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Uno no sabe muy bien como empezar a contar una historia, menos cuando es tu propia historia. Así que voy a empezar con aquel 12 de Enero, cumpleaños de mi hermana Catalina.

Cumplía 19 años y se iba a juntar con sus amigos en nuestra casa. Nuestros viejos justo salían a la casa de los abuelos y de seguro se iban a quedar ahí. Por lo tanto, Cata y yo, teníamos la casa sola.

Me acomodo el pelo para un lado, frustrada. Me miro en el espejo por milésima vez y me doy cuenta, que no puedo hacer mucho con este pelo de mierda. Por lo tanto lo dejo así, que la chupen si no les gusta.

Agarro el vaso de fernet que dejé sobre la cómoda de mi pieza y salgo. El olor a porro me inunda los sentidos ni bien piso el pasillo.

— Le das duro Lombi — Duki se da vuelta y con los ojos rojos, sonríe de forma exagerada.

— Evelindaaa — grita alargando la última letra. Me río fuerte y le doy un beso en el cachete. Sin embargo, Mauro aprovecha la cercanía y con una mano me agarra una nalga, apretandola.

— Si no vas a comprar no toques la puta madre — me río, el ronronea una risa y con una mano, me acerca a él.

Nuestros pechos conectan y se acerca a besarme.

— ¿Donde mierda esta el baño? Uh, cualquiera loco, sigan sigan — escuchamos decir. Lamentablemente, no puedo contener la risa, y Duki tampoco. Quien carajo es este tipo, dios lo bendiga.

— La concha de tu madre Ecko — grita Duki en modo de burla, otra vez, alargando la última letra de su nombre.

— Me estabas re engañando gil — le dice el recién llegado. Y de golpe pasé a tercer plano en una pelea de maridos con alto contenido en celos.

— Vos con Rocío y yo no te digo nada, igual te odio salí no me hables.

— Vení amor no te enojes.

— La puta madre, que hago aquí — me cuestiono en voz alta, para que se den cuenta de que todavía sigo presente y dejen de pelotudear entre ellos, más respeto por favor.

— Soy Ignacio, disculpa que les corte el mambo. — me dice. Lo miro a la cara, pero con la luz tan tenue del pasillo, se me dificulta mucho analizar su cara.

— Evelina — sonrió y estiro mi mano hacia él. Ignacio la toma y estira de ella para poder depositar un beso en mi cachete. Alto beso papá. Vení que te morfo entero.

Bueno, basta.

Que adrenalina hermano.

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Es lo más pete que escribí en mi vida, pero ya se va a venir lo bueno, comenten no sean gilas, denme amor :(

Nosvemosbebetas🌹🌙

𝕭𝖗𝖎𝖑𝖑𝖆 - Ecko Donde viven las historias. Descúbrelo ahora