El tiempo se está agotando. Lo sé. Lo sabemos.
Los nervios no me dejan en paz y tengo que repetirme continuamente que todo estará bien.
Sólo faltan un par de días.
Dos días más y esto habrá terminado y, a la vez, un nuevo comienzo será escrito. Y hablando de escribir, estoy escribiendo una historia, tal y como siempre lo quise hacer. Muchas partes de la historia están inspiradas en sucesos de mi vida, aunque no tal cual puesto que decidí que tuviera algo más de ficción y obviamente un final feliz.
Justo ayer terminé de escribir el final y me siento satisfecha. Sé que tal vez no es la mejor historia pero a mí me ha gustado y eso es lo que me importa. Tampoco es como que alguien más lo vaya a leer o que lo publicaré, se trata más sobre una meta que hace mucho me propuse y que finalmente pude completar.
Una meta cumplida.
Aunque tal vez si se lo regale a alguien.
Repentinamente unos pasos llegan a mis oídos, me tenso. Agradezco poder lograr reaccionar coherentemente y de manera rápida apago la lámpara de mi mesa de estudio.
Respiro casi de forma inexistente mientras escucho los pasos alejarse, el ruido de una puerta siendo abierta y posteriormente cerrada me deja saber que se encuentra en su habitación.
Intento relajarme pero no lo consigo del todo. Guardo la pequeña y algo desgastada libreta en el primer cajón para después dirigirme a mi cama a pasos silenciosos con éxito.
Pronto todo esto quedará como que mal recuerdo amargo, pasado y superado. Muy pronto, lo sé.
Me acomodo bajo las sábanas de manera que mi vista se encuentra posada en el pequeño escritorio empotrado en la blanquecina pared.
Pronto todo esto acabará.
Mis pensamientos vuelan en todas direcciones y en ninguna que no tardo mucho en quedarme plácidamente dormida. Mi último pensamientos se basa en recordarme ponerle un nombre a mi historia.
Me es extraño que los capítulos sean tan cortos pero bueno 😂 (lo irónico es que lo más largo de la historia sean los epílogos 😂)...
Espero que les haya gustado.
Bai 😘
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Donde Estés [Trilogía Buenos Amores #1]
Short Story― Jed, necesito un favor. ― Hola, Maddie. Yo bien, ¿y tú? ― No estoy para bromas, Jed. ― Amargada. Y dime, ¿en qué te puedo ayudar, bella? ― Necesito que me ayudes a fingir mi muerte. ― ¿Cómo? Espera, creo que oí mal. Repite lo que dijiste, por favo...