Austin Mahone ~Un cambio inesperado~

Malditos.

Canción del capítulo:  I am legend(piano)

*Flash Back*

Mi corazón emezó a latir otra vez con normalidad, me tranquilicé un poco gracias a Anne, mi pequeña estando mal y esos gilipollas comiéndose pescado en sus despachos. Van a quedar arreglados *pensé*

Al cabo de dos minutos mi móvil empezó a vibrar en señal de que había recibido un mensaje.

Ponía:

Tu noviecita ha disfrutado? No te preocupes Mahone, la fiesta solo acababa de empezar, a la próxima se quedará sin vida. Te lo juro. att: -Anónimo

Eso me enfureció demasiado, los malditos cabrones habían huido y seguían sueltos por este mundo. Pero a partir de ahora me engargaré de que nadie le toque ni un solo pelo. NADIE.

Anne: Qué paso? -preguntó levantando apenas los párpados

Austin: Nada princesa, descansa, si?

Anne: Está bien -dijo volviendo a cerrar sus ojos

Al cabo del rato se durmió, su madre vino a visitarla, al igual que mi madre. Se fueron a las 9 las dos juntas para ir a comer y hablar las cosas. Supongo que a partir de ahora estarán más unidas.

Ahora son las 11 de la noche. Me encuentro sentado a un lado de su cama comiendo a saber que cosa. Ya saben, la comida de hospital es un poco extraña. Tenía ganas de ir a comprar algo de comer, o salir para ir a hacer mis cosas, pero no quería ni permitirme ir a los baños. No quería perderla otra vez. Aunque Joe mi nuevo guardaespaldas quería ocuparse de todo aquello no le dejé. Él solo se encontraba a fuera de la habitación para vigilar cualquier cosa. La verdad es que desde que se fué Dave, todo es extraño, supongo que es porque lo conocía desde que apenas empecé a tener 'fama' . Enfin, no era tiempo para pararme a pensar en esas tonterías.

Eran las 3 y media de la noche. Pero yo seguía con Anne, pero esta vez sentado en una silla, a un rincón de la habitación. Desde ahí podía ver la puerta y a Anne, así que me sentía más seguro desde ese angulo.

Todo estaba oscuro. Apenas entraba un poco de luz de la luna por la ventana. El hospital estaba tranquilo y eso me inquietaba, todo el mundo descansando y durmiendo. Pero de repente se abrió la puerta de golpe. Al inmediato me levanté de la silla y abrí mis ojos como un búho.

Austin: Eh, alto! Quién anda ahí!?! -dije al inmediato