Cotidiano

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Kaliningrado, 1947

El profundo e intenso cacofonía de las notas del gran piano resonaba por el viejo e inexpresivo lugar, Obertura Coriolano; El castaño sacudía sus dedos recordando como su madre colocaba el metrónomo al tiempo de las viejas partituras, de los antaños recuerdos de ser amado, de tener una casa y un futuro digno que el nacional socialismo les había prometido.

— Madre. — Suspiró

El recuerdo de su padre con el uniforme de un agente de las wehrmacht, acomodando en ellas las pequeñas insignias que había conquistado y algunas residían en él, las que su papá les daba al decir que no pretendía perderlas en los campos de batallas y como su tío con el uniforme de las Schutzstaffel, tantos antiguas memorias y tiempos desatendidos en una vieja casa que ahora ya no existía, perdida en medio de un nuevo complejo de edificios soviéticos. Su mano golpeó la tecla generando una desarmonía que la niña que lo vigilaba desde la entrada del lugar pudo apreciar, la cría solía transportar encargos de los generales y dueños del orfanato y desde hace tiempo observaba al niño de gafas manipular aquel polvoriento piano canciones que ella jamás llegaría a conocer.

— Roderich. — Una enfermera que ingresaba a la habitación convocó al niño que por inercia detuvo la música. — Limpieza

Oficina del director 09:48 Horas

El cuerpo del albino se contraía gemía una y otra vez mientras su pecho desnudo se estampaba y moldeaba en la pared, el impasible frío lo forjaba a gimotear con más fuerza, pero no podía detenerse,

— Ah. — Quejidos sordos. — Déjeme. — Suplicaba.

Su miembro era acariciado con desdén e irreverencia, violentamente intentando que el niño tuviera un poco de goce ante las embestidas que eran realizadas por el hombre mayor. Su cavidad estaba teñida de escarlata ante la poca preparación, ante la escasa sutileza al ser ofrecido por una módica cantidad de rublos o algún permiso para no ser cerrado el orfanato, nunca se le exponía el motivo de ello, pero esos hombres, ancianos, jóvenes siempre se divertían, jugaban con su ser. 

— ¡AH! Schwein Schwein— Maldecía, su mente era un revuelo de emociones quería acuchillar a aquel hombre obeso que lo penetraba.

— Er-eres heeermoso. — Vociferaba entre gemidos de satisfacción. — Angosto, puro, la penetración perfecta. — Carcomió la espalda, sin restricción la mordida rasgaba la piel, sin miedo pues para sus ojos era un pedazo de carne por la cual había pagado, una nívea y deleitante lujuria que le producía graznar de placer, la moral era algo que no existía en ese momento, el estar cogiendo a un niño, un chico de unos seis o siete ¿A alguien le importaba? Era un huérfano sin beneficio que moriría, un hijo de prusianos, un esclavo de naturaleza por ello la decencia era algo que se quedaba en la residencia, con sus dos hijos y su cónyuge que al llegar la besaría en los labios con esos que anteriormente mantuvo en el coño del infante que suplicaba por no ser ultrajado. Después mimaría las mejillas de sus consanguíneos y les explicaría los motivos porque era un superhombre al salvar al mundo de una nueva disputa legal pero realmente estuvo penetrando a un chiquillo que lloraba al ser rasgada su entrada por el gran y flácido pene. Al terminar el día se acostaría con su mujer la cual le haría rezar a su dios, a ese omnipotente que parecía consentir la crueldad, barbaridad, exceso, perversión, brutalidad y las guerras del mundo; dormitaría evocando como follaba a un niño, al día siguiente buscaría a uno nuevo en otro orfanato que amenazaría con su cierre; Así de flexible era la moral, así de cómoda era la ética de estos nuevos hombres ¿Cuál era la diferencia? Qué diría Aristóteles, Santo Tomás, Kant, Nietzsche y más.

— Hurensohn— Gritó ante el sufrimiento, un líquido surjo de esa parte, sangre, su piel rasgada su mundo giraba su cabeza estaba a punto de detonar al igual que su pene, sellaba sus ojos creyendo que estaba ahí en Berlín del otro lado, lejano de los eslavos junto a una chimenea tomando la mano de su hermano, su padre les contaba algún cuento, Hansel y Gretel, era su favorito y si sus invocaciones no lo engañaban también el de Lud... Poco a poco comenzaba a perder esos recuerdos. Un grito que sofocó mordiendo sus labios y el movimiento más frenético por la cadera contraría y el miembro viril que golpeaba sus entrañas lo hacía percatarse que ya finalizaría que concluiría y así fue el líquido ardiente llenó su cavidad y el asqueroso órgano se retiró dejando una sensación de vacío que ama, nada dentro más que la semilla que brotaba y goteaba intentando escapar de su esfínter.

— очень вкусный— Relamió sus labios besando la pequeña entrada del albino que acababa de penetrar, se sentía glorioso y superior, el pequeño cuerpo su ajustado orificio sin duda regresaría anoto mentalmente y subiendo su pantalón dejó el cuerpo de Gil desnudo esperando que la joven que esperaba afuera orando para salvar su alma ante los actos que permitía limpiara todo. 

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¿Opiniones? 

Muchas gracias a todos los que han leído esto, me sorprende que lo sigan leyendo(?) Gracias totales, el RusPru es una de las parejas que más amo y me es emocionante escribir de ellos y más con la amorosa Aly que me ha inspirado mucho de ellos ♥ Espero llenar sus expectativas con este pequeño fic


Una pregunta fundamental que guiará de la mano a este fic: ¿Creen en las vidas pasadas? 

Мы виделись раньше?// RusPrusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora