Tornasol.

Capítulo 7

" I know we've got
Something that money can't buy. "

Era de madrugada y mis amigos y yo seguíamos en aquel bar, un vodka amargo quemaba mi garganta al ser ingerido bruscamente, a lejos veía a namjoon queriendo besar a seokjin y seokjin empujándolo a carcajadas, lo que hace el alcohol.

Hoseok se encontraba vomitando más al fondo mientras que taehyung bailaba de una forma ridícula al ritmo de la música, yo solo me encontraba parado a lado del estante de tragos, era mi lugar favorito desde que encontré este lugar.

Habían muchas chicas hermosas pero ninguna me llamaba la atención, todas posaban su mirada en mi, esperando a que pase algo o que una de ellas sea elegida por mi pero no quería, estaba cansado y no encontraba explicaciones lógicas por las cuales no había querido acostarme con ninguna.

Desvíe la mirada para pasar otro trago más fuerte, vi a taehyung caerse al piso riendo de alguna tontería, al parecer hoseok había sido el primero en caer dormido cerca de unas plantas, la escena me pareció muy graciosa pero ninguna sonrisa salió por mis labios.

Mi vida era demasiado tétrica realmente, nadie lo sabe porque siempre lo callaba, me gustaba ser el yoongi frío y el que nunca sonríe porque así las cosas eran más fáciles.

Mamá y papá peleaban todo el tiempo, por negocios familiares, quizás por eso no es buena idea trabajar con tu pareja, eso es lo que ellos me hacían pensar.

Papá siempre había sido un hombre muy duro con mamá y conmigo, yo no crecí entre besos y abrazos, crecí entre mayordomos y niñeras que siempre estaban al pendiente mío.

Ambos siempre salían de viaje por negocios y siempre quedaba solo, en el vacío de la enorme casa, con miles de mayordomos, entre miles de mucamas, quizás por eso me volví muy frío a tal punto de no poder sentir emociones fuertes, como el amor por ejemplo.

Resignado me acerqué a hoseok que ahora estaba siendo arrastrado por namjoon y seokjin mientras taehyung se aferraba a su risa, nos subimos todos a mi auto, ya habíamos tenido suficiente, al menos yo ya tuve suficiente.

Lo encendí y dejé a cada uno en sus respectivas casas, al final solo me tocaba dejar a hoseok, ya estaba amaneciendo y con una pesadez lo bajé bruscamente del auto, lo jalé como pude hasta su puerta para dejarlo recostado sobre el tapete de su casa.

—mierda..—suspiré cansado.

Toqué la puerta porque ya sabía que la mamá de hoseok estaría esperándolo, así que me dirigí a mi auto para ir a casa, eran al rededor de las ocho de la mañana.

Me sentía cansado, solo quería ir a dormir en mi cama y no despertar hasta nuevo aviso, entre a mi casa con mucho pesar y me tiré al sofá, cubrí mis ojos tratando de conseguir algo de sueño, pero unos gritos irrumpieron mi paz.

—¡pero tienes que hacer las cosas cuando te lo pida! —los gritos de papá se hicieron presentes.

—¡eso es lo que hago siempre! ¡¿Qué más quieres?! —escuché a mamá acompañado de unos cuantos jarrones que caían al suelo.

—¡ya cállate! —se seguían escuchando como las cosas caían bruscamente, cerré mis ojos intentando descifrar que hacer.

—¡si lo hubieras hecho quizás ahora no hubiéramos perdido un cliente importante! —la voz furiosa de papá me causaba escalofríos.

Miré de reojo como uno de mis mayordomos me miraba con algo de ¿pena quizás? Ellos más que nadie sabían lo que había pasado conmigo y cuantas discusiones había aguantado.

Bajé la mirada, tomé unas gafas de sol y las llaves de mi auto nuevamente y salí de mi hogar, no recorrí mucho, solo deseaba estar lejos por unos minutos, la presión de mi hogar a veces era insoportable cuando ellos estaban allí, desearía no verlos pelear por cosas tan tontas.