once

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*


Jungkook visitaba a Hyunki, el niño que había sacado del incendio hace ya 5 meses y que estaba viviendo en la casa hogar, todos los miércoles por la mañana, solo unas horas, Taehyung lo sabía y aunque nunca lo había acompañado a visitarlo, su novio siempre volvía con una gran sonrisa, de esas que Taehyung pocas veces veía y que eran difíciles de mantener por el resto del día.

Jungkook no era precisamente la reina de la diversión, pero como Taehyung se lo recordaba siempre, era una buena persona, con todos los defectos que cualquiera podía tener, aunque Jimin dijera que Jungkook parecía acumular demasiados.

Así que ese miércoles cuando Jungkook entró de la mano con Hyunki, supo que algo andaba un poco mal, Jungkook jamás lo llevaría a convivir con nadie de sus amigos.

— Oye tú — Taehyung se acercó y detuvo a Jungkook con una mano — ¿Qué pasa?

Jungkook parecía nervioso, cosa aún más rara, porque su novio nunca estaba nervioso, incomodo sí, pero nervioso nunca.

— Vamos a almorzar — dijo Jungkook

Los vio caminar por la cafetería y sentarse en una de las mesas alejadas de la barra, arrugó el ceño y con uno de los menús se dirigió hacia ellos.

— ¿Qué vas a querer de almorzar Hyunki? — dijo Taehyung sonriendo.

El niño parecía sorprendido porque él supiera su nombre, pero se recompuso al instante.

— Jungkook Hyung dice que debo comer cosas que me den fuerza, así que una ensalada estaría bien.

La cara de Jungkook era de completa satisfacción y cuando observó a Taehyung le sonrió con suficiencia.

— ¿Jungkook dijo eso? — murmuró cruzándose de brazos — Que raro, porque es algo que él no hace.

Hyunki abrió los ojos y parecía confundido.

— Él dice que como tengo 7 años es lo que tengo que comer.

Taehyung hizo un movimiento con la mano y se la tendió — Solo por hoy no hay problema, voy a traerte una enorme hamburguesa — el niño no pudo evitar sonreír — Soy Taehyung por cierto.

Hyunki tomó su mano y la estrechó — Me llamo Hyunki — luego echó una mirada hacia Jungkook — ¿Hyung? ¿Puedo?

Taehyung sabía que Jungkook estaba algo enfadado, porque su ceño estaba fruncido y las venas de su cuello se notaban demasiado, seguramente tendría algunos problemas.

— Solo por hoy, bebé.

El niño parecía tan contento que a Taehyung se le encogió el corazón, tenía una enorme debilidad por los niños.

— ¿Y para el jefe de bomberos? — Taehyung dijo jugando.

— No tengo hambre, solo dame un café.

Ni una mirada le dio, así que se encogió de hombros y fue a decirle a Jimin que hiciera una hamburguesa, y a Hyuna le pidió el café.

Estuvo atendiendo a un señor, aunque no dejó de darles algunas miradas a los otros clientes, vio a Jungkook revolver el cabello de Hyunki, y al niño abrazarse a su novio. Encantador, Jungkook podía ser encantador.

— ¿Quién es el mocoso? — murmuró Jimin a su lado.

— Hyunki, una víctima de incendio, perdió a su familia, Jungkook lo visita todos los miércoles — contestó.

Burning ME on fire! •kooktae/taekook•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora