VERÓNICA.

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Cameo  Veronica de la Historia SANGRE PURA DE AntonellaMoore

Capítulo especial.

Después de asesinar a Alejandro, necesito un poco aire fresco, pues mi ganas de matar no sesan.

Le he dicho a Roberta que me acompañe a dar una vuelta por el parque que está cerca de la casa. Pues por la muerte de esa sabandija nos han dado el día libre en el restaurante.

Quisiera ir a su entierro, pero se muy bien que no contendría mis ganas de reír al ver como lloran por él, así que mejor tomo la opción de salir  a distraerme.

—Lucia, ¿ya nos vamos?—pregunta, Roberta parada en la puerta.

—Sí, vámonos —me levantó del sillón, tomando mi bolsa que estaba en la piso.

Bajamos las escaleras, y caminamos hasta el auto sin despedirnos de nadie, pues por la hora la mayoría está descansando.


Llegamos  al parque donde hace tiempo la muerte me contó su historia; suspiro un poco al recordarla.

Roberta y yo nos sentamos al lado de una chica que tiene cara de hambre, temor, frío y muchas cosas más.

Me acerco al oído de Roberta y con voz baja la digo —. Roberta, ¿deberíamos preguntarle si se encuentra bien?

Roberta deja de  morder su paleta y mira a la chica —Sí, tienen cara de sufrimiento. Vamos a preguntarle si la podemos ayudar.

Giro mi rostro para hablarle a la chica, pero esta ya no está sentada, si no en el suelo desmayada.

Me pongo de rodillas en el suelo intentando reanimarla —. Muchacha, despierta— pero no reacciona—. ¡Roberta, llama a la muerte!— grito.

Roberta se arrodilla a mi lado, toma la mano de la chica—. ¡Lucía, mirala esta muy grave, parece que no tiene pulso!

Al pasar 15 minutos, la muerte  llega—.¿Quién es la chica? —pregunta.

—No lo sabemos. Pero al parecer estar sola, porque nadie a llegado a auxiliarla, sólo nosotros—contesta, Roberta.

La muerte  levanta a la chica y la lleva hasta el auto.

Estoy sentada en pequeño sillón que está frente a la cama, de la habitación donde acostamos a la chica del parque, ella no ha  reaccionado, parece muerta.

Después de media hora, la chica a comenzado a moverse y emitir algunos sonidos. Abre los ojos de repente y se sienta mirando para todos lados, algo asustada.

—Hola, por fin despertaste. Pensábamos que estaba muerta, tienes un pulso muy débil o casi inexistente— digo, mientras me siento en la orilla de la cama.

—Hola, siempre he tenido el pulso débil —sonríe y pregunta —.¿Dónde estoy?

—Estas en “El Infierno”

—¿Infierno?

—Sí , es un club nocturno. Donde varias chicas bailan. Si comprendes, ¿verdad?

—Sí. Tú, ¿bailas?

—Sí, soy una de las bailarinas principales. Pero te tengo que aclarar que aquí nadie baila a la.fuerza, todas, absolutamente todas, bailamos en mi caso por gusto, otras por que no encontraron trabajo de otra cosa; pero el día que se quieren ir, se van.

—¿No las obligan?, ¿de verdad? —pregunta incrédula.

—De verdad, no te miento, quieres ver nuestro show, en una hora será el turno de mi amiga Roberta  y mío. Por cierto ¿Cómo te llamas?, ¿Tienes familia?,¿por qué estabas sola en el parque?

LUCIFER #BSAndTAwards2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora