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No exagero cuando digo que posiblemente este es uno de los momentos más incómodos de mi vida.

Vamos, sentado en un sillón medio frío que olía a cuero con los ojos vendados, sin saber qué decir ni hacia donde moverme porque no veía nada y encima una chica a mi lado que tenía una risa aguda y que estaba esperando que yo diera el primer paso de nuestra conversación.

Por favor, si alguien me tiene misericordia que esta hora pase rápido.

— Así que... —Mírenme hablándole de primero a una chica.

Jin estaría orgulloso de mí.

— Eunbi —Vamos Jungkook, di más cosas obvias.

La chica no me respondió.

Todo sería más fácil si ella fuera una de esas chicas extrovertidas dispuestas a hablar hasta por los codos pero no, a mi lado tenía una Jeon.

— No te escuché entrar —Dije sobando el cuero del mueble con los dedos de mi mano derecha.

Si mi mamá estuviera aquí diría que esto es imitación del cuero.

Rayos, concéntrate Kook.

— Ni yo a ti —Dijo ella y fruncí el ceño confundido.

— Bueno es obvio ¿no? —Dije intentando sonar amable —Yo llegué primero.

— Ah... qué extraño.

Definitivamente este es el momento más incómodo de mi vida, incluso le gana a aquella vez que estaba viendo pornografía en la pc con mis audífonos colocados y mi mamá entró a la habitación junto a mi tía para desearme feliz cumpleaños.

La habitación se inundó de un silencio gélido que yo no sabía como romper, si Jimin estuviese aquí seguramente haría algo tierno y gracioso que le agradaría a cualquier chica pero en su lugar estaba yo, una piedra con nariz de ratón sudando por debajo de mi suéter.

Ojalá el aire acondicionado volviera a congelar como hace rato porque ahora me muero de calor.

— ¿Vienes a menudo? Me han dicho que una vez estuviste aquí —Bravo, sacando el tema más incómodo para ella.

¿Pero qué hago?

Eunbi no respondió de inmediato y me hizo sentir mal y solo. Parecía que la chica estaba tan petrificada como yo en su sillón porque no sentía ni escuchaba movimiento alguno, ni siquiera el de su respiración.

¿Será que se desmayó?

El aire acondicionado se comunicó conmigo a través de telepatía porque empezó a hacer otro frío de invierno y me acomodé en el sillón con las manos dentro del suéter para darme calor.

— ¿Hola? —Empezaba a irritarme —Lo siento, sólo...

— Sólo vine un par de veces —Respondió con su aguda pero tranquila voz.

Así que no está desmayada después de todo. Lástima.

— ¿Y... crees que esto funcione? Es decir, ¿se puede uno enamorar así?

Silencio.

— ¿Eunbi?

— No vienes aquí a enamorarte, Jeon.

Me removí incómodo en el sillón por la forma en la que dijo mi apellido. Me empezaba a picar la frente gracias al borde del cubre ojos.

— Un momento, ¿cómo sabes mi apellido?

lights → jeon jungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora