Majestad

6.

– Ya Debo irme – Tomo agua para que baje el efecto del alcohol.

– El Señorito se va porque ahora sirve al Rey – Los demás rieron por el tono que hizo.

– Déjate De estupideces Toma – Se levantó para poder estirarse – Agradezcan que no me olvidé de ustedes.

– Por Ahora – Murmuró la única mujer de ese grupo.

– Nos Vemos, No sé lleguen a morir.

– Somos Fuertes Bardock, Nadie puede vencer a los Saiyajin – Río, Ese gordo siempre se lo repetía y tenía razón, Por lo menos así creía él.

Asintió y salió volando de allí. Necesitaba verlos no sólo era su antiguo escuadrón, También eran sus amigos hasta los sentía como una familia. Se había críado con Toma su mejor amigo, El restó los había conocido en su primer entrenamiento. Fasha la única mujer había sido su ''Ex'' Por así decirlo ya que no tuvieron una relación formal sólo eran besos, Toques y encuentros íntimos...Pero luego todo se desintegró y terminaron como si nada de eso hubiera pasado.

Aterrizó y pidió permiso para entrar al Palacio. Todavía no era su turno pero quería ver al Príncipe. Le llamaba mucho la atención ese muchacho de cabello marrón oscuro.

– Dónde Está el Príncipe – Así era el, Sin modales.

– En Su cuarto – Se adelantó pero lo detuvo ése soldado – ¿Para Qué lo buscas? – Chasqueo su lengua, Odiaba dar explicaciones.

– Debo Informarle algo que me pidió investigar – Se adelantó al verlo salir de su caminó.
Subió rápido las escaleras y golpeó la puerta del Superior.

Nadie Respondía.

– ¿Príncipe? – Golpeó de nuevo, Pero nada sucedió – Voy A entrar.
Y así lo hizo, Cerró la puerta con una sonrisa al verlo en la cama. Se acercó lentamente para no despertarlo, Se sentó a su lado y quedó embobado por tal belleza.
Sus fracciones no tan masculinas ya que sigue siendo un crío, Su nariz tan fina, Cabello despeinado y sus labios ésos que tuvo el honor de besar.

– Es Bello – Acaricio su mejilla, Era suave. Subió a su cabello se sorprendió al ver lo fino que era, También suave – Será Mejor que no desperté – De nuevo se perdió en sus labios tan finos. No aguanto y los unió con los suyos.
Todo se arruinó cuando fue empujado.

– ¡Que Demonios te ocurre! – Le Sonrió – Idiota.

– No Pude aguantar.
Volteó la mirada, Sus mejillas estaban rojizas.

– ¿Dónde Estabas? – Cruzó sus brazos.

– Fui Con amigos – Se acomodaba sus muñequeras rojas.

– ¿Amigos?, Yo no te di órdenes para que salieras.

– Se Lo pedí a su Padre, Después de todo el es superior a usted y a mi – Frunció su ceño al recordarlo.

– Ese Viejo...No me dijo nada.

– ¿Pasa Algo con su Padre? – No solía ser chismoso pero quería saber más del Príncipe.

– No, Bueno... – Suspiró y conectaron sus miradas – No Dirás nada. ¿No?.

– Asintió –.

– Me Casare dentro de poco, Mi Padre está buscando mi Pareja sin consultarme – Apretaba las sábanas – Yo No quiero, Todo va muy rápido y no estoy listo para contraer matrimonio y ni para gobernar.

Por unos segundos sintió que hablaba sólo, El peli-Palmera no hablaba traía su ceño más fruncido de lo normal.

– ¿No Dirás Nada?, Para que mierda te...

– Quédese Conmigo – Arqueo una ceja en modo de confusión.

– N-No...Eso no es posible. Eres clase baja y...

– Pero Usted me ama – De nuevo ese color invadió sus mejillas – Yo también lo hago, Por eso debemos casarnos.

Eso era muy pronto para el.

– ¡¿Estás Loco?! – El otro negó – Ya Te dije que es imposible, Aparte no te conozco.

Trago grueso al ver cómo se ponía enzima suyo.

– Aléjate.

– Entonces – Le dio un casto besó – Salga conmigo, Sea Mi pareja en secreto. Así nos conoceremos mas.

– Yo...– Se dejó besar otra vez, Su corazón comenzó acelerarse – Aceptó – Susurró cerca de sus labios un tanto rojo por la situación y confesión, Provocando una sonrisa ladina en el que traía una cicatriz sobre su mejilla.