ЄИGЄL MӨЯGЄИ · Attack on Titan / Shingeki no Kyojin

· Capítulo 16: El fin justifica los medios ·

Todos los titanes se encontraban tirados en el suelo y los soldados miraban expectantes el golpe de suerte que les había sido otorgados de manera imprevista.

La Titan Tatuada es la primera en levantarse de manera excéntrica, su cabello está revoltoso y tirado hacia adelante, de forma que le tapa toda la cara, sin embargo, al ladear la cabeza levemente deja al descubierto su boca. Aparentemente, esa zona se asemeja bastante al de un ser humano hasta que poco a poco comienza a curvar las comisuras de sus labios y enseña los dientes. Sus colmillos estaban muy desarrollados siendo más grandes que el resto, dando la sensación de que podría perforar cualquier cosa como si de mantequilla se tratase. Pero eso no es todo, pues manteniendo la tétrica sonrisa, hace emerger su lengua la cual es bífida, tal como una serpiente. Generaba a cada uno de ellos una imagen bastante escalofriante que tardarían en olvidar.

La giganta estando pendiente de las personas, no se da cuenta y un anormal se le tira encima, haciendo que la cabeza ésta fuese incrustada en la tierra. Al momento varios titanes se abalanzan sobre ella e intentan devorarla, pero la fémina se resistía y se arrastraba dando golpes para escapar de la situación.

La Legión quedando en un segundo plano para el peligro, seguían avanzando con lentitud al tener a sus caballos casi agotados y así de paso divisar el panorama que estaba ocurriendo a unos cuantos metros de ellos.

- La primera vez que Eren se transformó en titan... Los otros iban a por él para comérselo... – recuerda Armin.

- ¿Estás queriendo decir... que es una titan cambiante? – Sugiere Jean.

- Pero si se comporta como un anormal – manifiesta Christa.

- ¿Acaso habéis visto alguna vez un anormal comiendo otro anormal? No, las únicas veces que ha pasado ha sido con los cambiantes, tanto con Eren como con Annie – dice Mikasa.

- Entonces tenemos a otro enemigo en nuestra lista, ¿no? – comenta Ymir cansada.

- Si fuera como Annie y el Acorazado... ¿Por qué no está viniendo a por nosotros? – Cuestiona Eren al verla de pie esquivando con dificultad los ataques de los titanes – Aunque los tenga ahora encima, a estas alturas ya tendría que haber hecho alguna muestra de interés por nosotros. Además, sus movimientos son muy raros, no parece que sea con inteligencia, mirad.

En efecto, se desplazaba con torpeza y articulaba sus extremidades sin ningún sentido, si no fuera por su atlético cuerpo se veía con menos capacidad mental que el resto de los titanes.

- Tal vez sea un anormal... muy anormal – interviene Kirstein.

- Era, dirás – expresa la pecosa al ver en la situación en la que está.

La Titan Tatuada al no poder resistir tantos ataques al mismo tiempo acaba siendo tirada de nuevo y esta vez, es desmembrada y devorada sin piedad por los suyos. Los presentes con la mirada echada hacia atrás ante tal acontecimiento poco común, entre ellos, Bertholdt distingue una presencia por el rabillo del ojo, aunque por la lejanía no sepa con certeza de quien se trata. Entrecierra sus parpados, para así agudizar su vista y al cabo de unos segundos reconoce el ser que se aproxima hacia ellos.

- ¡Dana...! – Grita.

Connie es el primero en reaccionar y después le sigue el resto de los amigos, mirando al lado contrario que es por donde venia la chica con los brazos extendidos y llevándolos de un lado a otro. Engel tarda en arribar a su agrupación, pues queriendo no ser vista por los titanes caníbales hace un rodeo y cuando finalmente arriba pega un gran suspiro seguido de una exclamación de sorpresa.