[PAUSADA] Delincuente De Buenos Sentimientos

Capítulo 18

~ Narra Hyuk.~

Como no entendía nada de lo que me había dicho Hongbin, si bien era creíble, todo era muy confuso, le pedí que me acompañara a mi cita con la psicóloga, quizás seria de utilidad para la terapia.

Ese día que fuera atendido había tardado más de lo habitual, tanto que Hongbin se durmió apoyado en mi hombro, el estaba bastante cansado debido a que las noches las dedicaba a quedarse hasta muy tarde estudiando. Transcurrieron alrededor de 15 minutos hasta que por fin me llamaron, con delicadeza desperté a Hongbin, abrió los ojos desconcertado y le tomé la mano guiándolo a la consulta.

Dentro de ella, y con timidez le presenté a Hongbin, antes de que empezáramos le expliqué a detalle lo que el me había dicho de la situación. Ella tomó toda clases de apuntes sobre lo relatado y sugirió que comenzáramos con la terapia, me invitó a que me recostara en el diván y comenzó por pedirme relajar desde la punta de mis pies hasta mi cabeza, mientras contaba desde el 10 hasta el 1 lentamente me pidió que respirara profundamente.- Ahora estás completamente relajado tus párpados están a punto de cerrarse.- pude escuchar desde lejos.- No tienes miedo de nada del pasado.-

Todo era negro, pero lentamente luego de un rato todo comenzó a ganar luz pasando por varias tonalidades de gris hasta un blanco tenue. Lentamente una imagen se hizo presente el orfanato, el ambiente era cálido y acogedor ya había caído la noche era hora de dormir porque al mirar hacia abajo logré ver lo que parecía un pijama, no podía moverme con libertad, mi cuerpo seguía su camino como si estuviera programado, cuando me recosté una de las camas frente a la ventana todo fue negro otra vez por unos segundos hasta que oí el sonido de golpecitos contra la ventana, cuando fije mi mirada en ella vi a un niño que aparentaba unos años más que yo, otra vez sin control sobre mi abrí en silencio la ventana y con la ayuda de el salí de la habitación.

- Vamos a jugar un rato...- me susurró sin soltar mi mano.

- Esta bien vamos...- le sonreí y caminamos juntos con mucho cuidado de que no nos vieran.

Fuimos al pequeño patio ubicado detrás de el comedor, el y yo jugábamos con los pequeños insectos en el césped, nos divertía ver a los chanchitos de tierra volverse bolitas y rodar por todo el suelo.

- Oh Hyunnie tienes un bicho...- se acercó a mi y señaló la posición del insecto.

- ¡Ay!.. ¡sácalo!...- pegué un chillido.

- Tranquilo, nada te dañará...- Escuchar ese susurro lejano lograba tranquilizarme de cierta forma.

- No grites nos van a descubrir.- me dijo bajo tirando el bicho lejos de ahí, sentí unos pasos en nuestra dirección. - Vayámonos de aquí...- me susurró y me agarró del brazo.

Entramos rápidamente en el comedor y nos escondimos tras las mesas, nos quedamos ahí durante un rato, riendo por lo traviesos que llegábamos a ser, el ambiente se sentía hostil y pesado, sentía mi cuerpo temblar y sentirse helado.

- Relajate, nada puede dañarte...- de pronto escuché esa voz que se oía como en un susurro.

De pronto escuchamos desde lejos unos disparos y gritos de unos niños los que rápidamente se convirtieron en llantos y gritos de las señoras encargadas de cuidarnos.

-¿Qué está pasando?.- susurré asustado.

- No lo sé, pero no te asustes pequeño...- me susurró y me rodeó con sus brazos, aunque estuviera protegido la pesadez del ambiente iba en incremento.

Los horribles sonidos se comenzaron a escuchar más fuertes y cercanos, de pronto unos hombres vestidos de negro con unas armas entraron en el comedor. Con unas linternas los hombres registraron todo hasta que nos vieron.

Uno de los hombres me tomó por el cuello quería gritar muy fuerte pero me era imposible, era demasiado doloroso, estaba completamente paralizado.

Vi al chico correr enojado y con lágrimas cubrir sus ojos, esa mirada de angustia solo me hizo pensar en alguien... Hongbin.

Se lanzó sobre el tipo y en fue ahí donde un ruido fuerte y espantoso inundó mis oídos, todo negro, frío y hostil otra vez.

- Lo malo no volverá a ocurrir...- esa voz se volvió a oír un poco más audible que antes.

Lentamente las luces se volvieron presentes, la calidez regresaba.- Contaré despacio del 5 al 1 y volverás lentamente a despertar...- la calidez era notable y me tranquilizaba...- 5... 4... 3... 2...- sentí mi cuerpo tensarse levemente.- 1...- abrí suavemente mis ojos se sentían húmedos, había llorado, por mis mejillas aun caían unas lágrimas, miré a mi izquierda y vi a Hongbin se veía bastante preocupado, al otro lado la doctora Choi me miraba atenta.

- ¿Cómo te sientes.- dijo con voz tranquila.

- Se siente como si algo pesado me fuera quitado de encima.- intenté sonreír pero fue imposible, quería llorar y mis lágrimas no dudaron en hacerse presentes. Hongbin aun más preocupado se acercó a mi y me rodeó con sus brazos.- Eras tú...- susurré con los ojos cerrados sobre su hombro. El se separó de mi y la doctora Choi me dio un pañuelo. 

Cuando me pude tranquilizar me hizo preguntas de lo que vi, le conté de la forma más detallada que pude todo bastante similar a lo relatado por Hongbin.

- Esto es muy bueno...- Dijo mirándome.- quiere decir que la terapia ha podido avanzar... ¿sientes que puedes recordar algo más?.- yo negué, era difícil me sentía bloqueado.- No te preocupes es algo complicado, pero ya lograste pasar la parte más dura.- me sonrió.

Anotó otras cosas, me hizo otras preguntas, se despidió de nosotros y salimos de la clínica. Hongbin estaba más callado se veía preocupado, moví lentamente mi mano en dirección a la suya y la tomé el se sorprendió un poco y sonrió.- ¿Qué te ocurre?...-

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☆ muchas gracias por leer

Es uno de mis primeros intentos de escribir... así que pueden haber muchos errores que pido que disculpes... 😽💟

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Besitos💟