tiene que largar de aquí!

-¡Perfecto! -Le gritó. -¡Yo también me largaré!

-¿Qué demonios dijiste?

-Sabes perfectamente lo que dije.

-¡Me estás queriendo manipular, _______! -Tomó su brazo y lo apretó, pero no llegó a lastimarla.

-Es tu odio o soy yo, JaeJoong.

Su hermano no dijo nada más, la dejó sola, necesitaba pensar que hacer, por nada del mundo quería que aquel maldito impuro se quedara en su castillo y mucho menos que su hermana se mezclara con él, sería una verdadera vergüenza para su raza pura, pero por otro lado, no podía permitir que su hermana se fuera del reino ¿Qué sería de ella? Y también ¿Qué sería de él? Ella era su única familia, su única hermana.

Todo el día y la noche estuvo pensando en aquello ¿Debía prácticamente tener secuestrado a ese hombre lobo impuro? ¿Debía acceder al maldito capricho de su hermana?

Al día siguiente se levantó y fue hasta la biblioteca, aquel lugar era su refugio de todo lo malo, pero no podía escapar de lo que le tocaba, después de todo, él era el rey de aquel reino. Le pidió a uno de sus sirvientes que llamara a su hermana, finalmente tendría que acceder a lo que ella quería.

-Me dijeron que querías verme.

-Que te quede claro que no estoy de acuerdo con esto y también que te quede claro que jamás trataré a ese imbécil como uno de nosotros, pero aceptaré lo que quieres, prohibiré que salga de este lugar.

________ no pudo evitar sentirse increíblemente feliz, su hombre se quedaría con ella y estaba segura de que muy pronto formarían una familia, o al menos eso esperaba.

-Gracias, JaeJoong -dijo sonriendo ampliamente. -Ahora él está en mi habitación, ve y habla con él, dile que no podrá salir de este reino.

Su hermano salió de mala gana de la biblioteca, tenía que hablar con un impuro y eso lo detestaba. Ni siquiera tocó y solo entró a la habitación, aquel hombre ya estaba levantado, quería hablar luego con el rey y largarse de aquel lugar.

-Con que tú eres el tipo del otro reino ¿A qué demonios viniste?

-¿Quién eres tú? -Preguntó Donghae.

-El rey de este reino. -Respondió con cierta prepotencia, Donghae comprendió en aquel instante que sería muy difícil que aquel hombre aceptara el tratado de paz. -Ahora dime que demonios quieres en este reino.

-Vengo por ordenes del rey Choi Minho, queremos hacer un tratado de paz para ponerle fin a la enemistad.

-No me interesa hacer ningún tratado de paz, me importa una mierda tener esta enemistad, mi gente no se puede mezclar con los impuros.

-No se está ganando nada con esto.

-¡Un estúpido impuro no me va a decir que se gana o no con todo esto! -Dijo con fastidio. -¡Ahora por pisar mi reino no te largarás de aquí!

No espero que dijera nada, salió de la habitación y rápidamente, les ordenó a los guardias que llevaran a los calabozos al hombre que estaba en la habitación de su hermana. Donghae intentó luchar, pero era un débil comparado con ellos.

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