― Te ves bien con lentes ― señala a la vez que toma asiento a mi lado.
Giro para conseguirme una pequeña sonrisa dibujada en su hermoso rostro.
― Lo sé, es que soy irresistible de cualquier forma ― alardeo en broma. Rueda sus ojos haciéndome reír ―. La verdad me resulta algo incómodo usarlos. Lo cual es irónico pues lo que debería moslestarme serían los lentes de contacto ― reímos ―. De hecho, no los usaré.
Intento quitármelos pero, como lo supuse, me lo impide.
― Pero debes usarlos ― me riñe, ahora soy yo quien rueda los ojos.
― Lo sé ― resoplo ante su mirada severa.
Éstas cosas debo usarlas desde ya hace tiempo. Como no me gustaba ponerme los lentes opté por los de contacto. Aunque hay momentos donde se me acaban, o los pierdo, y entonces debo colocarme ésta cosa me guste o no. Por lo menos tienen un buen estilo, son bonitos, supongo.
No. Cuando pueda compraré mis lentes de contacto. Una caja si es posible.
― Lo dices como si usar lentes normales fuera algo terrible. Es lo mismo ― ríe divertida ―. Espera... ― entrecierra sus ojos ―. ¿Acaso te están quemando las pocas neuronas que quedan vivas en tu cerebro? ― cuestiona con evidente exageración mientras intenta de forma fallida ocultar su sonrisa.
Río falsamente.
― Muy graciosa, Wallace ― resoplo falsamente ofendido. Ella lo sabe porque solamente sonríe con inocencia.
― A ver, déjame probar.
Antes de que pueda enviarlo o protestar, me quita los lentes y se los coloca. Suelto una carcajada al presenciar la mueca que ser forma en su rostro. Pestaña varias como si quisiera adaptarse al aumento ―poco, pero existente― de los lentes, más sé que terminará mareándose antes de que lo consiga. Lo mismo me ocurrió los primeros días, pero ya me he adaptado.
― ¡Dios! ¡Ésta cosa es terrible! ― exclama mientras me entrega los lentes, sé que sólo lo dice para hacerme sonreír.
― Te lo dije ― murmuro a la par que me los coloco.
Me pierdo en su sonrisa y, sin pensarlo demasiado, la beso siendo gratamente correspondido. Exploro su boca mientras me deleito con el dulce sabor y la suave textura de sus labios.
Sus manos tímidas van a mi cabello y las mías, un poco más aventureras, se dirigen a su cintura.
― Te quiero, Jed ― murmura de la nada sobre mis labios.
Me separo un poco para observarla encontrándome con la hipnotizante galaxia azulada de sus ojos. Una sensación indescriptible se funde en mi pecho, prometiendo quedarse guardada allí por mucho tiempo.
― Te quiero, bella ― deposito un beso en su nariz, sonríe y no tardo en imitarla.
Tal vez no sepa lo que pase mañana, incluso en un par de horas, pero lo que si sé es que no voy a olvidar éste momento ni ninguno en donde esté presente ella, mi bella.
Bueno, aquí otro capítulo de este hermoso par 😍 Y se lo dedico a..._Griis_ Me gusta mucho tu historia, hermosa. Este cap es todito pa ti
¡Nos leemos pronto!
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Donde Estés [Trilogía Buenos Amores #1]
Conto― Jed, necesito un favor. ― Hola, Maddie. Yo bien, ¿y tú? ― No estoy para bromas, Jed. ― Amargada. Y dime, ¿en qué te puedo ayudar, bella? ― Necesito que me ayudes a fingir mi muerte. ― ¿Cómo? Espera, creo que oí mal. Repite lo que dijiste, por favo...