Just Rumors • [Young K y tú]

La misma historia

Él se fue. Me dejó allí. ¿Por qué había cambiado tanto de parecer? Creía que realmente nos iba bien. El día de nuestra cita, yo sentí que hubo algo realmente especial entre nosotros. Ese momento fue tan perfecto. Estaba demasiado confundida. Yo simplemente me quedé parada. No pude contener mis lágrimas. Me sentía como anestesiada. Aún no asimilaba lo que acababa de pasar.
   Parece que estuve un largo rato así, ya que, cuando me di cuenta, Jae estaba frente a mí. Pareció preguntarme algo que yo no pude oír. Aún estaba como sumergida en una burbuja. Él me abrazó y estuvimos por un rato así. Al separarnos, regresé a la realidad. Él limpió mis lágrimas con sus pulgares.
—Entonces, supongo que no quieres hablar de eso... —dijo, comprensivo.
—¿De qué? —pregunté.
—De lo que acabo de preguntarte... —contestó.
—¿Qué acabas de preguntar? —pregunté, confundida.
—Te pregunté qué pasó... —dijo dulcemente, sin agobiarme, mientras esperaba una respuesta.
—Él... —hice una pausa— acaba de terminar conmigo.
—¿Quién? —preguntó Jae, extrañado.
—Young Hyun.
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*narra Young Hyun*

A la mañana siguiente desperté con una fuerte jaqueca. No me esforcé demasiado en arreglarme, simplemente me puse el uniforme de la escuela y me dirigí tranquilamente allí. Sabía que estaba llegando tarde, pero ya ni me importaba. Ahora poco me importaba.
   Llegué  un minuto antes de que llegue la profesora. Me fui a sentar en mi asiento. El del fondo. Sentí varias miradas sobre mí. La mirada más intensa era la de Se Jion. Me estaba mirando maliciosamente, como satisfecho. Claro que debía estar satisfecho. Era la segunda vez que se salía con la suya. Que yo, como un idiota, le permitía salirse con la suya. Pero esta vez él tiene la razón. No soy bueno para ella.
Durante la clase, los chicos y ___ no dejaban de mirarme. Me moría de ganas de hablarles, de mirarlos, de contarles todo, pero no lo haría. Simplemente los ignoré. Había tomado otra decisión. Alejarme de los chicos también. ¿Qué tal si comienza a haber rumores sobre ellos también? No lo permitiría. Simplemente, iba a alejarme de todo y de todos.
En el recreo los chicos se acercaron a mí. Parecían muy preocupados. Se Jion nos observaba, intentando corroborar de que todo fuese como él quería.
—¿Está todo en orden? —preguntó Jae.
Yo solo lo miré sin contestar.
—¿Te sientes bien? —preguntó Sung Jin.
—Supongo que ya se enteraron de lo que pasó ayer —dije, manteniendo mi compostura—. Todo lo que dije, lo mismo aplica para ustedes —agregué fríamente.
Ellos parecían haberse quedado sin palabras. Me levanté en silencio, ante sus miradas totalmente alucinadas, y me fui lentamente del salón. Me sentía fatal. Por dentro estaba sufriendo. Y mucho.
Luego de la escuela, me fui a casa por otro camino. Era más largo, pero así no vería a ___. Le ahorraría más dolor. Al pasar junto a la plaza, aquel lugar donde nos hicimos mejores amigos, donde nos hicimos novios, donde lo arruiné todo, aquel lugar tan especial, simplemente me quedé en blanco. Me miré los columpios y me acerqué a ellos.
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*narra Do Woon*

Estaba intentando ignorar a las chicas pesadas y dormir un poco, cuando comenzaron a chismorrear, algo que me molesta mucho. Me levanté de mi asiento, decidido a marcharme cuando escuché que hablaban de una de las pocas personas por las que aún me preocupo.
Al levantarme, las pesadas detuvieron su chismorreo, por lo que decidí preguntar.
—¿Qué pasó con él?
—Dicen que él terminó con su novia. Algunos dicen que él le rompió el corazón y otros que fue al revés. Aún no lo sabemos, aunque él pareciera enojado y da aún más miedo.
Estúpido...
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*narra Young Hyun*

Me encontraba totalmente abatido, sentado en el columpio en el que, poco tiempo atrás, estuve sentado con ella a mi lado. No podía dejar de recordar aquel momento. Aquel fatídico y horroroso momento.
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*Flashback*

Al ver esa simple lagrima caer de sus hermosos ojos, supe inmediatamente lo que había hecho. Había roto su dulce e inocente corazón. Había cometido el peor error de mi vida, con el propósito de que ella tenga una mejor vida sin mí estorbando en el medio. Ella, ella fue la fuerza que me ayudó a no darme la vuelta y correr a pedirle perdón, porque sabía que, en cuanto ella me olvidase, todo sería mejor en su vida. Sabía que mi vida, por otro lado, sería miserable sin ella a mi lado, aunque no tanto gracias a la satisfacción de verla ser aún más feliz sin que yo estorbase.
*Fin del flashback*
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Lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos de forma incontrolable. Cerré mis ojos y respiré profundo. Limpié esas lágrimas y, silenciosamente, me dejé sumergir en una profunda depresión. Estaba repitiendo aquel doloroso recuerdo una y otra vez, cuando una voz familiar y una mano en mi hombro me interrumpieron.
Al darme la vuelta, vi a mi viejo amigo, Do Woon. Él era uno de mis mejores amigos junto con Se Jion. Eso había sido hace mucho tiempo. Do Woon era el más pequeño del grupo. Es un grado menor que nosotros, por eso era más difícil que me lo encontrase. Además, luego de que Se Jion comenzó a amenazarme, todo nuestro grupo de amigos se separó. Do Woon y yo no seguimos hablando después de eso, ya que él se volvió distante y solitario.
Él me miró compasivamente y me extendió uno de los dos refrescos que tenía en la mano mientras se sentaba en el otro columpio.
—Me enteré de lo que pasó, ¿tú estás bien? —preguntó.
—¿Qué importa eso? Lo único que quiero es que ella no pase por lo que yo pasé. No quiero arrastrarla a esa pesadilla conmigo —contesté, dolido.
—¿Tú la dejaste?
—Sí... —suspiré pesadamente.
—Siento mucho lo de la otra vez —dijo, cambiando de tema.
—¿Te refieres al golpe que recibí por ti y que vio ___? —pregunté, algo divertido.
—Sí..., bueno, nunca te pedí que lo hicieras.
—No pude evitarlo. Ese tipo te iba a golpear solo por no darle atención —contesté, algo enfadado.
—Y darle atención solo lo empeoraría.
—Cómo sea, luego de eso ___ me llevó a su casa y me curó el labio —reí, al recordar lo sucedido aquel día—. Nunca le conté la verdadera causa de esa pelea.
—¿No te malinterpretó? —preguntó, curioso.
—No lo sé. Nunca dijo nada —me encogí de hombros.
Luego de un rato de silencio, Do Woon suspiró pesadamente.
—Se Jion lo volvió a hacer, ¿cierto? —preguntó derrotado.
—Sí... —suspiré, melancólico—, se está repitiendo la misma historia.
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