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Es de mañana y hoy comienza un nuevo año escolar. El año pasado, en mi antigua escuela, hubo muchos problemas con los profesores y la institución, por lo que mis padres decidieron cambiarme de escuela. Afortunadamente, una de mis amigas de mi antigua escuela, Ja Na, también fue cambiada de escuela junto conmigo.
   Ayer, Ja Na y yo, quedamos en ir hoy a la escuela juntas. Ella dijo que pasaría temprano por mi casa para llegar tranquilas y sin ningún apuro. Luego de ponerme el uniforme y desayunar, me dirigí a la entrada de mi casa para esperar a Ja Na. El barrio en el que vivo es bastante tranquilo, ya que la mayoría de vecinos son gente mayor. Al ser la única joven de la cuadra, la mayoría de señoras me cuidaron amorosamente, por lo que yo las suelo tratar cariñosamente también.
La mayoría de veces que mis padres debían trabajar hasta tarde, le pedían a la señora Lee, mi vecina de al lado, que me cuidara. Mis abuelos murieron cuando yo era muy pequeña, por lo que no tengo recuerdos de ellos. Al yo no tener abuelos, la señora Lee me dijo, cuando yo era pequeña, que sería mi abuela sustituta y desde entonces la trato como tal.
Al salir a la puerta, escuché algunos ruidos en el patio delantero de la casa de la señora Lee, por lo que decidí pasar a saludarla, ya que sabía que ella siempre se levanta temprano en la mañana. Cuando abrí la pequeña puerta que lleva al jardín delantero, la pude ver regando sus plantas.
—Abuela, ¿desde que hora estás despierta? Es muy temprano —pregunté, acercándome a ella.
—No importa a qué hora desperté —dijo, a la vez que me saludaba—, tan solo mírate. Hoy es el primer día de clases —dijo, sonriendo cariñosamente.
—Sí, será raro no estar con mis compañeros anteriores... —dije, algo nostálgica.
—No te preocupes por eso, eres una niña muy adorable e inteligente. Hacer amigos nuevos no debería ser un problema para ti.
—Si tú lo dices, entonces te creeré —dije, dedicándole una gran sonrisa.
—¡___! —se escuchó desde la calle.
—¡Oh! Es Ja Na, me tengo que ir —dije, dándole un beso en la mejilla —. Nos vemos más tarde, abuela. Te quiero —dije, mientras me retiraba.
—¡Suerte en tu primer día! —se escuchó decir a la señora Lee.
Una vez salí a la calle, Ja Na estaba esperándome en la puerta de mi casa.
—Lo siento, estaba en la casa de la abuela —dije, saludándola.
—¿Qué hace la señora Lee despierta a esta hora? —preguntó, divertida.
—Riega sus plantas —contesté.
—Ok, ¿vamos?
—Sí.
El camino a la escuela desde mi casa es bastante fácil y no es muy largo. Llegamos bastante temprano a la escuela y, una vez encontramos nuestro salón, pudimos elegir donde sentarnos, ya que no había mucha gente. Decidimos sentarnos juntas y, mientras esperábamos a que la clase comience, hablamos un buen rato. Poco a poco fueron llegando los demás alumnos y luego la profesora. Esta primera clase fue bastante llevadera, debido a que es la primera clase después de unas largas vacaciones.
   Cuando sonó el timbre y comenzó el receso, nos quedamos en el salón hablando con algunos nuevos compañeros que conocimos cuando llegamos. Uno de ellos se llama Min Ho, él nos ayudó a encontrar el salón y luego, nos presentó a su mejor amigo, Se Jion. También conocimos a otra chica muy amigable, su nombre es Sun Hee.
Al finalizar el primer día de clases, Ja Na se fue por el mismo camino que Sun Hee, ya que ellas viven cerca. Yo tomé el mismo camino que a la ida, pero está vez sola. Estaba caminando tranquilamente devuelta a casa, cuando noté que alguien estaba caminando por el otro lado de la calle. Yo creí que estaba sola, ya que, como dije anteriormente, el barrio en el que vivo es muy tranquilo.
   La persona que iba por el otro lado de la calle era un chico, y tenía el uniforme de mi escuela. Logré ver que iba tan sumergido en su mundo al igual que yo, pero él estaba escuchando música.  Estaba totalmente concentrada en él y una vez llegué a la puerta de mi casa, seguía con mi mirada sobre él. Abrí la puerta sin prestar atención a lo que yo estaba haciendo y, en un descuido, mi gata salió corriendo hacia la calle. En ese momento, yo volví a la realidad.
—¡Nala! —grité, llamándola.
   Al hacerlo, el chico me miró extrañado y luego, al ver que llamaba a mi gata, quien estaba cerca del él, se quitó los auriculares y se acercó a ella. Nala siempre suele comer la comida que mi vecina de enfrente deja para los gatos o perros callejeros. Aunque le damos de comer, ella tiene alma de glotona y su instinto es seguir comiendo. Con todo lo que come, aún no comprendemos cómo es que no es una copia de Garfield. Es una gata cachorra y, a pesar de comer mucho, siempre está delgada.
   El chico se acercó a mi gata, la acarició y luego la tomó en sus brazos, mientras yo cruzaba la calle. Al llegar al otro lado de la calle, ya me encontraba totalmente cautivada por aquel acto. Era muy adorable, ver a un chico, que se veía tan rudo, acariciando a un gatito en sus brazos. Él me entregó a mi gata y, sin decir nada, siguió su camino.
   Al día siguiente, al llegar a la escuela lo vi en mi salón. Algo en mí me decía que lo había visto, pero no lo había logrado recordar hasta ese momento. Cuando Ja Na y Sun Hee llegaron al salón, me acerqué a Sun Hee, quien conoce a todos sus compañeros, y, señalando al chico, le pregunté.
—Oye, ¿quién es él?
—¡¿Él?! —me miró totalmente impresionada.
—Sí... —respondí, confundida.
—Hagas lo que hagas, no te acerques a él —dijo, tomándome de los hombros.
—¿Por qué? —pregunté, aún más extrañada.
—Porque él se llama Kang Young Hyun, aunque todos le dicen "el psicópata callado", ya que da mucho miedo. Además, él siempre se mete en problemas; en las peleas en las que ha estado ha ganado todas y se dice en la escuela que es peligroso. Intenta evitar todo tipo de contacto con él, por precaución —luego de decir eso, se fue devuelta a hacer lo suyo.
   Durante el resto del día me quedé pensando en eso. Es verdad que parece callado, ya que ni a mí me dijo nada cuando me vio. Pero aún no sé si lo de que sea un psicópata violento y agresivo sea verdad. En realidad, a mí me pareció un buen chico.
   A la vuelta de la escuela, lo volví a ver. Me llamó mucho la atención, ya que nunca, hasta antes de ayer, lo había visto pasar por esta calle. Tal vez eso sea porque mi escuela anterior tenía horas extras. Mientras lo veía, las palabras de Sun Hee no salían de mi cabeza. Realmente no creía lo que ella me dijo, ya que solo es un rumor. Luego de un largo rato, casi llegando a mi casa, el chico se dio la vuelta e intercambiamos miradas por unos segundos, después de eso, él se volvió a voltear y siguió su camino.
No pude sacar su mirada de mi cabeza por el resto del día y no porque haya sido aterrador.

Just Rumors • [Young K y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora