Habían pasado varios días después de aquella discusión, hasta que por fin lo decidieron; se casarían cuando el peliverde cumpliera siete meses.
Exacto, tenían un mes para organizar todo; sería algo sencillo y pequeño en la playa Okinawa.
Ahora se encontraban con la chica que organizaría todo, la decoración, platillos, pasteles.
"Bueno chicos, les mostraré los diferentes tipos de pasteles, síganme, por favor. " Dijo la mujer.
Midoriya sonrió ampliamente asintiendo. Shōto frunció su ceño, no quería algo muy dulce.
"¿Algún tipo de pastel en especial?"
"Me gustaría que tuviera helado.."
Shōto no pudo contenerse en rodar sus ojos.
"No puedes comer tanto he—"
La organizadora sonrió con ternura a Izuku. "¿Helado? ¿Cómo un sándwich de helado?"
Izuku volvió asentir repetidas veces, haciendo que sus rizos rebotaran por la acción, sus mejillas pintadas de un lindo color carmín.
"¡Sí, sí, algo así! ¡Oh dios, tengo fotos de varios tipos! ¡Puede tener galletas oreo alrededor y—!"
Shōto suspiró, sería una larga tarde.