Capítulo 23

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-¿Y cómo es el apuesto príncipe?- Me preguntó Jessica eufórica a través del teléfono.

-Es muy guapo, moreno, ojos almendra marrones muy difíciles de olvidar, y muy amable.

-¡¡¡UOOOOOO que se nos ha enamorado!!!

-No Jessica, eso es algo impensable.

-Yo no veo el no por ninguna parte, o sea te sientes atraída por él, porque me le has descrito de una manera que cualquier mujer daría lo que fuera por verle de cerca.

-Es atractivo, la clase de hombre perfecto, como Christian Grey: inquietante, alerta, con cierta picardía en sus ojos, inteligencia y profesionalidad.

-¡Nos ha fastidiado Irina! ¡Es el futuro gobernador de Dubai!

-Es como si hubiera algo más detrás, como si delante de la gente fuera de una manera, pero guardara otra forma de ser para él

-A lo mejor en su mansión tiene un cuarto oscuro de placer, es sadomasoquista y te está intentando llevar a su terreno mediante miradas irresistibles.

-¿Puedes dejar de decir tonterías? ¡Te he llamado para contarte todo! ¡No para que hagas historias en tu cabeza!

-¡Has sido tú la que le ha descrito cual príncipe ideal!

-Aparentemente lo es. Pero tia, es muy mayor, además, aunque quisiera sería imposible algo entre nosotros.

-He investigado sobre él en Wikipedia y otras páginas: tiene 35 años, hace muchas obras benéficas para ayudar a niños, personas enfermas... Tiene muchos sobrinos y por todas las fotos que he visto en sus redes sociales, todo da a indicar que sería un perfecto padre para tus hijos, ¿O me equivoco?

A Jessica verdaderamente se la había ido la cabeza.

-¡No puedes estar más equivocada! Jessica, estoy en un país musulmán. El hombre está sobre la mujer. Él es el futuro monarca, deberá seguir todas las leyes estrictas y sobre todo dar ejemplo a toda la gente que le sigue, ¿Qué pensarían si de repente lo ven con una occidental que no lleva hijab o no es musulmana? ¡Es algo impensable!

-No creo que eso importe, Dubai es una ciudad multicultural, además...

-Si algo pasara no creo que sea aceptado socialmente ni por su padre ni nadie de su entorno. A parte, ¿Y si no se ha fijado en mí y sólo es su forma de dar la bienvenida?

-Ya estás delirando con que si no le gustaras, por lo que me has contado son claras señales de que al menos le has llamado la atención, no creo que cuando estuvieras caminando en su dirección no mirara tus bonitas piernas o tu contoneo de caderas.

-No quiero escuchar tus tonterías, olvidemos el tema. Hablamos en otro momento.

Y la colgué. A esta muchacha se la ha ido la cabeza.

Al instante recibí un whatsapp:

Jessica: "Serás la futura princesa del príncipe y lo sabes"

Yo: No delires.

Jessica: Ya me contarás a ver qué tal en sus establos, vete fea para que

no te pueda comer con la mirada.

____________

-Yo sólo te digo Uncle Saeed, que esa muchacha tiene algo que no he visto en otras mujeres- Dijo Hamdan mientras conducía el coche en dirección a su casa por la oscura noche de Dubai.

-¿Crees que será bueno que te fijes en ella? Me refiero a que a tu padre no creo que le haga gracia que te fijes en cualquier muchacha, él quiere la mujer perfecta para ti, una devota musulmana. Debes ser un ejemplo para los miles de personas de nuestra ciudad Hamdan, ser responsable y consecuente con tus decisiones, y cuidado con lo que digas porque sabes que eso tendrá repercusión.

-Estamos haciendo todo para que nuestra ciudad sea multicultural, hay más gente de otros países que propia gente 100% local, seguro que a la gente le gustará ver relaciones entre musulmanes con cristianos, además, la mujer cada vez juega un papel más y más importante en nuestro país, ella es una buena imagen y puede tener buenas iniciativas.

-Pues si tus intenciones son conquistarla o yo que sé que es lo que se te pasa por la cabeza, te aviso de que solo estará aquí durante el rodaje de la película, y después quien sabe si la volverás a ver nunca más. Y sobre todo, habla con tu padre Hamdan.

Despedí a Uncle Saeed y me fui a cenar algo, no había comido nada desde la comida con Irina en casa de mi padre. Esa chica daba vueltas en mi cabeza. Desde que la vi entrar por la puerta vi su belleza, la agilidad de sus movimientos y su decisión. Sus ojos verdes me volvieron loco nada más verlos de cerca, y su pelo rubio que caía a ambos lados de sus hombros me encantó. Y qué decir cuando habló de que montaba a caballo. Eso son puntos extras. Había algo en ella que me hacía querer saber más, conocerla, poder hablar y oír sus opiniones.

Tiene una capacidad de discurso asombrosa, que hace que desde que empezó a hablar me tuviera embobado. Necesitaba más, y yo, Hamdan lo tendré.

Piezas de puzzle (Fazza)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora