Escribí 40 poemas en una noche,
Porque me volví loco,
40 poemas que nunca verán la luz,
Porque me volví loco,
40 poemas que formaban parte de una secuela que nunca nadie podrá deleitar,
Porque me volví loco,
Tanto amor que tendré que botar a la basura porque mi musa ya no es mi musa,
Y por ello, me volví loco,
Asesine al cuervo maldito y me integre en mis poemas tomando el puesto del hablante lírico,
Porque solo en la poesía puedo caminar por las playas del cosmos con la amada del cuervo maldito, que por coincidencia, también es mi amada,
Y por lo cual, me vuelvo loco,
Quemo versos de amor y abandono,
Porque me volví loco,
Corte mis alas,
Porque me volví loco,
Me dedicaré a las matemáticas,
Porque me volví loco.A la mierda la lírica, La literatura, La música, La pasión, las noches de amor, las canciones para vos,
A la mierda mi voz, mis manos, mis ojos, mis oídos, mis labios,
A la mierda lo que puedo hacer al escribirte un verso, a lo que en la cama mi cuerpo moreno hace sobre tu piel blanca, lo que mi mente podía hacer con la tuya.Me volví loco,
Porque perdí mi corazón,
Y la fuerza de mi pensar,
Ya no está mi musa que impulse mi despertar emocional,
Ni comarca nevada para mi viaje cósmico,
Siquiera estás tú para entender el pensar del cosmos,
No hay cuervo sin su copo,
No hay maldicion perfecta sin nieve callendo por mi cuerpo,
No hay un trovador sin su musa,
No hay guitarra sin los gemidos de sus cuerdas,
No hay nada de mí si no estás aqui,
Y lo admito,
pero no ocultandome tras crowdamned,
Yo,
Felipe, admite que no es nada sin ti,
Y que ya no hay lírica sin ti.Fin.