CAPITULO 12

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       No se qué hacer (Parte I)

Bueno antes de empezar me gustaría dedicar este capítulo a @Infinity905 por leer mi novela. Yo adoro como escribes y me alegra que estes leyendo la mía. Simplemente gracias.

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          NARRA WILLIAM
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¿Y si voy a buscar a Dianne? Supongo que Shane estará intentando ligar con ella y no habíamos acordado nada sobre fastidiar al otro. ¿Dónde podrían estar? ¿Y si llamo a Dianne? ¡Buena idea!

- ¿William? - oí su dulce voz desde el otro lado de la línea.

- ¿Dónde estas? Se te escucha mal.

- En el bosque con Shane, ¿por qué no vienes? - lo que esperaba.

- Claro, iré en coche y llegaré antes, ¿Quedamos en la "entrada" del bosque?

- Vale, te espero - se despidió.

Arranqué  el coche y me dirigí a donde habíamos quedado.

Cuando llegué Shane se encontraba a su lado y me dirigió una mirada asesina.

- ¿Qué tal? - dije dándole un beso en la mejilla a Dianne.

- Bien.

Se giró y miro a Shane.

- Por favor no os peleeis o me voy - dijo mientras nos miraba consecutivamente.

- Lo que tú digas mi vida - atacó Shane.

- ¿Mi vida? - dijo extrañada - bueno, dejemoslo estar.

Se dio la vuelta y nosotros la seguimos hasta el claro.

- ¿Por qué has venido? - me preguntó Shane por lo bajo.

- No prohibimos fastidiarle la cita al otro - le respondí de la misma forma.

- Ua hablaremos - dijo dejando la frase en el aire.

Dianne se giró.

- ¿Os pasa algo?

- No nada - respondimos al unisono.

Alzo una ceja.

- Buenos pues.... ¿Os apetece volar?

- ¿Cómo pretendes que haga eso? - le dije.

- Monta en Morfeo - dijo señalandolo.

Al instante dejó que se viesen sus alas y los dos se transformaron. Me monté en Morfeo.

- ¿Subes conmigo? - le pregunté - no estoy seguro de si sabre montar.

Shane rodó los ojos pero no se lo impidió.

- ¿Preparado? - dijo Dianne girandose.

- Contigo siempre - respondí.

La verdad es que aquella frase había quedado bonita.

- Que cursi eres - dijo cuando ya estábamos sobrevolando el bosque.

- ¿Más que Shane?

- No estoy segura.

Sonreí.

- ¿Echabas de menos volar? - me atreví a preguntar.

Asintió.

- Echo de menos todo lo de mi reino pero con vosotros me olvido de eso - explicó.

Un momento, ¿acababa de decir vosotros? Eso debía cambiar.

- Dianne ¿Por qué no vuelas sola? - se escuchó decir a Shane.

- No, quedate conmigo, me caeré - dije haciendo pucheros.

- Recordarme que no vuelva a estar con los dos a la vez sino está Cinthya, me estais volviendo loca - admitió - ¿Por qué no volvemos ya?

- Vale - dijo Shane sonriendo.

Sabía lo que pensaba, estaba feliz porque no seguiría coqueteando con Dianne, pero no iba a ser así.

Cuando volvimos llamamos a Cinthya y cenamos en casa de Dianne y Shane. Yo ya me aburría.

- Dianne, ¿me puedes decir dónde está el baño? - pregunté.

Ella rodó los ojos haciendome sonreir.

- Sigueme - dijo levantandose.

En el momento que Cinthya y Shane nos perdieron de vista cogí de la muñeca a Dianne y la arrastré hasta una de las habitaciones de la planta de arriba.

- ¿Qué-qué haces? - dijo mientras le acorralaba contra la pared - Shane se va a enfadar.

Entonces ignorando sus palabras la agarré por la cintura para que no se escapase, cosa que dudaba, y la empecé a besar.

Cuando me aparté para coger aire la miré.

- Te quiero - solté.

No se puso más roja porque no podía pero seguro que se estaba muriendo de vergüenza por aquello. La volví a besar.

La puerta se abrió de golpe y paramos.

- Chicos deberían bajar Shane está furioso.... Ups, lo siento - dijo mi hermana - no sabía que...

- Da igual, ya vamos - la corté.

Salió mi hermana primero y luego me giré hacia Dianne.

- Intenta quitarte esos colores que se nota demasiado - dije saliendo.

Bajamos y nos encontramos a Shane a punto de subir a buscarnos.

- ¿Qué hacian arriba? - preguntó enojado.

- Dianne estaba esperando a mi hermano - mintió Cinthya.

Los chicos nos quedamos atrás y ellas se fueron a la cocina.

- Que sepas que he ganado - le dije a Shane.

- ¿De qué hablas? - dijo poniendo una mueca.

- La apuesta, he ganado - especifiqué.

Reina a los 16Donde viven las historias. Descúbrelo ahora