Capítulo 17

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No One Point Of View's

Vladimir observa el reloj en su muñeca impaciente ante la tardanza de Ivonne. Le esperaba al pie de las escaleras de caracol mientras ella seguía arreglándose en la planta superior con la ayuda de su hermana.

Él no lo entendía, ¿Por qué se arreglaba tanto si ella lucía perfecta con lo fuera?

-¡Ivonne! -Le llama desde la planta inferior, su reloj marcaba las ocho y una de la noche. Van tarde, ¡Fantastico!

-¡Ya voy enojón! -Responde desde arriba y seguido escucha risas de ambas mujeres.

La verdad el no tenía ganas en lo absoluto de ir, pero era necesario. Los invitados, automáticamente al ir, entraban en un acuerdo de paz con los demás. Los cuales no les atacarían así como él tampoco a ellos.

Siempre iban personas de gran influencia en el mundo Sobrenatural y los humanos no eran exactamente permitidos ahí. Pero como podemos imaginar, a Vladimir le importa un bledo.

-Vladimir. -Escucha a su hermana llamarle desde el inicio de las escaleras así que se gira y cuando ve a una pelinegra de enormes ojos azules, con un vestido beige, ceñido al cuerpo, no puede creer lo que sus ojos estaban viendo.

-¿Ivonne? -Pregunta el mayor anonadado y menea su cabeza levemente, obligándose a no mirar de aquella manera a la chica.

-Sí, soy yo. -Sonríe contenta Ivonne, algo sonrojada por la expresión del mayor sobre ella.

-A que me quedó bellísima. -Chilla de felicidad Aubrey dando palmaditas, feliz por su trabajo.

-Si, así es. -Concuerda el mayor e Ivonne tiene que morder su lengua fuerte, para no sonreír nerviosa, por tantos halagos. -¿Vamos? -Ofrece su brazo Vladimir y la menor asiente tomándolo.

-Espero que se diviertan. -Se despide Aubrey observándolos acercarse a la puerta. -Ah, ¡Ivonne! -Le llama, recordando algo, al parecer importante.

-¿Sí? -Espera Ivonne.

-Cuídalo, se topará con mucha gente pedante que lo sacará de sus casillas. -Ivonne asiente acatando su petición y en cambio Vladimir rueda los ojos sin decir nada.

¿Y como no? Vladimir es alguien a quién es muy fácil hacer enojar. Así que estar rodeado de seres con actitud de superioridad y nobleza sobrenatural, no era lo suyo.

(...)

-Wow... -Deja escapar Ivonne, mirando la enorme mansión muy bien decorada e iluminada.

¡Parecía un palacio en realidad!

-No quiero que te apartes de mí en ningún momento. -Ordena el mayor, mientras se adentran cada vez más a la fiesta.

-Creí que era un lugar seguro... -Inquiere Ivonne con el ceño fruncido.

-Un humano no debería estar aquí, así que por tu seguridad, mantente a mi lado. -Poco a poco la pareja fue atrayendo la mirada de muchos.

Y no se les podía culpar, el gran Vladimir Gottsched, primer y más fuerte vampiro de existencia acompañado de una humana, es algo digno de ver.

-Vamos a la barra. -Le pide Ivonne al mayor, empezandolo a empujar hacia la barra de al fondo.

Estar entre tantas personas de gran poder le ponía nerviosa, así que necesitaba un trago para soltarse un poco.

Una vez llegaron a la barra, se sentó en esta y aclaró su garganta para hacer su pedido al barman. -Me regalas un martini por favor. -El hombre, sacudió su cabeza embobado ante la belleza de la chica enfrente de él. -¿Por qué no te sientas? No crecerás más de ahí. -Le molesta al ver a Vladimir de pie a su lado.

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